El entrenador brasileño tendrá que trabajar con una plantilla muy joven y lastrada por las importantes salidas de Mendy, Fekir y Ndombele. Aouar y Depay son los ases a seguir.
El Olympique Lyon, que ha terminado las dos últimas campañas como tercer clasificado, buscará este año finalizar en el segundo lugar, siempre con la intención de acercarse a un intocable PSG. El equipo, muy joven en casi todas sus líneas, deberá de nuevo trabajar para mantener la regularidad en Ligue 1 y Champions, donde el objetivo será superar la fase de grupos, como ya hiciesen hace un año. Equipo dotado de mucho talento de la medular hacia adelante y que deja más dudas atrás, tanto en los laterales como en el centro de la zaga. Para ello ha llegado Andersen, un central de gran rendimiento en la Sampdoria. Por otro lado, las salidas de Mendy, Ndombélé o Fekir, añaden una dificultad al reto de mantener el nivel y el buen funcionamiento del equipo.
Altas: Joaquin Andersen (24 millones – Sampdoria), Thiago Mendes (22 millones – Lille), Youssouf Koné (9 millones – Lille), Jean Lucas (8 millones – Flamengo), Ciprian Tatarusanu (libre), Boubacar Fofana (libre).
Bajas: Tanguy Ndombélé (60 millones – Tottenham), Ferland Mendy (48 millones – Real Madrid), Nabil Fekir (19,75 millones – Betis), Christopher Martins Pereira (2 millones – Young Boys), Elisha Owusu (1 millón – Gent), Timothé Cognat (70 mil – Servette).
La Estrella: Houssem Aouar
Houssem Aouar, jugador del Olympique de Lyon. EMMANUEL FOUDROT (REUTERS)
Aouar será el gran líder de la zona ofensiva del equipo. Con tan sólo 21 años ya ha completado dos temporadas instalado en la titularidad, aportando goles y asistencias de manera regular. Un hombre vertical, con calidad técnica y que ya ha sido relacionado con grandes clubes del continente. El Lyon ya se ha desprendido de varias de sus figuras y ahora él deberá tomar las riendas.
El Entrenador: Sylvinho
Sylvinho, junto al presidente Jean-Michel Aulas y el director deportivo Juninho. EMMANUEL FOUDROT (REUTERS)
Sylvinho se hizo cargo del equipo a finales del mes de mayo tras la salida de Bruno Genesio. Esta será su primera y ya muy exigente carrera como técnico después de haberse retirado en 2010, cuando jugaba para el Manchester City. Una apuesta arriesgada y toda una incógnita cómo el brasileño será capaz de variar el estilo que llevó al equipo a clasificar de nuevo a la Champions League. A lo largo del verano ha utilizado un 4-3-3 con futbolistas de talento y físicos en la medular y con velocidad y desborde en ataque. Sin embargo, el equipo ha sufrido en la faceta defensiva, algo que deberá trabajar.
