NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL MADRID

El Real Madrid ya prepara el ‘Plan Raúl’: coge el Cadete B

Seguirá una hoja de ruta similar a la de Zidane. Recibió el pasado jueves el Diploma de Entrenador y empezará su andadura en los banquillos.

Actualizado a
Raúl posa entre Ana Muñoz, vicepresidenta de la RFEF, y Ginés Meléndez, director del curso.

El Madrid cree tener entre manos al próximo Zidane. No al sustituto inmediato del francés para la próxima temporada, sino a un candidato a ser su heredero a medio plazo en el banquillo. Se trata de Raúl. El histórico siete se ha sacado durante las últimas seis semanas el Diploma de Entrenador UEFA A y B (el equivalente al antiguo nivel I y II), lo recibió el pasado jueves, y la intención de la entidad es que siga una hoja de ruta similar a la que se empleó con el galo: coger experiencia en Valdebebas a la espera del momento idóneo para llegar al primer equipo. El primer paso ya está dado: entrenará al Cadete B (Xabi Alonso se encargará del Infantil A).

El despido de Benítez aceleró a principios de 2016 los planes con Zidane. El resultado no pudo ser mejor: tres Champions y una Liga (fueron nueve títulos en total) en sólo dos años y medio. A Zizou se le dio la opción de ser una esponja y aprender sin presión al lado de Ancelotti el año de la Décima. Ocupó un discreto lugar entre sus ayudantes, siendo el nexo también con futbolistas como Benzema y Jesé. Luego, en julio de 2014, se le dejó ganar con tranquilidad sus primeras horas de vuelo con el banquillo del Castilla. De hecho, ni clasificó al filial para el playoff de ascenso a Segunda y el club no le hizo ni el más mínimo reproche.

Se madurará a Raúl porque la Fórmula Zidane ha demostrado ser efectiva. Raúl también contaría con la conexión afectiva con la grada, que no ha perdido como se pudo ver en la fan zone madridista en Kiev y en el Classic Match. Además, es respetado por el plantel (compartió vestuario con los actuales capitanes) y contaría con otro de los factores de peso: el de la puesta en escena. El exdelantero domina sin problemas uno de los cometidos que de unos años a esta parte acarrean, quieran o no, los entrenadores blancos: el de tener que ser portavoces oficiosos del club.

Lo decisivo es que Raúl finalmente se ha decidido. Hace un año, en una entrevista en Panenka, estaba todavía dubitativo: “Quiero ser entrenador, pero aún no lo he sentido…”. En los últimos meses ha ido abrazando esa idea y debutará en esas lides.

Una vez ha terminado esta formación teórico-práctica para sacarse la licencia de entrenador destinada a exfutbolistas de élite, a Raúl sólo le quedaría una más por sacarse, la UEFA Pro. La podría tener el próximo año y con ese carné estaría capacitado para dirigir a cualquier equipo. También al Real Madrid...