Jauregizar: “Me he tomado como un premio todo lo que me ha pasado”

Mikel Jauregizar ha asimilado a la perfección su ascenso al primer equipo en partidos puntuales, además de convocatorias, con el hecho de bajar de nuevo al Bilbao Athletic a echar un cable sin laminar un ápice su rendimiento. Un dato a tener en cuenta por no ser lo habitual en estos casos. El mediocentro bermeano, cosecha del 2003, ha resultado clave en el ascenso del Bilbao Athletic, tres jornadas antes de finalizar la liga regular, a la Primera Federación apenas un año después conquistando el terreno perdido. “Muy contento, quién me lo iba a decir que iba a ganar la Copa, es que iba a empezar con el Basconia... pretemporada, y el ascenso. Son premios al trabajo y muy contento con lo conseguido”, señala el volante bermeano.

La consecución del título y el ascenso de cristalizó en las instalaciones de Zubieta: “Ante las dificultades nos crecimos en Zubieta, igual que toda esta temporada”, subraya Jauregizar, que se ha aclimatado a su status a caballo entre primer equipo y filial: “He sabido cual es mi sitio, que es el Bilbao Athletic y lo que me ha pasado me lo he tomado como un premio”. Le han apoyado en su entorno. “, Me han ayudado el staff técnico, aita y ama en casa, y esa es la clave de lo que me ha pasado”, remata con un Gurpegui y Murillo en el banquillo que “son muy cercanos, muy amigos, nos ayudan mucho”, describe.

También ha descollado su compañero de línea, el lekeitiarra Beñat Gerenabarrena (2003), atado recientemente hasta 2027 por el club de Ibaigane, el motor de este filial gobernado por Carlos Gurpegi, que en su etapa de futbolista ejerció también en el puesto de ambos con una bravura singular. “Ha sido una temporada bonita, estamos muy orgullosos de lo hecho y con ganas del año que viene. Desde fuera puede parecer fácil, pero ha sido complicado este ascenso”, lanza el prometedor centrocampista, que desliza que ha aumentado tanto su nivel “individual” como el colectivo del conjunto pilotado por Gurpegui. El ascenso es prioritario, la formación hacia la élite, más: “Es un alivio en parte, pero es importante también jugadores que sean capaces de llegar al primer equipo y se ha demostrado con varios como Paredes, Adu Ares, Jauregizar o Unai Gómez”, desliza Gerenabarrena.

Gere, muy maduro pese a su edad, añade que “de las derrotas es cuando más de aprende, hemos cogido experiencia, ha hecho que estemos cómodos, con un grupo ambicioso y calidad” y afirma que “desde el minuto uno sabíamos que podíamos ascender”. Por tanto se siente identificado y reconocido por el organigrama técnico de Lezama: “Muy feliz aquí, el club mucha confianza todos los años y este año con la renovación han demostrado que confían en mí, capacitado sí que me veo, y a darlo todo en el equipo que esté o dónde me toque”, lanza el lekeitiarra.

Justo hace un año y 20 días después, el 30 de abril de 2023, se consumaba el descenso del filial rojiblanco a la Segunda Federación en una temporada para olvidar con Pallarés de entrenador. Una categoría, ahora recuperada, más acorde a las necesidades de formación del organigrama técnico de Lezama, a la espera de poder colar al segundo filial, Basconia, en la promoción de ascenso a Segunda Federación. “El año pasado en Primera REF no jugué, pero veía que había nivel ante Barca B y Sanse y ese nivel es el idea para poder darlo”, lanza. La celebración de la Copa, brutal: “Una locura, aita me dice cómo fue la primera gabarra y en el gol de Iñaki ante el Barcelona muy emocionado, sales con la tensión que hay, lloré un poco una locura, muy orgulloso”, narra Jauregizar.