"Tenemos otra oportunidad"

El Eibar se subió al liderato el 21 enero, en la jornada 24. Ya antes había estado rondando las dos primeras plazas, pero desde entonces hasta el última, la del domingo que decidía el ascenso directo, disfrutó de ese privilegio. Fueron cuatro meses y 18 jornadas en las que el equipo armero se vio en el camino perfecto para regresar a la élite. Pero de repente, se vio paralizado por el miedo y, a última hora, falló. En el último instante, ante un colista Alcorcón sin objetivos, fracasó de forma lastimosa y se ve abocado a la promoción, en la que pocas veces asciende el tercero. Casi mil personas hicieron el esfuerzo de acompañar al equipo hasta Santo Domingo y recibieron un soberano sopapo. Garitano queda muy señalado, porque el líder especuló demasiado, no supo ni defender el empate a cero. Tras la debacle manifestó que no querían ir a lo loco y era preferible mantener el orden, peo este no apareció por ningún lado. Sus cambios fueron muy conservadores y el cuadro guipuzcoano se ahogó en sus miedos.

Ahora toca levantarse en tiempo récord, en cuatro días, sin tiempo para lamentaciones. Vendría bien un mensaje de la presidenta Amaia Gorostiza intentando elevar los ánimos. El Eibar felicitó a Almería y Valladolid y se ha puesto en modo playoff. "Que 80 puntos no nos hayan bastado para ascender de forma directa deja claro el temporadón que habéis hecho. ¡Disfrutad! Este club sabe lo que es sufrir, luchar y conseguir lo imposible. ¡Volveremos a hacerlo! Ha sido un golpe muy duro, pero somos el Eibar, tenemos otra oportunidad y vamos a afrontarlo todos juntos, como siempre", ha lanzado la entidad a través de las redes sociales.

Llorente tiró de veteranía y ejerció de portavoz del vestuario. Primero tuvo que consolar a bunosn cuantos compañeros que acabaron destrozados llorando sobre el verde. "Es un momento dificil para todos, estamos hundidos. Había muchísima ilusión por subir directamente, la oportunidad era inmejorable, pero esto es fútbol, si no eres capaz de dar lo mejor de ti y hacer lo que vienes demostrando durante todo el año, pueden pasar estas cosas, Ojalá que esto nos sirva de lección, cuando antes pasemos página mejor, tenemos otra oportunidad con el playoff, a darlo todo ante el Girona", proclamó el delantero riojano. El campeón del mundo considera que toca cambiar el chip rápidamente y pensar en el Girona, "ojalá seamos capaces de dar lo mejor de nosotros en ambos partidos, y de llegar a la siguiente fase".

Los que no fallan son los hinchas. "Estamos orgullosos del acompañamiento que hemos tenido, cómo nos han seguido toda la temporada. Teníamos ganas de dedicarles el ascenso y verlos felices, pero no fuimos capaces, es un golpe muy duro y ojalá aprendamos de él. Seguimos vivos y con su ayuda y apoyo continuaremos luchando hasta el final con ganas de llevar al Eibar hasta donde se merece", agregó el delantero azulgrana. Constató que había tratado de animar a los compañeros, "lo teníamos tan cerca que duele muchísimo, pero no queda otra que mirar para delante".

"Es momento de demostrar lo que hemos construido durante toda la temporada. Estamos más convencidos que nunca y estamos más unidos que nunca", reflejaba Atienza, uno de los más afectados, y que acabó abrazado por media grada en Alcorcón para ser consolado. Habrá nuevo viaje en menos de una semana, a Girona el jueves, con entradas a 15 euros, que se pueden adquirir hasta el miércoles a las 12:00. El club pone autobuses gratuitos, que partirán el mismo día del partido a las cinco de la madrugada y volverán a la conclusión de ese primer compromiso del playoff, siempre que haya un mínimo de 40 personas.

Garitano también reflejó que el vestuario acabó destrozado "pero no nos queda otra que levantarnos y no tengáis ninguna duda de que nos levantaremos como siempre lo ha hecho este equipo". Al menos sus palabras sí fueron un chute anímico para que la gente esté un poco más tranquila: "El deporte es un entrenamiento para las cosas que te pasan en la vida. Es un día muy difícil de digerir, pero tenemos que mirar al frente. Si te dan una hostia de estas y no te levantas, es que no vales para el deporte".

En la jugada del gol, había una defensa bien posicionada, pero Zarfino definió con mucha facilidad.  El Eibar fue un manojo de nervios con el balón y cometió errores clamorosos fruto de la tensión por todo lo que estaba en juego. Tras el descanso, reforzó la parcela central sacando a Atienza por Rahmani, pero no supieron aguantar el empate a cero ni acertar en las ocasiones que tuvieron. Los antecedentes este año ante el Girona, al menos, son alentadores: 4-2 en Ipurua y 0-1 en Montilivi.