El Clásico derrumbó al Barça
Los de Xavi suman once puntos de los últimos 21. Además de la derrota ante el Madrid (1-2), pincharon ante Rayo (1-1), Girona (2-4); y este sábado ante el Valencia (1-1).
Se cae el Barça, que puede acabar la jornada 17 del campeonato, a dos del final de la primera vuelta, a nueve puntos del Girona. A los de Xavi ya les había faltado contundencia a principio de temporada, y habían concedido empates contra Getafe (jornada 1), Mallorca (jornada 7) y Granada (jornada 9). El Clásico de la jornada número 11 empezó a derrumbar al vigente campeón, que en las últimas siete jornadas han ganado sólo 11 puntos de 21 posibles. Al 1-2 contra el Madrid, con un tramo final de partido para olvidar, se han unido los empates en Vallecas (1-1) y Mestalla (1-1) y la derrota contra el Girona (2-4) en Montjuïc.
El Barça no sólo ha perdido efectividad en el área rival, como reclama Xavi. Tampoco es capaz de proteger resultados positivos como el de Mestalla. No es contundente en las áreas. Tampoco en el discurso del entrenador, que en la rueda de prensa del sábado se quejaba de la falta de ayuda de medios afines y recordaba que el año pasado el Barça también había arrancado flojo. Sin embargo, para estas fechas, el equipo de Xavi ya era líder (aunque pinchó en Nochevieja contra el Espanyol a la vuelta del Mundial); y en Arabia encontró el punto de armonía para volar hacia el título. Esta temporada, da la sensación de ir en dirección contraria. De 51 puntos posibles ya ha perdido 16; y los malos números se han extremado en los últimos partidos. Con 35 en la jornada 17, ganar LaLiga es una utopía.
Por el camino, el Barça no ha tenido a Pedri en los primeros pinchazos; y a Gavi en las últimas caídas. Pero mantiene su columna vertebral más allá de la lesión de Ter Stegen (la mejor parada del partido contra el Valencia fue de Iñaki Peña). Y es un equipo que tuvo muchos problemas de juego la temporada pasada, pero que acabó por ser reconocible gracias a su fiabilidad y a la fórmula de los cuatro centrocampistas. Este curso, Xavi se exigió una mejora en el juego que no ha llegado. El feeling con los jugadores, más allá de los puntos, tampoco surge. El Barça se derrumbó después del Clásico. Pero, realmente, no ha estado casi nunca esta temporada.
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