Consecuencias del parón en el fútbol de la Región

Nadie sabe lo que puede pasar con los campeonatos ligueros, ni en el fútbol profesional y mucho menos en la categoría de bronce. Muchas ideas y propuestas salen de los clubes, cada uno en busca de sus intereses deportivos y económicos pero a día de hoy no se sabe lo que piensa la RFEF. El organismo federativo dejó claro que seguirá las órdenes del Gobierno en cuanto a la fecha de regreso a la competición, ya sea para finalizar la actual campaña o para iniciar la próxima.

En esta situación, los intereses de los cuatro clubes murcianos son opuestos aunque con matices. Por ejemplo, al Cartagena le puede interesar que no se juegue más si eso conlleva el ascenso a Segunda como líder del Grupo IV, algo que perjudicará al Yeclano ya que no disputaría una histórica eliminatoria de ascenso a la división de plata. Además, el Real Murcia se quedaría sin la opción de luchar por la Copa del Rey puesto que es octavo a dos puntos del séptimo, el Linense. El UCAM, a cinco puntos de los gaditanos, seguramente podría darse por satisfecho pues evitaría problemas con la parte baja, a siete del playout y descenso.

Pero si la RFEF decide que la temporada sea nula (sin ascensos ni descensos), el que más pierde es el Cartagena. La importante inversión económica realizada por la entidad presidida por Paco Belmonte se vería sin recompensa ya que tendría que estar un año más en Segunda B. Sería un daño considerable en el presupuesto del actual ejercicio, a lo que habría que sumar el proyecto del siguiente con la idea de estar de nuevo entre los mejores.

En las próximas semanas se conocerá un poco más sobre qué ocurrirá con el campeonato. Los clubes priman la salud de los jugadores, técnicos y empleados pero son conscientes que una decisión u otra puede ser clave para su economía