Tres décadas de goleadores marcadas por el mismo embrujo
Quini hizo casi tantos goles en 15 temporadas de rojiblanco como todos los delanteros fichados para ocupar un vacío que solo consiguió llenar David Villa
La capacidad goleadora ha vuelto a convertirse en un problema para el Sporting esta temporada y es quizá el principal quebradero de cabeza para Miroslav Djukic en estos momentos. Mientras la capacidad defensiva del equipo se mantiene a un buen nivel, la falta de gol preocupa porque los tres delanteros específicos del equipo, Djurdjevic, Álvaro Vázquez y Pablo Pérez, solo suman nueve tantos en 31 jornadas; y la aportación del resto del equipo no ayuda a compensar esa carencia en los referentes del ataque. Así es difícil estar arriba.
El problema del gol no es nuevo en el Sporting y es cíclico desde hace tres décadas. Ése es el tiempo que ha pasado desde la retirada del legendario Enrique Castro, el inolvidable ‘Quini’. El popular ‘Brujo’ consiguió en sus 15 temporadas de rojiblanco 227 goles exclusivamente en la competición de liga (fueron más de 600 en todas las competiciones), que le permitieron conquistar cinco trofeos ‘Pichichi’.
| Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
|---|
| Próximos partidos |
|---|
El promedio de Quini es de 15 goles por temporada en el Sporting. Pues bien, desde que colgó las botas en 1987 y durante los cuatro años que estuvo en el Barça, el equipo gijonés contó con 26 delanteros fichados para ocupar ese hueco y de ellos solo cinco alcanzaron o superaron en una temporada esa cifra media que fijó el mítico goleador: Milan Luhovy (16 goles en su mejor año), Julio Salinas (18), Mate Bilic (15), Stefan Scepovic (23) y Michael Santos (17).
El ‘Guaje’, el único
Por encima de todos ellos, estuvo David Villa, que surgió en Mareo como primer y casi único heredero hasta ahora del legado de Quini. Nada menos que 18 goles marcó el ‘Guaje’ en su primera temporada (2001-02) y fue el primero en llegar a las 20 dianas, al año siguiente en que se produjo su doloroso traspaso al Zaragoza.
“Yo estaba muy feliz en el Sporting y aún era muy joven, así que no tenía ninguna prisa, pero realmente no hubo otra opción en ese momento; el Sporting necesitaba el dinero para subsistir y mi traspaso era una de las maneras de conseguirlo”, recordó Villa recientemente en una entrevista concedida a VIP Deportivo. El delantero de Tuilla se fue después de haber conseguido 38 goles en las dos únicas ligas que jugó en Segunda (2001-02 y 2002-03), que fueron de rojiblanco con 20 y 21 años respectivamente.
Casi una década después del ‘fénomeno Villa’ se produjo el caso aislado de Stefan Scepovic. El serbio logró llegar a los 23 goles en aquella temporada 2013-14. Sin embargo, quince de ellos se produjeron en la primera vuelta, que dio paso a una sequía goleadora de casi dos meses para ser traspasado finalmente al Celtic de Glasgow al concluir la campaña. Su reciente segunda etapa en el club, de la mano de Miguel Torrecilla, fue un fracaso con cuatro goles en media liga 2017-18.
De Flores a Djurdjevic
El adiós de Quini trajo una larga lista de incorporaciones de delanteros en busca del gol para el Sporting. Lucho Flores fue el primero, aunque compartió vestuario con el ‘Brujo’ en la última temporada en activo del legendario jugador (1986-87). El mexicano consiguió 12 goles en esa campaña que acabó con la clasificación del equipo para la Copa de la UEFA.
Antes de Flores, mientras Quini estuvo en el Barça, el club había buscado sustituto en tres ligas tan diferentes como la portuguesa, la yugoslava y la argentina. Pero ni Gomes, que sería después Bota de Oro en Europa, ni Savic ni mucho menos Rinaldi consiguieron ocupar el vacío. Entre los tres consiguieron 15 goles, 11 once de ellos de Gomes. Por eso la referencia hay que tomarla desde la retirada definitiva del ‘Brujo’.
A partir de ahí, la lista de delanteros fichados, es decir, no salidos de la cantera, con diez o más goles como mejor registro de su período en el club, es la siguiente: Narciso (11), Luhovy (16), Pier (11), Julio Salinas (18), Cheryshev (13), Manel (11), Soto (10), Bilic (15), Ismael Irurzun (13), Calandria (12), Biaggini (11), Congo (11), Barral (11), David Rodríguez (12), Scepovic (23), Lekic (12), Sanabria (11), Michael Santos (17) y Djurdjevic (11). Son 19 jugadores que suman 249 goles en su mejor momento en El Molinón.
A esa lista habría que añadir aquellos otros supuestos goleadores que no fueron capaces de pasar la decena de tantos y que pasaron por el Sporting con más pena que gloria. Son los casos de Wilmar Cabrera (2), Stanic (7), Yekini (3), Kucharski (2), Popovic (0), Kamatxo (4) y David Karanka (1).
Joaquín, máximo goleador
Capítulo aparte merecen los canteranos y aquellos centrocampistas con capacidad goleadora. Entre los primeros, el caso de David Villa está fresco en la mente de todos, pero al primer jugador local al que hay que remitirse es al otro Villa, Joaquín.
El delantero de La Camocha logró 12 goles recién retirado Quini. Después llegó la aparición fugaz de Luis Enrique (14 goles) y Monchu (11), traspasados en un abrir y cerrar de ojos. Mientras que el último delantero llegado del filial fue el toledano Guerrero, que después de hacerle cuatro goles al Oviedo en Segunda B, dio el salto al primer equipo, convirtiéndose en el máximo realizador del Sporting, con 11 dianas, en la temporada del último ascenso, de la mano de Abelardo Fernández.
Pero si hay un dato curioso en el repaso al gol de las tres últimas décadas en el Sporting. Ése es Joaquín Alonso, el jugador que más vestido la camiseta rojiblanca, centrocampista, capitán de los últimos años de esplendor del club, y que fue también el máximo goleador del equipo en las dos temporadas siguientes a la retirada de Quini. Joaquín logró materializar 15 tantos en la campaña 1987-88, por delante de Joaquín Villa, y diez en la siguiente 88-89.
Al caso de Joaquín hay que unir los de otros centrocampistas con cifras notables de goles. Ahí está el recuerdo para Igor Lediakhov (12), Kike Mateo (12) y Diego Castro (10). En este apartado, Carmona es el ejemplo de la actual plantilla, con nueve goles hace dos temporadas. Pero la aportación de goleadores en el resto del equipo de Djukic es bajo esta temporada.