Harry y Meghan Markle se despiden oficialmente de la Familia Real británica
Este martes se ha sellado el definitivo punto de inflexión en la relación entre la Corona inglesa y los ya exduques de Sussex, que se encuentran en Los Ángeles.
Tras meses de protagonizar constantemente las portadas de los medios y convertirse en la comidilla de la gran parte de las conversaciones de la crónica social, el Príncipe Harry y Meghan Markle han salido oficialmente de la Familia Real británica este martes 31 de marzo. Queda así, por tanto, rubricada una decisión sin precedentes en la historia de la monarquía del país, y que tantos quebraderos de cabeza ha supuesto para los Windsor.
Los propios protagonistas del bautizado por la prensa como 'Mexit' se han despedido de todos sus seguidores desde la cuenta de Instagram que tenían bajo el nombre de los duques de Sussex. El mensaje, firmado con un significativo "Harry y Meghan" a secas, empezaba haciendo una alusión a la convulsa situación actual en el planeta debido a la crisis del coronavirus:
"Como todos podemos ver, el mundo en este momento parece extraordinariamente frágil. Sin embargo, estamos seguros de que cada ser humano tiene el potencial y la oportunidad de marcar la diferencia, como vemos ahora en todo el mundo, en nuestras familias, nuestras comunidades y en primera línea".
Tras volver a hacer alusión a la importancia de la salud y la lucha colectiva contra el virus, la pareja se ha referido a su propio papel en el futuro: "A medida que todos encontramos el papel que podemos desempeñar en este cambio global y de hábitos, nos centramos en este nuevo capítulo para entender cómo podemos ayudar. Si bien es posible que no nos veáis por aquí, nuestro trabajo continúa".
Finalmente, han acabado con una despedida que tenía más de 'hasta luego' que de 'adiós': "Gracias a esta comunidad, por el apoyo, la inspiración y el compromiso compartido con el bien en el mundo. Esperamos volver a encontrarnos con vosotros pronto. ¡Habéis sido geniales! Hasta entonces cuidaos bien los unos a los otros". De esta forma, Harry y Meghan, que se han trasladado con su hijo Archie a Los Ángeles después de vivir unos meses en Vancouver, comienzan un nuevo episodio en sus vidas.
Qué supone su adiós a la Familia Real
Los efectos de su 'divorcio' con la Corona son los que ya se vienen anunciando desde hace tiempo (y algunos de las cuales tardarán un tiempo en consolidarse). A partir de hoy, Harry y Meghan no podrán disfrutar más de los privilegios reales. En primer lugar, dejan de utilizar los títulos nobiliarios de duques de Sussex y de 'altezas reales', y en el caso de Harry, también los de capitán general de los Reales Infantes de Marina y comandante de honor de las Fuerzas Aéreas Reales.
Tampoco representarán ya a la Reina, desvinculándose de las obligaciones institucionales y reales con las que estaban comprometidos hasta ahora, y no dependerán económicamente de los fondos públicos de la Corona (tampoco para su seguridad personal, que ha causado cierto revuelo tanto en Canadá como en Estados Unidos, y que finalmente se gestionará con fondos privados). A partir de hoy, Harry y Meghan son 'libres', con todas las consecuencias, pero también para dedicarse a sus propios trabajos e iniciativas.
Cuáles son sus planes
Más allá de la vaga referencia en su mensaje a que "su trabajo continúa" y de su (un tanto imprevista) decisión de mudarse a Los Ángeles, donde han adquirido una residencia en una exclusiva urbanización de lujo en Bel-Air en la que tienen como vecinos a celebrities de la talla de los Beckham o Nick Jonas y su mujer, poco se sabe aún de los proyectos concretos a largo plazo del matrimonio.
Sí se espera que lancen su propia fundación pronto, y, por otro lado, parece evidente que Meghan tratará de recuperar con ahínco su lugar como actriz en Hollywood. De momento, su primer trabajo tras su etapa 'royal' se estrena el próximo 3 de abril: ha puesto la voz para la narración del documental 'Elefante', de Disneynature.