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ATLÉTICO DE MADRID

“Al llegar me dijeron, ‘en el Atleti se suda la camiseta, contra el Madrid se suda sangre’”

Futre recibió el homenaje del Atlético en su 35 aniversario de fichar por el club. “A partir del segundo derbi en el Bernabéu empecé a vivir como colchonero, profesional y extranjero”.

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“Al llegar me dijeron, ‘en el Atleti se suda la camiseta, contra el Madrid se suda sangre’”

Paulo Futre cumple 35 años... de rojiblanco. Más de la mitad de su vida, desde que llegó con 21, hasta rendirse al club que forma parte de su corazón. El portugués, que fue la gran baza electoral de Jesús Gil en 1987, es sin duda alguna una de las mayores figuras en la historia del club y uno de los mejores futbolistas en vestir su camiseta. Firmado como campeón de la Copa de Europa con el Oporto, Futre acabó ese año 1987 como Balón de Plata, el segundo mejor futbolista del mundo por detrás de Ruud Gullit. Posteriormente llegaron 215 partidos como futbolista del Atlético, en los que consiguió 60 goles entre sus dos etapas distintas de rojiblanco, además de múltiples asistencias, y conquistó como rojiblanco dos Copas del Rey, en 1991 y 1992, y un subcampeonato de Liga, ejerciendo también como capitán.

Futre, imagen esta temporada en los carnets de socio del Atlético, estuvo acompañado por su familia, amigos, excompañeros, mitos del club y un gran grupo de jugadores de la Academia que no quisieron perderse el acto. “Hoy rendimos un sentido y merecido homenaje a una leyenda del fútbol mundial. Un jugador con corazón rojiblanco, el mejor embajador e ídolo en la familia atlética. Se cumplen 35 años de su llegada a nuestro club. Un hombre auténtico, que siempre ha defendido la camiseta del Atlético con pasión, nos hizo vibrar y disfrutar como pocos y tengo el gran honor de ser su amigo y haber sido testigo de su fichaje. Yo también llevo 35 años en el club, hemos compartido mil y una historias junto a Jesús Gil, es un Atlético y así se lo demostró la afición antes del partido de septiembre contra el Oporto. Cuídate, no queremos sustos como el de hace unos meses (sufrió un infarto el pasado 22 de agosto). Muchas gracias por las grandes tardes que nos has dado, se te quiere, se te admira y esta siempre será tu casa”, indicaba Enrique Cerezo.

En el derbi hay que morir en el campo

Y le tocaba el turno a Paulo Futre. “Uno tiene sueños, pero nunca puede imaginar algo tan grande como lo que estoy viviendo ahora. Muchas gracias a toda la familia colchonera, a todos los compañeros, sin ellos no sería posible estar aquí. Un beso para Chema Candela, Arteche, Marcos Alonso y muchísimas personas más que ya no están aquí. Y, por supuesto, sin el presi Jesús Gil no estaría aquí. Y sin el Sabio, Luis Aragonés, tampoco. Lo primero que recuerdo a mi llegada es como los más veteranos, Arteche, Tomás... me dijeron que aquí hay que sudar la camiseta siempre, hasta la última gota. En todos los partidos darlo todo, pero, con respeto para los demás equipos, contra el Madrid hay que sudar sangre, hay que morir campo. Lo he escuchado todos los días y te entra una manía que el primer derbi fue increíble. Uno de los días más felices, ganamos 0-4 en el Bernabéu, hice un partidazo, sabía que contra el Madrid no podía fallar y menos en el Bernabéu. Después del segundo derbi en el Bernabéu, histórico con la roja en la acción con Paco Buyo, empecé a ser más atlético. Llegué aquí como extranjero, un profesional que lo iba a dar todo, pero a partir de ese partido empecé a vivir como colchonero, profesional y extranjero, pero ya como colchonero. No hay palabras para agradecer a esta afición. Tengo 56 años, en Portugal no puedo salir a la calle, porque estoy en activo en la tele y los niños me conocen. Pero aquí no salgo en la tele y los niños colchoneros vienen y me dicen Futre. Va pasando de generación en generación. Esta es la afición, somos únicos”.

El portugués, estuvo acompañado por miembros de la actual primera plantilla como Koke y Reinildo. El capitán describía a Futre. “Un orgullo estar en un acto tan bonito. Desde pequeñito todo el mundo hablaba de ti, eras el ídolo de mucha gente y me quedo con una anécdota contigo de hace dos años, antes de ganar la Liga me llegó un mensaje mandando ánimos para mí y para todo el equipo que nos dio fuerzas. Eres una leyenda y un ídolo para todos los atléticos, te lo agradecemos todos”.

Y si hay que hablar de ídolos y figuras en el Atlético, nadie como Fernando Torres: “Tú lo has dicho, los atléticos van pasando de generación en generación el nombre de Futre. En mi caso fue mi abuelo quien me hablaba de él, yo era muy jovencito, ocho o nueve años. Antes era más difícil encontrar vídeos, pero era lo que mi abuelo me había contado. Dinámico, pasión, como es el atlético, por eso se le ha querido y se le quiere tanto. Un atlético de corazón, aunque no de nacimiento, se hizo atlético de corazón. Sabemos que nunca nos va a fallar. Fue quien me llamó estando como director deportivo para entrenar con el primer equipo y cambió mi vida”. A lo que Futre añadía que “yo veía a Fernando con 16 años y me veía a mí en Portugal. Con todo el respeto le dije al entrenador está preparado para jugar con los mayores pese a la edad que tenía. El entrenador le llamó 15 días después, debutó contra el Leganés y al siguiente partido marcó contra el Albacete”.

