GOLF

Seve, Olazábal, Sergio, Rahm: una historia de golf encadenada

Durante los 50 años de AS, el golf español ha ganado ocho majors. Empezó con Ballesteros en 1979 y Sergio García ha culminado en 2017.

MIKE BLAKE

"Es un honor extraordinario ver mi nombre junto al de Seve Ballesteros y José María Olazábal". Esta es una frase que ha repetido varias veces esta temporada Sergio García, ganador del Masters de Augusta 2017, que entró con Ballesteros y Olazábal en el trío de españoles que ha ganado alguna vez en la historia un major, y en la que quiere apuntarse con celeridad el prodigioso Jon Rahm, que en su año de novato ha ganado en Europa y EE UU y ha ascendido al número 5 del ránking mundial. Pero eso es el futuro, volvamos al pasado... a Seve, con él empezó todo.

Ballesteros fue un pionero de libro. Nacido en el 1957 e hijo del jardinero del campo de golf de Pedreña (Cantabria), Seve tuvo una carrera poco menos que autodidacta. Empezó de caddie, con 19 deslumbraba y los 22 años ganaba el British Open en 1979 en Royal Lytham, el vencedor más joven de la historia del major. En España era una revolución deportiva sin precedentes, también en Europa y en el mundo... Su leyenda tardó muy poco en crecer, además de un excelente jugador, Seve derrochaba carisma. Gran Bretaña estaba a sus pies y en 1980 se ganó al público americano al enfundarse la Chaqueta Verde en Augusta. Sólo tenía 23 años y causaba furor en Europa y en América. En España, país poco acostumbrado a éxitos deportivos en esa época, se hablaba de golf, bueno, más bien de Severiano Ballesteros.

Steve Powell (Getty Images)

Ballesteros era una figura mundial, que iba directa a convertirse en leyenda. Llegó el Masters de 1983, el British Open de 1984, y ese mismo año, un jovencito de Hondarribia se llevaba el British Amateur. Era Chema Olazábal y pronto Seve entabló una gran amistad con él. El primer eslabón que se une. El guipuzcoano comenzó a hacer sus pinitos. Y en 1987 ya fue llamado para la Ryder Cup, donde Ballesteros no dudó en compartir partidos con el joven vasco. Ganaron en parejas tres partidos de cuatro. Fue el comienzo de un dúo mítico. En 1988, Seve se llevó el British Open, su quinto major y el que supuso la entrada definitiva en el Olimpo.

Severiano Ballesteros, la leyenda del golf

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En la década de los 90, un buen puñado de victorias llegaron para Ballesteros, que alcanzó los 91 títulos en su carrera. Pero era el esplendor de Olazábal, que reverdeció el prototipo del golf español: jugadores de calidad. En 1994 ganó el Masters. En el 95 lloró desconsolado cuando no fue la a Ryder, pero esta competición le tenía reservada muchos momentos mágicos. El primero fue en 1997 en Valderrama, donde Seve ya no era su pareja, sino su capitán. Era la primera vez que el gran duelo de continentes salía de las Islas Británicas en su fase europea. Y fue un exitazo. Europa ganó al límite y Olazábal despuntó bajo el mando táctico de Seve y de Jiménez, como vicecapitán. El Pisha ha sido otro de los nombres propios del golf español. Por su longevidad y por su forma natural de ser en el campo: "Soy como el buen vino, mejor con los años":

Y entre la magia de Valderrama, el buen crecer del Pisha, y el camino de Olazábal a su segundo major emergía la nueva joya: El Niño. Era Sergio García. Seve, Olazábal, Sergio, más eslabones unidos. En 1999, con 19 años, García se hacía profesional y esa misma temporada ya peleó por su primer major: el PGA Championship. Puso contra las cuerdas al mismísimo Tiger Woods y quedó segundo. Se hablaba del duelo de El Niño contra el Tigre. El de Borriol era el número 2 del mundo, el Tigre el primero. Sergio ha jugado todos los majors del siglo XXI conságrandose como el golfista más consistente de los últimos tiempos. Tenía un lunar, no ganar un major. Que se ha solucionado este 2017, cuando se enfundó la Chaqueta Verde del Masters de Augusta. Un Sergio maduro y feliz, que ha servido de padrino a la nueva joya. El cuarto eslabón.

Sergio García, Miguel Ángel Jiménez y Jose Maria Olazabal.

Se ha estudiado todos los libros de historia un joven de 22 años llamado Jon Rahm y parece que mucho de los conocimientos adquiridos ya los ha puesto en práctica. Fue el mejor amateur del mundo y en su año de novato tanto en el Circuito Americano como Europeo se ha activado como los mejores del planeta. Ha ganado un torneo en EE UU (Torrey Pines) y otro en Europa (Irish Open). Además acumula innumerables top-10, que le han llevado al número cinco del mundo. "Creo que Sergio y Rahm pueden hacer algo parecido en Ryder a lo que hicimos Seve yo", avisa Olazábal, el sucesor de Seve, con el que empezó el golf de altísimos quilates en España. Ocho grandes, cinco de Ballesteros, dos de Olazábal, y uno de Sergio García. AS estuvo ahí para contarlo, la historia encadenada de Ballesteros, Olazábal, Sergio García y Jon Rahm.