Esta Eurocopa Sub-21 tan atípica llega a su momento decisivo. El aplazamiento del campeonato absoluto, que se jugará en las fechas que estaban reservadas para la Sub-21, provocó que por primera vez el torneo se jugara en dos fases: la de grupos en marzo y los cruces decisivos (cuartos, semifinales y final) entre el 31 de mayo y el 6 de junio. Por primera vez se ampliaban los participantes a 16 (antes eran 12), añadiendo una ronda más (cuartos de final) y la fase de grupos dejó unos cruces muy atractivos. Con la única sorpresa de la eliminación de Inglaterra, todas las favoritas se colaron entre las ocho mejores. Francia, Portugal, España, Italia, Alemania, Holanda, Croacia y Dinamarca pelearán por el campeonato. Los mejores jóvenes de Europa (con excepción de los que han ido a la Eurocopa absoluta) se dan cita en Eslovenia y Hungría en un torneo que históricamente ha sido un escaparate para llamar la atención de los grandes clubes.

Pocas veces hubo un favorito tan claro, al menos sobre el papel y por nombres en su convocatoria. Es el caso de Francia, que lleva una selección que podría perfectamente competir con garantías en cualquier torneo absoluto. Basta mirar el valor de las plantillas para comprobar su superioridad: el valor de mercado en Transfermarkt de los 23 citados por Francia es de… ¡525,4 millones de euros! Una auténtica barbaridad si se compara con los demás: la segunda con más valor es Holanda (189 millones) y la tercera Portugal (181). España es cuarta, con un valor de 167,3 millones de euros. La plantilla francesa vale casi el triple que cualquier otra selección del torneo.

Eso, como siempre, es sobre el papel. Porque el déficit que siempre tiene Francia en estos torneos es que les cuesta hacer un equipo. Algo que precisamente es el punto fuerte de España, porque pasan las generaciones, cambian los nombres pero Luis de la Fuente siempre consigue armar equipos de garantías. Y lo hace con una premisa clara: conseguir que La Rojita sea más un equipo que una selección. O una familia, como le gusta llamarlo al seleccionador español.

Ese carácter competitivo también es una virtud de otras selecciones como Italia o Alemania. Por eso, Francia es favoritísima sobre el papel pero no tanto si se analiza su rendimiento sobre el campo, como quedó demostrado cuando se vio sorprendida por Dinamarca (0-1) en su estreno en el campeonato allá por marzo.

Con el torneo presentado y analizado de manera global, pasemos a analizar uno por uno a las diferentes selecciones.

La Rojita realizó una fase de grupos excelente, donde no le pesó la presión de debutar contra Eslovenia, anfitriona, en el primer encuentro (0-3), supo resistir las malas artes de los italianos en el segundo partido (0-0) y sentenció contra la República Checa en el encuentro decisivo, en el que ganó (2-0) a pesar de que le valía un empate para pasar a los cuartos de final, donde le espera Croacia este lunes (18:00, Cuatro).

Para esta fase decisiva, Luis de la Fuente ha introducido seis cambios en la convocatoria con respecto a marzo. Estos son los 23 elegidos:

Porteros: Álvaro Fernández (Huesca), Josep (Leipzig) e Iñaki Peña (Barcelona).

Defensas: Mingueza (Barcelona), Óscar Gil (Espanyol), Francés (Zaragoza), Guillamón (Valencia), Cuenca (Almería), Miranda (Betis) y Pedrosa (Espanyol).

Centrocampistas: Zubimendi (Real Sociedad), Moncayola (Osasuna), Fran Beltrán (Celta), Gonzalo Villar (Roma), Cucurella (Getafe), Manu García (Sporting), Sancet (Athletic) y Brahim (Milan).

Delanteros: Puado (Espanyol), Bryan Gil (Eibar), Yeremy Pino (Villarreal), Fer Niño (Villarreal) y Abel Ruiz (Braga).

Se caen con respecto a la convocatoria de marzo el portero Álex Domínguez, los defensas Pipa (por unas molestias en el pubis) y Pozo (sale de lesión), los centrocampistas Riqui Puig y Barrenetxea y el delantero Dani Gómez.

En marzo ya se analizó el uno por uno de los convocados por Luis de la Fuente (puede consultarlo aquí), por lo que en esta ocasión nos limitaremos a analizar a los seis futbolistas que entran como novedades.

