ENFRENTADOS

La dura batalla legal que mantienen Laura Sánchez y Aitor Ocio desde hace 10 años

La concursante de 'MasterChef Celebrity' y el exfutbolista se han enfrentado por la custodia de su hija Naia y por sus apariciones en las redes.

La dura batalla legal que mantienen Laura Sánchez y Aitor Ocio desde hace 10 años

Laura Sánchez se enfrenta esta noche a la segunda entrega de 'MasterChef Celebrity 5', un programa que supone un reto para ella tras una brillante carrera como modelo y actriz. Pero esta buena etapa profesional choca con los problemas que tiene en su ámbito personal, pues a pesar de estar en una aparente idílica relación con David Ascanio, mantiene una dura batalla legal con su expareja, el exfutbolista de Athletic Club y Sevilla Aitor Ocio.

Ambos comenzaron una relación en 2004 de la que nació una hija Naia, por cuya custodia siguen enfrentados. Sus posturas están totalmente alejadas y ya se han visto las caras en los tribunales en más de una ocasión, a pesar de que en su momento firmaron un acuerdo para compartir la custodia de la pequeña. La residencia familiar estaba fijada en Bilbao, y Laura era la que se desplazaba desde Madrid o desde Sevilla cada semana.

Sin embargo, todo se torció cuando el exjugador solicitó la custodia completa, alegando que la modelo vivía en una gran inestabilidad laboral. La reacción de la modelo fue denunciarle: "No estoy dispuesta a que se me cuestione como madre y mucho menos aduzcan que no me puedo ocupar de ella por mi trabajo", declaraba entonces. No sirvió de nada, pues el juez le entregó la custodia completa al exdefensa y actualmente vive junto a su hija de 14 años en Bilbao.

Laura contraatacó con otra denuncia

La batalla, no obstante, no terminó ahí. Laura no aceptó la decisión del juez y optó por atacar a su expareja de otra manera: denunciándole por publicar fotografías de la menor en las redes sociales sin su consentimiento. Y ganó el juicio, por lo que Aitor Ocio fue obligado a eliminar todas las imágenes de su perfil de Instagram en las que aparecía su hija.

"No nos permiten a Naia y a mí seguir compartiendo con vosotros algunos de nuestros momentos juntos en mi cuenta de Instagram, de la manera que nos gustaría y como habíamos hecho hasta ahora (...). Era algo que tanto a Naia como a mí nos hacía mucha ilusión, sobre todo sabiendo que estas imágenes os servían de ejemplo, motivación e inspiración", expresó como respuesta Ocio a través de un comunicado.

"Me cuesta comprender cómo en pleno siglo XXI, cuando se habla constantemente de la libertad de expresión, igualdad, etc, resulta ser que un padre con la guarda y custodia única no puede compartir en su cuenta personal el orgullo, amor y admiración que siente por su hija. Y todo esto en base a una ley aprobada en 1982 (...). ¿A quién hacíamos daño? ¿A quién perjudicábamos? ¿Eliminar a una hija del Instagram de su padre es protegerla?", añadió.