Qué fue de Tong Po: el peor enemigo de Jean-Claude Van Damme
El marroquí, que es sin embargo amigo íntimo de Jean-Claude Van Damme desde la adolescencia, no ha podido desprenderse de la sombra de su personaje, uno de los villanos más temidos y odiados del cine.
Vidas paralelas en muchos sentidos aunque diferente éxito. La trayectoria de Michel Qissi está irremediablemente ligada a la de Jean-Claude Van Damme por muchos motivos. Ambos se criaron en Bélgica, aunque Qissi nació en Marruecos (Oujda) desde donde su familia se trasladaría poco después al país belga.
Desde joven, a la tierna edad de 7 años, comenzó a interesarse por el mundo del boxeo, aunque también estudió otras disciplinas como shotokan karate, muay Thai y kickboxing. Fue durante su adolescencia cuando su destino se cruzó con el de un joven Van Damme que a los 16 años ya había abandonado la escuela para centrarse en el culturismo y el kickboxing.
En los gimnasios de Bruselas comenzaron a forjar una amistad que dura hasta hoy día y que se fortaleció cuando ambos cruzaron el Atlántico en busca de fortuna. Corría el año 1981 y Van Damme, que había abierto un gimnasio que llamó proféticamente California Gym, se deshizo de todas sus pertenencias y se embarcó junto al marroquí rumbo a Los Ángeles.
Ambos trabajaron como extras en Breakin' (1984) y a partir de ahí sus caminos comenzaron a separarse, al menos en cuanto a repercusión se refiere. Mientras Van Damme sí logró hacerse un hueco en la industria cinematográfica, Michel Qissi dependió de la influencia de su amigo para introducirle en determinadas películas.
Primero en Contacto Sangriento (1988) y poco después en Kickboxer (1989), a la postre la cinta que le marcó por su papel como Tong Po, un villano tan temido como odiado de cuya sombra nunca se logró desprender. Aunque no puede decirse que se arrepienta de ello porque lo que ha logrado en su carrera, se lo debe a ese personaje.
Tras su aparición en la mítica cinta de acción volvió a coincidir con su amigo en Lionheart (1990) antes de que sus caminos profesionales se separaran definitivamente. Van Damme se convirtió con el paso de los años en la estrella y la marca que es hoy en la actualidad aunque no sin superar problemas económicos y de adicciones.
Exprimiendo a Tong Po
Por su parte, Michel Qissi no corrió la misma suerte y ha aparecido de manera muy intermitente en alguna producción de dudosa calidad tratando también de explotar su faceta como director, aunque también sin demasiado éxito. Y es que en las últimas tres décadas apenas ha estado involucrado en poco más de una decena de películas, algunas de ellas en su Marruecos natal. Destaca eso sí, un cameo en Kickboxing: Vengeance (2016)
En la actualidad, a sus 58 años, está a la espera de estrenar la cinta belga Out of Vengeance de la que parece que hay confirmada una segunda parte también, aunque en definitiva podemos concluir que ha vivido básicamente de la gloria de Tong Po en los últimos lustros de forma más o menos directa puesto que más allá de su participación en varias películas también ha estado presente en seminarios y convenciones de diversa índole. Y a mucha honra.