Adiós privacidad: esta IA detecta tu personalidad sólo analizando tus ojos

En un momento actual en el que el mundo está conectado de manera global y las redes sociales han transformado para siempre la forma de interactuar con los demás, la exposición del usuario es constante y en algunos casos hasta excesiva, ya que nuestros móviles y ordenadores parecen saber más de nosotros de lo que queremos que sepan y transmitan. Para solucionar esto tenemos los Ajustes de Privacidad que cada dispositivo electrónico posee, que se convierten en la mejor baza para que no revele sobre nosotros lo que no queremos que otros vean. Pero aún así estos se antojan insuficientes, y lo cierto es que la sensación de sentirnos seguros en la Red es algo muy frágil.

Detectando tu personalidad a través de tus ojos

Reza un viejo dicho que “los ojos son el espejo del alma”, y que la mirada es capaz de contar la historia de quien está detrás. Algo que unos científicos han puesto a prueba metiendo la tecnología de por medio, y demostrando que los dichos populares tienen una parte de verdad sin duda: A principios de este año, un grupo de investigadores decidieron usar una Inteligencia Artificial entrenada mediante aprendizaje automático (machine learning) para comprobar su teoría: que existe correlación entre el movimiento normal que hacemos con los ojos y los rasgos de la personalidad. ¿El resultado? Positivo.

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La IA se encargó de analizar el movimiento ocular en 42 estudiantes usados para la prueba. Y los investigadores, que han presentado esta semana los resultados del test, demostraron que sí existe correlación entre los ojos y la personalidad de un individuo. En otras palabras: los seres humanos somos muy predecibles. Esta nueva tecnología puede detectar hasta 4 de los llamados ‘Cinco Grandes’ rasgos de la personalidad de un ser humano, que son:

Según los investigadores, esto puede servir para que en un futuro próximo mejore la interacción entre las personas y las máquinas de las que dependemos, ya que si una máquina puede interpretar cómo es una persona, entonces puede actuar en base a dichos rasgos, eliminando la barrera actual de que “los robots y ordenadores de hoy día no son conscientes a nivel social, por lo que no pueden adaptarse a señales no verbales“.

Pero, ¿y si le damos la vuelta a tanto positivismo? Nos encontramos con un lado negativo que implica un futuro en el que la privacidad no existe, cualquier dispositivo electrónico con cámara y/o escáner puede saber en un momento no sólo quienes somos, sino cómo somos. Imaginad por un momento que una compañía de tanto alcance como Facebook compra esta tecnología, y ahora toda la información obtenida de sus usuarios a un nivel tan profundo como es el de la personalidad, se la vende a una Cambridge Analytica que trafica con esos datos.

El movimiento y la personalidad

Esto implicaría anuncios personalizados a un nivel extremo para el usuario, además webs que sabrían demasiado a nivel personal de nosotros. Pero de momento no nos quedemos con este aciago futuro, sino con la curiosidad de cómo la IA del experimento relaciona el movimiento ocular con la forma de ser de alguien: