Julen Guerrero: “Barça y RFEF deben medir el segundo año de Lamine”

La vida va tan rápido para Lamine Yamal que, hace poco más de un año, y cuando todavía no había cumplido 16, estaba jugando la semifinal del Europeo Sub-17 contra Francia en el Pancho Arena de Felcsút (Hungría). Un año después, está a punto de jugar otra semifinal España-Francia. Pero esta, de Eurocopa absoluta. Nada menos que en el Allianz Arena. Su seleccionador el curso pasado, y flamante nuevo técnico del Amorebieta, Julen Guerrero (7-1-1974), atendió a AS. Pocos como él, seleccionador de Lamine y niño prodigio en la década de los 90, para hablar del azulgrana.

¿Hubiera esperado hace un año que Lamine estuviese ya en esta Eurocopa absoluta?

Vamos a ver. Yo ya le llevé con un año menos. Estaba dando pasos por delante del resto. Llegar a la élite luego depende de muchos factores. Xavi no le miró el DNI en el Barça; y tampoco la FEF. Eso ha permitido que los plazos se vayan adelantando.

¿Cómo es Lamine?

Lo que se ve en los vídeos que publica. Un chico alegre. Ahora, supongo que le toca aclimatarse también a gente algo más mayor.

¿Recuerda algún consejo que le diera, personal o táctico? Venía de aquella desconvocatoria en marzo por un episodio de indisciplina...

Sobre todo, el trabajo. Él venía de jugar en el Barça, en una categoría en la que son muy superiores. Un Europeo Sub-17 ya tiene equipos potentes, tienes que trabajar el colectivo; y dar ejemplo. Y, a partir de ahí, tratar de explotar sus características, ver qué nos podía dar diferente.

Lo que más destacan los compañeros que se entrenan con él es su capacidad de improvisación.

Sí, es un futbolista distinto. Nosotros lo que intentábamos es que jugase lo más arriba posible porque es un jugador capaz de salir por todos los lados. El objetivo es que se desgastase poco lejos del área para aprovechar su talento cerca de la portería. Es un jugador definitivo en los metros finales.

¿Va para marcar una época o nos estamos pasando?

Ya está marcando una trayectoria, pero hay que tener mucha tranquilidad con él. Está haciendo muchísimo esfuerzo esta temporada. Ha jugado mucho en su club y en la Selección. Hay que ir con cuidado y paciencia. Vamos a ver la segunda temporada de Lamine. Es muy importante. Creo que tanto el Barça como la Federación tienen que medir muy bien la gestión del futbolista para que no haya un receso.

¿Cree que la ha venido bien tener en la Eurocopa a alguien que habla su lenguaje como Nico al lado?

Sin duda. Por edad, es de los jugadores más cercanos a Nico. Pero también por su carácter.

Usted también fue un niño prodigio. Detrás de Julen Guerrero también hubo un boom. ¿Qué debe hacer Lamine para no perder el foco?

Centrarse en el fútbol. Lamine está conociendo, o va a conocer cosas, que le corresponden a gente más mayor, dentro y fuera del fútbol. Es fundamental que viva para esto y trabaje para que vengan las menos lesiones posibles. Y debe rodearse y necesita gente que le diga las cosas como son; no lo que él quiere oír.

¿Usted lo consiguió?

Sí. La verdad que en ese sentido creo que fui una persona a la que su club, el Athletic, cuidó mucho. Supe rodearme de gente que me supo aconsejar de verdad y fui capaz de hacer una carrera.

¿Qué cree que hará Nico?

Estamos deseando que se quede porque el Athletic tiene un equipo destinado a grandes cosas. Y que ya las está consiguiendo, como la Copa de este año.

¿Le ha sorprendido su protagonismo en la Selección? Este año ya lideró al Athletic en la final de La Cartuja.

Es eso. Él ya está acostumbrado. Ha ido cogiendo peso y asume riesgos. Está con confianza y preparado. No me está sorprendiendo lo que está haciendo.

Por cierto, ¿cómo ve la semifinal?

Pues creo que España está muy bien. De las cuatro semifinalistas es la que más confianza transmite. Además, está jugando con frescura. Eso sí, Francia no necesita jugar bien para ganar y eso la convierte en peligrosa. Es fuerte físicamente. Si España hace el primer gol, tendrá mucho ganado.

Y usted, a por un nuevo proyecto en el Amorebieta.

Sí. He estado un año tranquilo, viendo fútbol, sistemas de trabajo. Era bueno seguir desarrollándome como técnico. Ha surgido esta oportunidad en el Amorebieta. Es un proyecto sencillo, humilde, y en el que hay puesta mucha ilusión. Dentro del presupuesto, podemos hacer un buen equipo con chavales que lleguen con ilusión y vengan con hambre. Vamos a ver de lo que somos capaces.