Para hablar de baloncesto hay que hablar de Alcobendas. No se puede pasar por alto una ciudad que, de abarcar más miradas, podría ser la meca del deporte, especialmente del que nos ocupa. Con más de 5.000 metros cuadrados de instalaciones, no hay ningún lugar que cuide con tanto ahínco la base de las nuevas generaciones ni con tanta variedad como lo hace la ciudad madrileña. Con equipos de rugby, balonmano o natación, es especialmente conocida en el mundo baloncestístico por ser el lugar de origen de históricos como Amaya Valdemoro. Y es, desde 1990, la sede del Centro Internacional de Documentación e Investigación del Baloncesto. Popularmente conocida, claro, como Fundación Ferrándiz, en honor a su creador y un hombre que sigue intrínsecamente ligado a la ciudad. Ambos, persona y Ayuntamiento, entrarán en el Hall of Fame, el próximo 21 de octubre, en el estadio de La Cartuja (Sevilla). Lo hará también Amaya Valdemoro. Los tres ingresarán por separado, cada uno por sus méritos concretos. Pero su historia, y la de Alcobendas en concreto, va unida a la de Amaya y Pedro de una manera tan nítida, que es imposible entender la historia de la ciudad, sin la de ellos.

Una delegación del Ayuntamiento irá a Sevilla para ser protagonista de un ingreso histórico para la ciudad. Entre ellas estará, en principio, el alcalde Aitor Retolaza, que llegó a su puesto en el 7 de octubre de este 2021, al sustituir, previo pacto de Gobierno, a Rafael Sánchez Acera. El ya exregidor se dedicó, desde 2019, a impulsar la tradición deportiva que ya existía en la ciudad, una que, según sus palabras, "es enorme". Sánchez Acera atendió a AS cuando todavía era primer edil con motivo del ingreso de la institución, algo que dice, es "un honor" para ellos y un reconocimiento a la enorme conexión que han tenido con el deporte durante tantos años. Dos veces ciudad española del deporte, Alcobendas tiene muchos clubes en distintas categorías y debe su conexión con la Federación Española de Baloncesto y con el deporte en particular a Pedro Ferrándiz, muy querido en el Ayuntamiento y con una importancia capital para que hoy entren en el Hall of Fame.

"Una apuesta de Pedro nos acercó mucho al baloncesto nacional. Tras eso, la FEB construyó una segunda sede en lo que antes era la Fundación Pedro Ferrándiz, algo que nos unió a ellos", asegura Sánchez Acera. El exalcalde, que conoció a Ferrándiz cuando era concejal, definió al histórico entrenador español como "un personajazo" y aseguró que es "intenso, con una visión global increíble y con un conocimiento del baloncesto que no está escrito". Además, Sánchez Acera también ha resaltado el papel de Amaya Valdemoro, "la mejor jugadora de la historia", además de la familia Beirán (José Manuel y su hijo Javier, campeón del mundo en 2019 con la Selección). Una conexión inabarcable de una ciudad, Alcobendas, con uno de los deportes más seguidos por el aficionado español.

El deporte base llega al Hall of Fame

Lo más llamativo y, a la vez, lo más meritorio para Alcobendas es entrar en el Hall of Fame sin ser un personaje público concreto, sino una entidad. Y hacerlo cuando, lo que se promociona principalmente en la ciudad es el deporte base. "Es un orgullo que un deporte tan importante para los españoles tenga esta vinculación con una ciudad que acoge deporte base", asegura Sánchez Acera, que califica de "honor" la inclusión. El equipo de Gobierno decidió mantener las instalaciones deportivas abiertas durante el coronavirus, siempre con las normas sanitarias en mente. "Si promocionamos el deporte y la salud, vinculamos el deporte con la salud, y mantener el deporte abierto en un momento de salud tan delicado era un objetivo prioritario".

En Alcobendas, el deporte llega a todos los niños y niñas. El Club Baloncesto Alcobendas tiene 300 miembros, mientras que se promociona el FEMADDI, un centro para la inclusión en el deporte a gente con discapacidad intelectual. Las chicas juegan en la Liga Challenge y los chicos en la Liga EBA. Una dimensión muy grande para una ciudad con una conexión muy especial con el baloncesto. El ingreso en el Hall of Fame es el reconocimiento a toda una trayectoria ligada al deporte en general y al baloncesto en particular. El colofón a la ciudad de Amaya Valdemoro, de la familia Beirán y de mucha gente joven que mira al futuro. Y el premio del Hall of Fame, para Sánchez Acera, significa un mayor contacto con unos ídolos muy conocidos en Alcobendas. "Esto permite que los niños y las niñas se digan: '¿por qué yo no puedo ser campeón olímpico?'". Una pregunta que es casi una ambición y que pueden hacerse gracias al conocimiento que tienen de los referentes. De sus referentes. Los de Alcobendas.