Carbonero y el tigre de Papá Noel del que pasó su hijo

El 2018 ha llegado un tanto accidentado a casa de Iker Casillas y Sara Carbonero. La periodista ha compartido unas reflexiones sobre lo pasado en 2017 y lo que está por venir en en nuevo año, comenzando por explicar que está padeciendo una amigdalitis aguda que le provoca fiebre y estar en cama.

Pese a todo, la periodista ha podido contar algunas de las cosas que más valora del año que acaba, y las previsiones que espera del 2018. Reconociendo que "soy una enferma bastante insoportable", Carbonero reflexiona en su blog de Elle: "Nos pasamos la vida haciendo planes e idealizando situaciones que todavía no han llegado y de ahí viene muchas veces nuestra frustración".

La periodista se centra sobre todo en estas mismas navidades, y repasa una anécdota de su hijo Martín con los regalos que le trajo Papá Noel, y con las ilusiones que tanto ella como Casillas se habían hecho cuando viese que le habían traído lo que pidió.

La inesperada reacción de Martín con Papá Noel

Martín deseó tener "un tigre de estos que habla y anda por la casa", como explica Carbonero. Y no sólo consiguieron que Papá Noel lo trajese, sino que la periodista reconoce que antes de eso "yo lo vi en 'persona' y me conquistó".

Hasta el momento en el que el pequeño abrió su regalo, tanto Sara Carbonero como Iker Casillas "estábamos emocionados pensando en el momento en el que Martín rompiera sin ninguna delicadeza el papel de regalo y conociera a su nuevo amigo. Hablábamos e imaginábamos la cara que pondría, el nombre con el que sería bautizado el pequeño tigre, seguro que no se separaría de él... ".

Pero Martín abrió el regalo y su reacción no fue la esperada: "Nada de esto ocurrió. Martín abrió el paquete en el que venía el tigre y después de dos horas el tigre seguía exactamente en el mismo sitio, dentro de su caja de cartón y plástico".

Sara Carbonero no pierde la esperanza

Aunque podría estar sorprendida por la acción, la madre explica que "no digo que no le hiciera ilusión verlo, lo que pasa es que los otros dos regalos le gustaron más". Se trataba de "juguetes de los de toda la vida, de esos que fomentan la creatividad y la imaginación de los niños".

Sara Carbonero reconoce que "ha sido el Papá Noel de la tía el que ha acertado de lleno con mis hijos (a Lucas también le vuelve loco)", y es que les ha traído una "casita gigante de cartón para pintarla entre todos y para meternos dentro ella cuando jugamos al escondite".

Pese a todo, la periodista no pierde la esperanza con su regalo: "Os iré contando cómo va la cosa con el tigre, todavía tengo la esperanza de que pueda ganarse a Martín".

Recuerdo a su amiga María y deseos para el 2018

En su texto, Sara Carbonero introduce el 2017 y las navidades explicando esta anécdota con los regalos de Papá Noel de su hijo, pero lo que realmente quiere es reconocer lo mal que lo han pasado por la muerte de su amiga María, que ya recogimos.

"La muerte de María ha sido uno de los mazazos más grandes y difíciles de digerir", reconoce la periodista, añadiendo que "cuando vives agarrado a la esperanza de que ocurra un milagro, el desenlace es como un puñal directo al corazón".

Para concluir, Carbonero se hace una pregunta a la que ella misma responde: "¿Qué le podemos pedir al 2018? Salud, mucha salud y también mucho amor, empatía, justicia, humanidad. Mucha más solidaridad, mucho más ponerse en el lugar de los demás, mucha fuerza para soportar los golpes que vendrán. Y mucha paz, en todo el mundo".