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2 DE MAYO

¿Quiénes fueron Daoíz y Velarde, los héroes del 2 de mayo que dan nombre a los leones del Congreso?

Te contamos quiénes fueron Luis Daoíz y Pedro Velarde, dos de los principales héroes del 2 de mayo en Madrid que dan nombre a los leones del Congreso de los Diputados.

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Dos de mayo, obra de Joaquín Sorolla (1884)
Foto: Museo del Prado bajo licencia Creative CommonsDos de mayo, obra de Joaquín Sorolla (1884)

En 1807, el emperador francés Napoleón trazó un plan maestro que consistía en ocupar Portugal (país aliado natural de Inglaterra, su gran enemigo) pasando por España. El acuerdo, conocido como Tratado de Fontainebleau, fue suscrito por Manuel Godoy, valido del rey español Carlos IV, y el propio Napoleón Bonaparte.

En el documento se permitía el paso del Ejército francés por nuestro territorio para llegar hasta Portugal a cambio de una posterior partición del país entre Francia y España. El escenario parecía ideal, aunque las pretensiones del ‘Pequeño Corso’ eran totalmente distintas e iban más allá del Bloqueo Continental que quería ejercer sobre las islas británicas.

Bajo el mando del general Junot, entraron más de 60.000 soldados franceses en España. En poco tiempo, Godoy se dio cuenta de su error. El Ejército francés comenzó a ocupar zonas fronterizas y distintas plazas españolas que no habían sido contempladas en el acuerdo. En marzo de 1808, Godoy se retiró al Palacio Real de Aranjuez con la intención de huir hacia el sur y, si fuese necesario, partir a América. Por aquel entonces, Francia ya había ocupado la zona norte del país.

El Motín de Aranjuez

El 17 de marzo de 1808 se produjo el Motín de Aranjuez. Una multitud de españoles asaltó el lugar en el que se encontraba escondido Godoy, quien escapó gracias a la intervención del todavía príncipe Fernando. El 19 de marzo, Carlos IV abdicó en su hijo, quien se convirtió en Fernando VII.

La alegría no le duraría mucho a los Borbones, a quienes Napoleón consideraba en decadencia. El emperador francés forzó en Bayona la abdicación de Fernando en su padre Carlos IV, quien había cedido sus derechos al propio Napoleón sin conocimiento del joven monarca.

Las abdicaciones de Bayona y el 2 de mayo

Las abdicaciones de Bayona se produjeron entre el 5 y el 6 de mayo. Napoleón quería que el resto de la Familia Real española estuviese allí e intentó traer a la fuerza al hijo menor de Carlos IV, el infante Francisco de Paulato. Este hecho desencadenó una rebelión popular que comenzó frente al Palacio Real de Madrid durante la noche del 1 de mayo al grito de: «¡Que nos lo llevan!».

Con el paso de las horas, las revueltas populares se expandieron por toda la ciudad. El 2 de mayo una jornada trágica, en la que murieron miles de madrileños, entre los que se encontraba la joven costurera de 17 años Manuela Malasaña, quien da nombre a uno de los barrios más populares de Madrid. Otras de las heroínas que cayó en combate fue Clara del Rey.

Uno de los lugares de la capital que más resistió fue el Cuartel de Monteleón, situado en pleno centro de Madrid. Pese a que la insurrección era de carácter civil, algunos soldados y mandos militares se unieron al levantamiento en contra de las órdenes de la Junta de Gobierno, quien había ordenado colaborar con Napoleón.

¿Quiénes eran Daoíz y Velarde?

Dos de los más destacados, que lideraron la defensa del Cuartel de Monteleón (lugar en el que ahora se sitúa la Plaza del Dos de Mayo) fueron Luis Daoíz y Pedro Velarde. El primero, de 41 años, era un veterano de guerra sevillano y capitán encargado del Parque de Artillería. Velarde, cántabro de 29 años, siempre desconfió de las intenciones de Napoleón.

Ambos lideraron la defensa del cuartel junto a otros héroes como el teniente Jacinto Ruiz y Juan Van Halen, quien tendría una larga y prolífica vida militar. Los artilleros y voluntarios repelieron distintos ataques hasta que los soldados franceses enviados por Murat acabaron con sus vidas. El capitán Pedro Velarde murió atravesado por el disparo de un oficial de la Guardia Noble Polaca mientras que el capitán Pedro Daoíz fue herido de muerte con una bayoneta.

Como consecuencia de las revueltas, las tropas de Napoleón fusilaron en la montaña de Príncipe Pío a los principales protagonistas que se habían opuesto a la invasión. La escena fue inmortalizada por Goya en uno de sus cuadros más famosos, ‘Los fusilamientos del tres de mayo’.

Esta cruel represión, provocó una gran indignación en todo el país y derivó en la Guerra de Independencia, que finalizó con la expulsión de los franceses del territorio español en 1814. El propio Napoleón Bonaparte reconoció que aquello fue el principio del fin de su intento de instaurarse como una especie de gran emperador europeo.

Los leones del Congreso

Los leones que custodian el Congreso de los Diputados en España son obra del escultor Ponciano Ponzano. Las figuras de bronce no son las primeras que se realizaron, ya que hubo dos encargos previos en yeso y piedra que no fueron del gusto de la época.

Acabados en 1865 y emplazados en el lugar actual desde 1872, fueron esculpidos por Ponzano con el material fundido en Sevilla de cañones de la Guerra de África. Popularmente, reciben el nombre de Daoíz y Velarde, los héroes del Levantamiento del Dos de Mayo. Otras fuentes señalan que en realidad representan a Hipómenes y Atalanta.

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