REAL MADRID

Más Copas de Europa en blanco y negro pero... también en color

Si la famosa ‘Orejona’ tuviese vida, seguro que se dirigiría al Real Madrid y le diría orgullosa: “Contigo sí que empezó todo”. Una relación legendaria.

CHEMA DIAZ

La Copa de Europa nació en 1956. Su primera edición la ganó el Real Madrid. Y la última final se jugó en 2016, justo 60 años después, con idéntico ganador. Si la famosa 'Orejona' tuviese vida, seguro que se dirigiría al Madrid y le diría orgullosa: "Contigo sí que empezó todo". Recalco lo de que los blancos han sido los primeros y los últimos monarcas de la competición continental por excelencia para acabar con el bulo asumido por demasiada gente basado en valorar al Madrid como "el equipo que ganó más Copas de Europa en blanco y negro". Para empezar y como bien me ha dicho siempre mi señor padre, "todas las finales se jugaron en color". "Yo estuve en la final de 1957 ante la Fiorentina en el Bernabéu. A mi lado había una señora con una falda azul y un bolso de color rojo. Dos filas más abajo un señor con traje gris y una corbata de color fucsia. El césped era verde reventón. Todo era en maravilloso color...".

Imagen de Miguel Muñoz alzando la primera Copa de Europa conseguida por el equipo de fútbol del Real Madrid, en París, el 13 de junio de 1956, tras derrotar al Stade Reims por 4-3. Archivo Diario As

Aún así y aceptando por si les place a sus señorías que las seis primeras (1956, 1957, 1958, 1959, 1960 y 1966) fueron con el despectivamente llamado "BLANCO Y NEGRO", el Madrid ha rugido como una fiera tras tres décadas de barbecho para hacerse de nuevo dueño del Viejo Continente. Un dato demoledor. En los últimos 20 años el gigante blanco domina la Champions con cinco títulos (1998, 2000, 2002, 2014 y 2016). Nadie tiene más en esa significativa franja de tiempo. Muchos se sorprenderán: "¿Pero no es el Barça el que más ha ganado en los últimos tiempos?". Pues ya ven que no. En estas dos últimas décadas, en las que desde el otro lado del puente aéreo se ha juzgado al Madrid como un equipo decadente y al Barça como uno emergente, los azulgrana han conquistado cuatro Champions (2006, 2009, 2011 y 2015). Una menos que su eterno rival. Los números hablan por mí...

115 años de historia del Real Madrid.

Pasa algo similar con el duelo eterno Cristiano-Messi. Sin discutir la gran calidad del argentino, llama la atención que todos los elogios se vuelquen en su figura a pesar de que en las últimas cuatro ediciones del Balón de Oro sólo haya sido capaz de ganar uno el rosarino por tres el portugués. El Madrid recuperó su identidad en Europa con Heynckes, primero, y con Del Bosque después, levantando las Champions de 2000 y 2002. Tras doce años de espera y muchas turbulencias en los banquillos, el flemático Ancelotti llevó a la tropa merengue a la Décima en Lisboa con el inolvidable gol agónico de Sergio Ramos (minuto 92:48). Dos años después fue el turno de Zidane. Todos los últimos entrenadores que han dado la Orejona al Madrid han sido de perfil tolerante, dialogante, buscando la complicidad con el vestuario y no la confrontación. La seducción mejor que la imposición. Y así, como quien no quiere la cosa, el Madrid ha recuperado la antorcha del fútbol europeo. Sin darse importancia. Es el Madrid. Una leyenda... Real.