Flexy Paw, el gadget absurdo para sacar el selfie perfecto a un perro

La combinación mascota + smartphone + redes sociales es la que ha motivado que al mencionar Instagram muchos piensen en gatos. Pero de perros también está sobrado IG, Twitter, Facebook y demás. Y es que los gatos por naturaleza son muy serios, los perros no y pueden poner caras graciosísimas de esas que todo el mundo le da un ‘instalike’ porque les ha alegrado la mañana. Hay perros que parecen divas de lo bien que posan, pero si tu can se mueve mucho y/o no quiere posar, aquí tienes uno de esos gadgets tan útiles como extraños.

Flexy Paw, el gadget absurdo

Los perros no pueden sacarse un selfie, pero con Flexy Paw es como si tuvieran esa habilidad, ya que este gadget les hará estarse quietos y además mirar con atención a la cámara. ¿El secreto? Un elemento que apela a uno de los instintos primarios del perro y de todos los seres vivos del planeta incluidos nosotros: la comida. Flexie Paw no es más que un pequeño tubo de goma flexible con dos pinzas en sus extremos, una para acoplarlo al móvil y la otra para enganchar un trozo de comida, ya sea una galleta, algo de bacon, pollo, lo que sea que le guste al animal.

Y ya está, en eso consiste. El perro, al ver el trozo de comida colgando y cercano a él, nos prestará la máxima atención posible para ver si hay suerte y se lo damos. Y con esto -el trozo de comida se encuentra a una distancia cercana pero prudencial según mantengamos el móvil más o menos alejado de él-, podremos tirarle la foto perfecta sonriendo, concentrado fijamente o relamiéndose de gusto, e incluso cogerlo para hacernos un selfie. Flexy Paw está a punto de entrar en proceso de financiación pública mediante kickstarter, y aunque a algunos les parezca el invento del verano y a otros la chorrada máxima, recordad una cosa: también se criticó en su momento la simpleza del palo para selfies y ahí está, convertido en fenómeno.