Busquets vuelve para poner orden
No jugó ni un minuto en el debut en San Mamés y tras la derrota Valverde medita ponerle ante el Betis en un partido que se prevé tenso.
En San Mamés Valverde hizo aquello que tanta gente le pedía desde hacía tiempo y montó una revolución en el centro del campo. De Jong de medio centro acompañado de Aleñá y Sergi Roberto. Dos clásicos y jugadores fetiche del técnico desde que tomó las riendas del Barça como Busquets y Rakitic se quedaron en el banquillo. El croata salió en la media parte por Aleñá, pero Busquets no jugó ni un minuto. Ante el Betis el domingo, con un Camp Nou al que todavía le escuece la herida de Anfield y que no dejará pasar ni una, Busquets apunta al regreso para poner orden en un equipo que necesitará galones.
Busquets es un medio centro puro de posición y la cuestión está en ver como mezcla con De Jong, jugador al que Valverde ha utilizado de medio centro sin serlo, o como mínimo sin serlo al estilo Busquets. De Jong es mucho más dinámico, lo que quiere decir que tiene más llegada en zona de influencia para dar el último pase, pero que es menos posicional, lo que repercute en el balance defensivo.
En partidos amistosos durante la caótica pretemporada que ha llevado a cabo el conjunto blaugrana apenas han coincidido en el campo, por lo que más allá de los entrenamientos a puerta cerrada nadie sabe como se entienden.
Ante el Betis el partido se presenta duro, no únicamente en el aspecto deportivo, sino en el ambiental especialmente. El Camp Nou no ha cicatrizado la herida de Anfield ni la de la final de Copa ante el Valencia y las críticas al técnico y en menor medida a los jugadores se han hecho oir. La derrota en Bilbao el viernes pasado ha acrecentado este estado de desasosiego y ante los andaluces hará falta alinear a jugadores curtidos que pongan orden en la casa ajenos al murmullo del estadio, que puede llegar a ser aplastante. En ese perfil encaja un Busquets que apunta a regresar a la titularidad en la segunda jornada de Liga. El Barça necesita ordenarse, y para eso, nadie como Busquets.