Si no usas este router inseguro en China, la policía te multa
El router tiene un historial de problemas de seguridad. Pero si no lo instalas tendrás que pagar una multa.
He aquí uno de esos absurdos que sólo podían pasar en sitios como China, un país que a cada mes endurece más su censura hasta poder controlar el Internet que sus ciudadanos utilizan y consultan, y cerrarlo al resto del mundo. Según la web oriental Abacus, la ciudad de Qingdao en la provincia de Shandong (Este de China) está obligando a todos a usar un router aprobado por el gobierno, un router que está demostrado que arrastra problemas de seguridad.
O usas el router, o pagas la multa
Las tiendas, restaurantes y Hotspots Wi-Fi de Qingdao han recibido una nota oficial de la Policía del lugar para que cambien sus routers por un modelo aprobado por el gobierno, un router llamado Bihu. Y les dan dos opciones: o comprarles el Bihu al gobierno local por 100 yuan, unos 13 euros al cambio, o adquirirlos por ellos mismos a 400 yuan, casi 60€. ¿Qué sucede para el que se niegue a pasar por el aro gubernamental y siga con su router? Pues que la policía le impondrá una multa de 100.000 yuan, 13.000 euros nada menos.
De cara a mostrar las bondades del cambio, la Policía de Qingdao señala que a cada persona que se conecte a Internet a diario con el nuevo router se le pagarán 8 fen al día, menos de un céntimo de euro, una forma gradual de ir devolviendo la inversión por el router Bihu a todos los empresarios y usuarios.
¿El problema? La absurda elección de Bihu (BHU) como router oficial de la ciudad, ya que un informe publicado por un experto en 2016 dejó claro las “múltiples vulnerabilidades graves” que el router, uno de los más inseguros del mundo, posee y que permitirían que cualquiera con ciertas habilidades ganara acceso y hackeara el router, alterando cosas como el tráfico de una web y redirigiendo las visitas a un sitio específico
¿Se extenderá al resto de China?
La empresa BHU que fabrica los routers tiene su sede en Beijing, y presume en su página web de tener “una colaboración estrecha a largo plazo” con la Policía Local de China. Qingdao, sede de compañías tecnológicas tan importantes como Hisense y Haier, no es la primera ciudad china que impone un router a sus ciudadanos. La ciudad Chifeng en Mongolia Interior -parte de la República Popular China- repartió routers gratis a las tiendas locales en 2016. ¿Se extenderá la orden en Qingtao al resto de China?