Iñaki Peña (Barcelona)

Miguel Ángel España, preparador de porteros de las inferiores, tiene plena confianza en él porque lo conoce desde Sub-17. Es el tercer portero del Barça, pero siempre que ha ido con la Selección ha demostrado buen nivel. Sin opciones de jugar porque Álvaro es el titular y Josep el segundo, su convocatoria es un premio porque fue el tercer portero durante toda la fase de clasificación.

Óscar Gil (Espanyol)

Las lesiones en el lateral derecho son la piedra en el zapato de la Selección este año en categoría absoluta y también Sub-21. De la Fuente tiene lesionado a Pedro Porro (el que hubiera sido titular), a Morey (se cayó de la anterior lista), a Pipa (que jugó en marzo) y Pozo sale de lesión. Ante esta plaga de lesiones tiene su oportunidad Óscar Gil, que ha realizado una gran temporada en el Espanyol. En principio, parte con menos opciones que Mingueza en este puesto, pero tiene opciones cuando De la Fuente busque más profundidad.

Francés (Zaragoza)

Es el más joven de la lista junto a Yeremy Pino (ambos del 2002). Ha realizado un año fabuloso en el Zaragoza a pesar de su juventud y puede jugar tanto de central (su posición más habitual) como de lateral derecho, porque tiene un físico muy poderoso. Le siguen varios grandes de Europa, entre ellos la Juventus, y esta oportunidad con la Sub-21 antes de tiempo (su ciclo empieza en septiembre de 2023) puede ser el empujón definitivo.

Sancet (Athletic)

Los centrocampistas es la línea que menos ha tocado De la Fuente, pero los pocos minutos de Riqui Puig en el Barcelona, unido a su gran final de temporada en el Athletic, le abren las puertas del torneo. Es un mediapunta técnico, con llegada y que siempre ha gustado mucho en la Federación.

Bryan Gil (Eibar)

No estuvo en marzo porque Luis Enrique le convocó para la Absoluta. Ahora refuerza a la Sub-21 y está llamado a ser el jugador que ponga la magia en ataque junto a Brahim. Tiene descaro, desborde y se asocia bien. En los partidos que disputó en la fase de clasificación siempre destacó.

Fer Niño (Villarreal)

La gran sorpresa de la lista, porque ha dejado fuera a Dani Gómez, que hizo dos goles en el partido decisivo de la fase de grupos contra la República Checa. A Luis de la Fuente le encanta como revulsivo, un papel que desempeña de manera habitual en el Villarreal. Ocho goles esta temporada. Esa facilidad para marcar, salga de titular o de suplente, es lo que ha despertado el interés del seleccionador.

El rival de La Rojita en el cruce de cuartos de final. Una selección a la que debería superar España, pero con algo inevitable: sólo con mucho sudor se consigue ganar a Croacia. Muchos de sus jugadores ya han salido de la liga local (hasta once) y en el ADN croata va un espíritu competitivo que les convierte en un rival muy incómodo.

Además, tienen jugadores de mucho talento. Josko Gvardiol es el más destacado. Es un central zurdo de sólo 19 años por el que el Leipzig ha pagado 19 millones de euros al Dinamo Zagreb para que juegue en la Bundesliga a partir de la próxima temporada. De sobra conocido es el acierto del equipo alemán cuando hace este tipo de desembolsos por un futbolista joven. Hay tres futbolistas de Croacia que sólo estarán disponibles para el encuentro contra España. Son Domagoj Bradaric, defensa del Lille, Josko Gvardiol y Lula Ivanusec, estos dos últimos defensa y centrocampista del Dinamo Zagreb. Ganen o pierdan abandonarán la concentración porque Dalic, entrenador de la absoluta croata, les ha convocado para disputar la Eurocopa de este verano.

 

De la eliminatoria entre Portugal e Italia en semifinales saldría el rival de España en semifinales si la Rojita se clasifica. Los portugueses se han ganado la condición de aspirantes después de lo demostrado en la primera fase: pleno de victorias, con seis goles a favor y ninguno en contra. Tiene futbolistas instalados en la élite del fútbol europeo a pesar de su juventud y despliegan un fútbol muy vistoso, combinando posesiones largas con contragolpes y fútbol vertical. Dominan casi todos los registros y a ello le añaden una gran seguridad defensiva, liderados por Diogo Leite (el central del Oporto está a un nivel sobresaliente).

