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15 años del Oscar a Penélope Cruz: “Solo pedía que no me cayese”

“Menos mal que fue el primero de la noche porque de otra manera no habría podido resistirlo”, recuerda la actriz sobre el momento.

La actriz Penélope Cruz posa en la alfombra rosa previa a la gala de la 38 edición de los Premios Goya, en el Auditorio Feria de Valladolid, a 10 de febrero de 2024, en Valladolid, Castilla y León (España). La Academia celebra la calidad del cine español con la entrega de los Premios Goya, los más importantes del cine español, a los mejores profesionales de cada una de las especialidades técnicas y creativas. A lo largo de su historia, la Academia ha reconocido con el Goya, o con su nominación, el trabajo tanto de técnicos, profesionales anónimos para el gran público, como de grandes estrellas españolas e internacionales.
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Raúl Terrel / Europa Press
10/02/2024

Todavía hay una parte de mí que lo vivió como si fuera una especie de sueño. Menos mal que fue el primero de la noche porque de otra manera no habría podido resistirlo. Solo pedía mentalmente que no me caiga, que no me dé un ataque de pánico en el escenario, que sea capaz de decir todo lo que quiero decir… Era muy importante para mí poder hablar en español y no solo en inglés, y te dan muy poco tiempo. Pero fue una alegría enorme poder compartir todo eso con mi familia, y lo que significa que tus compañeros valoren tu trabajo. Fue muy bonito”. Con estas palabras, Penélope Cruz, quien entregó anoche el Goya a la mejor película a Juan Antonio Bayona por La sociedad de la nieve, ha recordado en una entrevista a Fotogramas cómo fue el momento en el que recibió el Oscar hace ya quince años.

Dos años antes ya había sido también candidata por su interpretación en Volver, compartiendo nominación con artistas de la talla de Helen Mirren, Meryl Streep, Judi Dench y Kate Winslet. “Yo todavía hoy alucino y pienso: ‘¿Pero eso sucedió de verdad?’. Es increíble. Me ocurre que vivo las cosas exactamente igual que aquel día. Ahora, con la nominación de los SAG (Premios del Sindicato de Actores), me llamaron llorando mi agente y mi publicista de allí. A mí me hace la misma ilusión que la primera vez, estábamos como niños pequeños y eso es muy bonito”, cuenta.

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Y recuerda cómo se sintió cuando la nominaron a la vez que a su pareja, el también actor Javier Bardem. “Hace dos años tuvimos la nominación a la vez de Javier y yo, y fue también muy surrealista. Tengo un vídeo grabado del momento en que nos enteramos y muchas veces le digo a Javier que tenemos que compartirlo porque es demasiado bonito. Estas cosas también son para que las vean otros. Yo no quería verlo en directo porque me ponen muy nerviosa estas cosas, pero al final lo hicimos y creo que estuve a punto de desmayarme de la emoción, de los gritos. ¡Los dos a la vez! ¿Pero cómo es posible? Fue muy surrealista”.

Si sus hijos siguieran sus pasos…

Además, la actriz no descarta que los hijos que han tenido ella y Bardem sigan sus pasos, aunque todavía lo ve lejos y espera que desarrollen su vocación por sí mismos. “Para mí lo importante es que vayan desarrollando una idea de lo que quieren, que sueñen con algo concreto, un par de cosas. Que vayan dándole forma y fantaseen con ello. Lo otro todavía no me lo planteo porque no estamos en esas edades. Yo cuando empecé a viajar allí ya tenía 18 o 19 años, no era tan pequeña. La primera vez que volé a Los Ángeles fue con Belle Époque, y luego para un casting que hice ese mismo año. Yo me sentía muy mayor, pero después volví a casa de mis padres, con mis hermanos. En un par de años hice dos o tres viajes, y siempre iba con mi billete de ida y vuelta, a hacer un trabajo concreto o una prueba, y luego volvía. Con 24 años volví a casa a vivir con mi madre y mis hermanos y muy cerca de mi padre”.

Y sobre sus propios planes inmediatos, ahora que estrena también Ferrari, cuenta que Juan Diego Botto la insta a saltar a la dirección tras haberla dirigido él y ver su talento. “Es verdad, él es una de las personas que siempre me anima, me empuja a tirarme a la piscina con un largo. Me dice: ‘Hazlo ya’. Después de llevar en esto desde los 16 años, sé que voy a hacerlo porque quiero y lo necesito, pero tiene que llegar el momento adecuado. No he querido mientras los niños eran pequeños, pero ya no lo son tanto”.

“Además, el documental con el que estoy para mí es muy importante, necesito dos años más para terminarlo. A partir de ahí, de aquí a cinco años, puede que haya llegado el momento. Tampoco ha surgido la historia y estoy en eso, en buscarla. Siempre está en mi cabeza encontrar ese libro o ese guion que me haga sentir que el momento es ahora”, agrega.