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GIRONA

Eusebio: "Es el momento de un cambio; la caída ha sido grande"

El ya exentrenador del Girona ofreció una rueda de prensa de despedida en Montilivi. "He creído siempre en lograr el objetivo y por eso me cuesta asimilarlo", dijo.

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Eusebio: "Es el momento de un cambio; la caída ha sido grande"
Eddy Kelele

Eusebio Sacristán ya es historia en el Girona. El técnico puso su cargo a disposición del club rojiblanco el pasado lunes y renunció al año de contrato que aún le restaba. Se aceptó su renuncia y no será el entrenador del primer equipo gerundense la próxima campaña en Segunda. Este martes ha ofrecido una conferencia de prensa de despedida. Fue emotiva y sincera. “Entendemos que es el momento de un cambio. La caída ha sido muy grande. ¿Por qué no sigo? Por tal y como han acabado las cosas y sentir que, a nivel general, la afición no ha estado muy contenta por cómo he hecho las cosas en las últimas jornadas. Entiendo que la afición es sagrada, que merece todo el respeto y he de entender su mensaje. Esto era lo mejor para las dos partes. Ha sido fácil, ha habido confianza, respeto y sinceridad. No ha habido ningún problema”, explicó Eusebio.

El ya extécnico del Girona no estuvo solo en la sala de prensa de Montilivi porque se sentaron a su lado el presidente rojiblanco, Delfí Geli, y el director deportivo, Quique Cárcel. Como uno más, junto a la prensa, se pudo ver al capitán Álex Granell, que acudió para apoyarle. Eusebio no logró alcanzar el objetivo de la permanencia y este ha sido el principal motivo de su adión. Le condenó un final de temporada horroroso en el que el conjunto rojiblanco firmó una racha de nueve derrotas y una sola victoria en las diez últimas jornadas: “He creído siempre en lograr el objetivo y por eso me cuesta asimilar todavía lo que ha pasado. Después de Leganés quizás empezamos a pensar que estaba cerca y que iba a llegar. Hemos de ser conscientes de que hasta que uno no lo tiene matemáticamente no hay que parar. Y ya no solo de trabajar sino también mentalmente, poner atención en lo que se hace y calmar a todo el mundo. El aspecto mental ha pesado porque hubo momentos de presión, de miedo a perder lo que teníamos. Y por eso creo que me faltó calma para analizar mejor lo que pasaba”. En total, ha dirigido 44 partidos esta temporada al Girona y el balance es de diez victorias, 13 empates y 21 derrotas. Eusebio demostró su dolor mientras se despedía y no se arrepiente de haber firmado por el Girona en verano: “Entreno para ser feliz, me encanta y entendí que era un club ideal para poder hacerlo. Eso es lo que sentía desde el primer día que me reuní con la propiedad y con Cárcel, me transmitieron sensaciones muy positivas. Desde la primera reunión hasta hoy, el último día, todas mis expectativas se han visto cubiertas. Me he encontrado con un club fantástico a nivel humano, donde todo el mundo tiene un compromiso total y absoluto para dar lo mejor de sí”. En ciertos momentos no pudo contener la emoción y es que “es un momento triste para mí porque acaba una relación que nunca pensé que se iba a dar de esta manera y con este final. Siempre confié en mi capacidad y ganas para poder ayudar al club a lograr el objetivo, que no era otro que dar continuidad a su estancia en Primera. Me da mucha pena y rabia porque este club se merece lo mejor. No me queda otra cosa que dar las gracias porque, aunque el final ha sido duro, dramático y una pena, el camino ha sido muy bueno, bonito. He tenido facilidades en todos los sentidos y ha sido muy agradable el día a día”.