En los días previos al torneo han tenido las ausencias de Correia (Valencia) y Trincao (Barcelona) al dar positivo por coronavirus, algo que les resta potencial. A pesar de ello cuentan con grandes jugadores como Florentino o Leao, entre otros. Los portugueses llevan años haciendo muy buen trabajo en las categorías inferiores y le tienen ganas a este torneo: han sido dos veces subcampeones (2015 y 1994) y en otra edición terceros (2004). Con esta generación sienten que por fin deben dar el paso al frente para levantar su primer torneo.

Dejaron una imagen lamentable en la fase de grupos, con poco juego y una media de dos expulsados por partido. Con todo eso, siguen vivos y eso les convierte en peligrosísimos porque ahora han podido hacer cambios en la convocatoria para tener a todos los jugadores disponibles.

Se enzarzaron demasiado en el juego sucio, con patadas y malas artes, pero la realidad es que si se centran exclusivamente en jugar al fútbol tienen jugadores de muchísimo talento y pueden competir de tú a tú contra cualquiera. Estuvieron contra las cuerdas, con la clasificación complicada… y sobrevivieron. Un clásico en Italia, a la que normalmente hay que eliminar varias veces en un torneo para eliminarla definitivamente. Por eso, ahora nadie quiere un cruce a vida o muerte ante ellos. Aparte de ese otro fútbol al que recurrieron con excesiva dureza, los italianos llevan un grupo cargado de buenos jugadores: Lovato, Zappa, Ricci o la pólvora arriba de Pinamonti, Cutrone y Scamacca.

Tras dos empates en los dos primeros partidos (Alemania y Rumanía), se clasificó en un grupo igualadísimo gracias a una goleada contra Hungría (6-1). Tiene un grupo de jugadores llamados a hacer cosas grandes en el futuro. Destaca el central Botman, central indiscutible en el Lille que ha sido campeón en Francia. También cuentan con Bakker, lateral izquierdo que ha jugado muchos encuentros de nivel este curso en el PSG. Arriba, Boadu tiene mucho gol: 15 ha hecho este curso con el AZ. Stengs, extremo que también juega en el AZ, es peligrosísimo y para completar un gran ataque tienen a Justin Kluivert, del Leipzig. Necesitarán la mejor versión de todos si quieren tener alguna opción contra Francia.

Por nombres es la indiscutible favorita para ganar el campeonato, aunque en la primera fase demostró que todavía les falta compenetrarse mejor. Perdieron contra Dinamarca en su debut, en lo que significó la gran sorpresa del torneo, y eso les hizo ir con una presión extra en los otros dos partidos, en los que ganaron a Islandia y Rusia. Ese precisamente puede ser una ventaja: esos partidos a vida o muerte les hicieron crecer como grupo.

En cuanto a nombres, es imposible quedarse con uno. De hecho, sería imposible quedarse con cinco. La nómina de jugadores asusta de principio a fin: Upamecano (fichado por el Bayern), Konaté (se va al Liverpool), Badiashile, Camavinga, Aouar, Fofana, Diaby, Ikoné, Gouiri… La única razón por la que muchos de estos futbolistas están en la Sub-21 y no en la Eurocopa absoluta es porque el primer equipo francés también tiene un nivel sobresaliente, pero por plantilla tendrían nombres para competir con garantías en categoría absoluta. Si consiguen crecer como grupo serán muy difíciles de batir.

Es la gran sorpresa del campeonato hasta el momento. Pudo con la todopoderosa Francia en el primer partido y su hoja de resultados es impecable: pleno de victorias con seis goles a favor y ninguno en contra. Por nombres no asustan, aunque tienen futbolistas interesantes como Lindstrom (mediapunta talentoso) o los extremos Bruun Larsen y Dreyer.

Son un equipo compacto, ordenado y muy buen trabajado tácticamente. La principal duda que arrojan es cómo van a responder ahora que llega el momento de la verdad ante las mejores selecciones de Europa.

Por nombres es una de las plantillas más flojas de los últimos años. Les costó mucho clasificarse (pasaron segundos por goalaverage y empatados a puntos con Holanda y Rumanía). Ocurre con ellos algo similar a Italia: si han conseguido llegar vivos hasta aquí con una primera fase tan floja, ahora se vuelven realmente peligrosos. El seleccionador, Stefan Kuntz, tiene una larga experiencia, siempre forma grupos competitivos y fue campeón en 2017 (derrotando a España en la final). Entre sus jugadores más destacados está Baku (lateral derecho del Wolfsburgo), Maier (capitán de la selección y mediocentro del Arminia Bielefeld) o Berisha, su gran estrella y que este año ha marcado 14 goles y ha repartido diez asistencias en el Salzburgo.