JUSTICIA

Sánchez Vicario evita la cárcel y Santacana es condenado a tres años y tres meses de prisión

El Juzgado de lo Penal número 25 de Barcelona considera que hay suficientes indicios de que los condenados descapitalizaron su patrimonio para eludir el pago.

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GRAFCAT3836. L'HOSPITALET DE LLLOBREGAT (BARCELONA) (ESPAÑA), 12/09/2023.- El juzgado penal número 25 de Barcelona juzga desde este martes a la extenista Arantxa Sánchez Vicario y a su exmarido Josep Santacana, para quienes la Fiscalía pide cuatro años de prisión acusados de urdir un plan para descapitalizar su patrimonio y evitar el pago de una deuda al Banco de Luxemburgo. En la imagen la extenista a su salida de la Ciutat de la Justicia.EFE/ Alejandro García
GRAFCAT3836. L'HOSPITALET DE LLLOBREGAT (BARCELONA) (ESPAÑA), 12/09/2023.- El juzgado penal número 25 de Barcelona juzga desde este martes a la extenista Arantxa Sánchez Vicario y a su exmarido Josep Santacana, para quienes la Fiscalía pide cuatro años de prisión acusados de urdir un plan para descapitalizar su patrimonio y evitar el pago de una deuda al Banco de Luxemburgo. En la imagen la extenista a su salida de la Ciutat de la Justicia.EFE/ Alejandro García Alejandro GarcíaEFE

Arantxa Sánchez Vicario ha sido condenada dos años de cárcel por urdir una trama para eludir una deuda con el Banco de Luxemburgo de más de seis millones de euros. Su exmarido Josep Santacana, por su parte, ha sido condenado a tres años y tres meses.

En la sentencia, notificada este mediodía a las partes, el titular del Juzgado de lo Penal número 25 de Barcelona considera que hay suficientes indicios de que los condenados descapitalizaron su patrimonio para eludir el pago de los seis millones de euros que debían al Banco de Luxemburgo por el préstamo que les dio para pagar una multa de 5,2 millones por fraude a Hacienda.

Ambos estaban acusados de presunto alzamiento de bienes por ocultar supuestamente patrimonio para evitar pagar la deuda al Banco de Luxemburgo.

No obstante, la extenista ya había aceptado la condena de dos años de prisión para eludir la cárcel tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular. La Fiscalía había modificado sus conclusiones el pasado 15 de septiembre para rebajar la petición de pena inicial contra Sánchez Vicario de cuatro a dos años de prisión, a la que se adhirieron tanto la acusación particular ejercida por el Banco de Luxemburgo como la propia defensa de la tenista. Y tendrá que pagar una multa de 6,6 millones de euros tras el pacto con la Fiscalía durante el proceso.

La modificación de las conclusiones supone que la tenista eluda el ingreso en prisión, al tratarse de una petición de pena igual o inferior a dos años y no tener antecedentes. El empresario, por su parte, estaba a la espera de condena. Se le pedían cuatro años, y el Ministerio Fiscal lo ha calificado hoy como “el cerebro, el que diseña, pertrecha y orquesta todas las operaciones que se llevan a cabo”.

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La acusada ha asumido su responsabilidad respecto de los hechos objeto de acusación, reconociendo su participación en los mismos. Alega en justificación de su actuar que ella no tenía ningún conocimiento relativo a la gestión de bienes, y que siempre lo ha confiado a terceras personas, primero a sus padres, y a partir de su matrimonio, y concretamente desde que en noviembre de 2009 se hizo con el control del patrimonio, a su marido”, dice la sentencia.

El peso de la culpa, para Santacana

La fiscal, que daba por buena la versión de Sánchez Vicario y reconocía para ella las atenuantes de confesión y reparación del daño, afirmaba que la deportista había seguido “en todo momento las consignas de su marido”, puesto que ella estaba “en otro mundo”, el del tenis, y carecía de conocimientos financieros.

Además, subrayaba que la deportista mostraba su disposición de devolver la deuda a la entidad bancaria, al considerar que había patrimonio suficiente para poder afrontarla, y que fue Santacana quien lo impidió y urdió a tal fin toda la trama de descapitalización patrimonial.

La fiscal daba por desacreditada la versión de Santacana de que toda la estructura encargada de la gestión patrimonial ya existía previamente, al indicar que cuando él toma las riendas “hay una ruptura absoluta”, puesto que se mantienen los nombres, pero cambian las personas al frente.

Por su parte, el letrado del Banco de Luxemburgo se adhería entonces al informe del ministerio público, y pedía “una gran severidad en la pena” contra Santacana, a quien acusaba de ser “el magister del dominio y dirección de todas las actuaciones”.

“Nunca el señor Santacana paga nada, tiene el control de todo, de millones y millones de euros, y no paga nada”, subrayaba el letrado, que también calificaba al ex de la tenista de “verdadero autor ideológico de todo el proceso”, e indicaba que esta estaba “desde el minuto uno en las reuniones” con el Banco de Luxemburgo. “El señor Santacana no se ha portado bien, la condena tiene que ser proporcional a la gravedad de los hechos”.

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