La presencia de Granell en la sala de prensa demostró que el equipo siempre estuvo al lado de su entrenador y de ahí que “quiera dar las gracias a los jugadores. Granell es el ejemplo claro e ideal de lo que es esta plantilla, con un respeto, actitud para el trabajo y ganas enormes. La plantilla ha confiado en mí a pesar de todo y es lo más gratificante de mi estancia aquí. Sabíamos que no era una empresa fácil la que teníamos por delante porque veníamos de una racha con resultados muy buenos. Llegué y quise intentar implantar mi idea, trasladarla lo más progresivamente posible y los jugadores siempre han estado decididos a estar a mi lado. Al final, lamentablemente no hemos sido capaces, es lo que más me duele”, apostilló para después mostrar su confianza en que el Girona volverá, a corto plazo, otra vez a Primera: “Merecéis volver a estar en la élite. A nivel humano hay un grupo de personas en este club que merecen todo lo mejor y doy las gracias por la ayuda. Agradecer a los propietarios, que, durante este tiempo, también han sido fieles, coherentes y sensatos. Han seguido el camino para que las cosas vayan bien y estoy convencido de que tendrán, en un futuro próximo, todo lo que se merecen. Me duele mucho no haberlo conseguido. El final de mi etapa ha llegado. Esta es una provincia increíble y más pronto que tarde lo vais a conseguir”.

Ha sido una temporada intensa en el Girona, pero Eusebio considera que ha crecido como entrenador porque “si para algo me ha servido todo lo que ha pasado es para darme cuenta de que lo he afrontado con entereza y de una manera de la que me siento contento por cómo lo he vivido. Lo he afrontado con el convencimiento de que quería dar lo mejor hasta el final y traté en todo momento tener el estado de ánimo ideal para que los jugadores se sintieran tranquilos y tuvieran la energía para pensar que lo íbamos a conseguir”. Por último, hizo un pequeño análisis a la temporada en general y fue claro: “Hemos seguido una línea bastante coherente. Además, siempre hemos creído que en la plantilla teníamos los recursos necesarios para lograr el objetivo”.

Cárcel: “El primer responsable soy yo”

Al margen de la conferencia de prensa de Eusebio Sacristán, el presidente del Girona, Delfí Geli, quiso dirigirle unas palabras: “Todos queríamos lograr la permanencia, Eusebio el primero. Le deseamos muchos éxitos en sus proyectos futuros”. Pero el que más tiempo le dedicó fue el director deportivo Quique Cárcel. Lo hizo emocionado y consciente de el palo que supone volver a Segunda División. Eso sí, tiene claro quién es el responsable de todo: “El primer responsable soy yo, lo siento de corazón. Siento que el técnico ha hecho todo lo que estaba en sus manos, por eso solo le puedo dirigir palabras de aprecio y confianza. Esto continua y sé que para él es un día duro”, se arrancó. Muchas de las miradas ahora están depositadas en Cárcel porque le tocará acertar en su sustituto. Eso sí, tuvo dudas en rescindirle el contrato y le facilitó que Eusebio pusiera el cargo a disposición del club porque “si no tomé ninguna decisión fue por la persona. Tenemos delante a un alguien espléndido, difícil de encontrar en el mundo del fútbol. Ha sufrido mucho, se ha entregado y los jugadores han creído en él, han luchado por él. Pero esto es fútbol y todo pasa por ganar y ganar. Y no lo hemos logrado”. Por último, siguió alabando a Eusebio y dejó claro que siempre ha estado de su lado: “Sabía que coger el equipo después de la era Machín era muy complicado porque habían sido años espléndidos y la persona que viniera no iba a tener una situación fácil. Desde el primer día ya dije que queríamos un entrenador que aportara buen juego, que mejorara el tema futbolístico y Eusebio lo ha demostrado. Lo hace y es muy bueno futbolísticamente hablando. Después queríamos sacar provecho de la gente joven y sus números hablan por sí solos. Con él, han mejorado los jóvenes. Nos hemos quedado muy cerca y si alguien nos dice a falta de diez jornadas que no lo íbamos a conseguir pocos pensarían lo que ha pasado al final”.