Un Castilla madrugador

Catorce días de vacaciones. No han tenido más los jugadores del Real Madrid Castilla este verano. El último partido del playoff de ascenso, ante el Eldense, lo disputó el filial blanco el pasado domingo 25 de junio, y exactamente dos semanas después los pupilos de Raúl ya se han puesto en marcha. Antes incluso que la pretemporada pasada, en la que se incorporaron al trabajo el 12 de julio. En aquel momento, además, la temporada fue más corta para los blancos, pues no venían de disputar una promoción de ascenso a Segunda División. En la charla inicial estuvieron presentes Carrillo, Álvaro Rodríguez y Vinicius Tobías, aunque posteriormente se ejercitaron con el primer equipo.

Raúl quiere aprovechar la inercia de un curso pasado en el que el Castilla terminó rayando a un gran nivel y se quedó a minutos de ascender a la categoría de plata del fútbol español. No obstante, resulta llamativa la prontitud de la vuelta a los entrenamientos por la dureza de la pasada campaña. 42 partidos disputó el filial madridista (38 de fase regular y cuatro correspondientes a las eliminatorias del playoff). Varios miembros de la plantilla acabaron incluso con más en sus piernas. Jugadores como Gonzalo o Nico Paz, que fueron fundamentales para Raúl en el tramo final de la temporada, combinaron su participación en el Castilla con partidos en el Juvenil A, tanto de Youth League, como de División de Honor y de la Copa del Rey Juvenil.

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A la espera de salidas

La plantilla deberá reestructurarse y serán varios los jugadores que dejarán el equipo. Todo apunta a que principalmente tres de los veteranos abandonarán el Castilla este verano: Arribas, Dotor y Rafa Marín. Tres jugadores que fueron pilares del filial blanco el curso pasado y en los que equipos de Primera y Segunda División han puesto sus ojos. Este lunes, con permiso del club, ninguno de ellos ha acudido a Valdebebas.