Tomás: “Le vinieron bien mis patadas”

Excompañeros como Manolo (”Crecí con él, viví toda esa experiencia y eso no se me va a olvidar en la vida. Y como persona es un 20, muy integra, humana, te lo da todo y tengo la fortuna de ser su amigo, es un embajador de los valores del Atlético, pasión, lealtad, sentimiento... un ejemplo para todos”); Tomás (”Sentimos admiración por Paulo. Era un genio y lo sigue siendo. En el vestuario era un genio también, un genio loco a su manera y su forma. Una persona entrañable y diferente. Le vinieron bien mis patadas, cuando le entraban los defensas duros de España podía decir, ya me entreno con Tomás”); Abel Resino (”Se ganó a todos los compañeros, fue respetado, fue un líder y gracias por ser mi amigo y ser un gran compañero”) o Solozábal también estuvieron presentes.

Su hijo Fabio, ahora entrenador en las categorías inferiores del Atlético, confesaba cómo el nombre de su padre se ha ido transmitiendo. “No hay palabras que describan lo que puedo sentir cuando veo la devoción y el amor de la afición hacia mi padre. hace dos años en una charla con los alevines hablamos de quien es nuestros ídolos, y suelta un niño que mi padre es el ídolo de su padre. Mi padre va a estar de generación en generación. Tengo mucha suerte, porque mi referente en la vida y en el fútbol lo tengo en una persona, en mi padre”.

También su hijo Paulo tomaba la palabra. “Yo soy Paulo Futre, el otro, el de Aliexpress. Han sido muchos años con este repertorio de bromas. Una vez le dije que él era el original y yo la marca blanca y se giró y me dijo ‘¿Blanca? será rojiblanca’. Crecimos en muchos países, y vimos que el cariño de la gente en España, no entendía, pero yo pensaba que le querían más que mi abuela. Y yo decía no sé por qué, si se pasa el día en calzoncillos en casa. Luego nos fue enseñando videos, jugadas, caños, simulaciones de penaltis, su clase de piscinazos, que estaba muy orgulloso. Y la pasión que transmitía la gente del Atleti con él no lo he visto en otros equipos, era extraordinario. Él nació en Portugal, no sé a qué edad se enteró de que existía el Atlético, pero al final te rindes a que el tío de los calzones era muy bueno. Son una historia de amor con el Atlético por las dos partes. Nos dio un gran susto, pero hasta eso lo regateó. Es un gran orgullo ser Paulo Futre, el otro”.

23/02/23 HOMENAJE A PAULO FUTRE
CON SUS HIJOS
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23/02/23 HOMENAJE A PAULO FUTRE CON SUS HIJOS PEPE ANDRESDiarioAS

La motivación de Luis Aragonés

Futre también quiso recordar la capacidad de Luis Aragonés para motivar a sus futbolistas y recordó aquella anécdota en la final de Copa del Rey de 1992. “Un partido contra el Madrid es más que un partido y una final es mucho más que una final. Este día, este partido el entrenador tenía que estar mejor que nunca. Estaba con Manolo en la habitación la noche antes y tenía que tomar una pastilla para dormir, estaba nervioso. Me golpean la puerta. El míster, abre. Yo estaba k.o. y levanta la persiana, coge una silla y se sienta a mi lado. ‘Míreme a los ojos’, me decía, pero la luz me hacía daño. Yo le decía ‘no puedo míster, déjeme dormir’. ‘Portugués, míreme a los ojos. ¿Sabes por qué estoy aquí? Quiero que me cuente la historia de Pizo Gómez con los jugadores del Madrid’. En ese momento me levanté y le pregunté qué quería saber. Tenía una rabia dentro de mí años después, tanto odio. Fue dos años antes. Le digo, ‘Pizo venía para el entrenamiento y para en un semáforo y a su lado paran cuatro jugadores del Madrid. Abren las ventanas y le dicen Pizo eres mi ídolo, ¿Me das un autógrafo?’. Cuando Pizo va a por ellos, porque le daba igual ser uno contra cuatro, se marchan. Y nos lo cuenta en le vestuario.

Para todos fue un insulto no a Pizo, a todo el Atlético. A todo el equipo, presidente y afición. También se metieron con su mujer. Yo se lo cuento a Luis y me dijo ‘ahora usted no me puede fallar a mí, no puede fallar al presidente, no puede fallar a sus compañeros, a la afición, pero especialmente no puede fallar a Pizo Gómez. Porque hoy los jugadores del Madrid le van a pedir autógrafos a usted después del partido. Porque va a ser el ídolo después del partido. Hoy está prohibido fallar’. Y le dice a Manolo, ‘y usted, además de ser testigo, tampoco puede fallar’. Ese era Luis. Años después le pregunté por qué me despertó y no se esperó al desayuno del día siguiente. ‘Quería que empezase a jugar la final en ese momento’, me contestó.