Nadal, en 10 golpes
Nadal, en 10 golpes

RADIOGRAFÍA DE UNA CARRERA ÚNICA

Nadal, en 10 golpes

Su primer punto, su primer torneo, el tío Toni, la Davis, los Juegos, el año mágico de 2010... Un recorrido por los mejores momentos de la carrera del español.

El día que nadie quería que llegara, está aquí, desgraciadamente. El gran Rafael Nadal cuelga la raqueta después de más de 20 temporadas magníficas, de ensueño, en las que ganó 1.080 partidos, 92 títulos (22 de ellos de Grand Slam), cinco Copa Davis, dos medallas de oro olímpicas, además de ser número uno del mundo durante 209 semanas y 912 consecutivas top-10. Cifras que le convierten en uno de los mejores tenistas de todos los tiempos, para muchos, el más grande. Aquí resumimos su trayectoria en diez momentos y claves esenciales.

Nadal, golpe 2 Nadal, golpe 3
Nadal, golpe 5 Nadal, golpe 6 Nadal, golpe 7 Nadal, golpe 8 Nadal, golpe 9 Nadal, golpe 10

1
Un día especial en Mallorca

El 29 de abril de 2002 es un día que ya forma parte de la historia del tenis, porque aquel lunes Rafa Nadal jugó su primer partido ATP. Con solo 15 años, 10 meses y 26 días, el balear, que era el 762 del mundo, venció al paraguayo Ramón Delgado, 81º, por un doble 6-4. “Para mí, en aquel momento, fue espectacular. Fue una gran experiencia, completamente inesperado, pero lo disfruté. Me divertí jugando delante de mi gente”, recordó Nadal años más tarde. Había nacido su leyenda. El belga Olivier Rochus le frenó en segunda ronda y hubo que esperar casi 12 meses para volver a verle en el circuito, en Montecarlo, uno de sus mejores torneos, que ganó en 11 ocasiones. Allí venció a Karol Kucera y a Albert Costa antes de ceder ante Guillermo Coria. Desde entonces, su progresión fue siempre ascendente hasta lo más alto.

2
Sopot, el torneo inolvidable

Nadal ya era top-100 y había obtenido algunas victorias de prestigio cuando se presentó en Sopot (Polonia), un torneo efímero (tuvo solo siete ediciones) que se jugaba sobre tierra batida y equivalía a un 250 actual, con 18 años cumplidos un par de meses antes. El manacorí ganó a Hanescu, Di Pasquale, Squillari y Mantilla sin perder un set, antes de someter también en dos mangas (6-3 y 6-4) en la final al argentino José Acasuso para levantar su primer trofeo ATP. En ese momento fue el más joven en estrenar su palmarés desde el australiano Lleyton Hewitt. Era prácticamente un desconocido, como prueba el hecho de que le obsequiaran con un cuadro en el que ponía 1st ATP Title y debajo su nombre mal escrito: Rafael Nadel. “Teníamos mucha ilusión”, reconoció 16 años después su tío y entrenador, Toni nadal, protagonista del siguiente capítulo de este especial.

3
El maestro Toni

“Yo tenía la ilusión de que Rafael llegara a ser un buen jugador, aunque no esperábamos que tuviera una carrera como la que ha tenido”, dijo Toni Nadal al rememorar aquel primer éxito en Sopot. Sin duda, la figura más importante y vital en la evolución del balear, la persona que moldeó su mentalidad inquebrantable. Fue él, monitor y entrenador de la escuela de tenis del Club de Tenis Manacor, quien inclinó la balanza a favor del tenis, cuando su sobrino sentía mucha atracción por el fútbol, por otro de sus tíos, Miguel Ángel, exjugador del Barcelona y de la Selección. Toni le inculcó, entre otros valores, la humildad, el esfuerzo, la dedicación, el respeto por rivales, empleados y aficionados, y el cuidado de todo lo que tenía que ver con el tenis. Por eso nunca rompió una raqueta. “A mi tío nunca podré agradecerle lo suficiente lo que ha hecho por mí. No es solo una lección, han sido muchas cada día desde los tres años. Sin él no hubiera jugado siquiera. Me ha estado empujando desde niño para que fuera mejor y siempre le estaré agradecido”, dijo Nadal en una entrevista de AS a finales de 2017, justo el año en el que Toni dejó de pertenecer a su equipo.

4
Abanderado de la Davis

Uno de los momentos que se recuerdan, a posteriori, con más cariño en la carrera de Nadal fue el de su primera aparición en la Copa Davis. Tenía 14 años y la Federación Española le invitó a participar como sparring y abanderado en el desfile inicial de la final de 2000 contra Australia por delante de Álex Corretja, Albert Costa, Juan Carlos Ferrero, Joan Balcells y del capitán, Javier Duarte. España se proclamó campeona por primera vez. Cuatro años después, en 2004, Nadal ganó la primera de las cinco Ensaladeras que le corresponden como jugador. En total, fue seleccionado 20 veces, jugó 23 eliminatorias y solo perdió un partido en individuales, el primero, para un balance de 29-1 y 37-5 en total con los partidos de dobles (8-4). Tiene el récord de victorias consecutivas (32) entre individuales y dobles.

5
La tiranía en Roland Garros

El buque insignia de la carrera de Nadal es sin duda Roland Garros. Pocos imaginaban que después del reinado de Bjorn Borg, seis veces ganador, llegaría otro jugador no solo para mejorar esa cifra sino para duplicarla e ir más allá con 14 títulos en otras tantas finales. El primero, en 2005, en la final contra el argentino Mariano Puerta (6-7 (6), 6-3, 6-1 y 7-5). El último, 17 años después en 2022 al superar a Casper Ruud (6-3, 6-3, 6-0). Sencillamente increíble, quizá la mayor gesta deportiva en un mismo evento por la dificultad que supone. Difícilmente repetible, récord histórico. Su balance en el torneo es igual de impresionante: 112-3. "Este va a ganar Roland Garros 40 años seguidos; tendrá 65 años y lo seguirá ganando", exageró Nicolás Almagro en un partido contra Nadal en Roland Garros 2008. Poco le ha faltado al balear.

6
El sueño de Wimbledon

“Wimbledon, pero está muy difícil y hay que trabajar mucho”, dijo Nadal en 2002 en una entrevista que concedió a TeleVigo por un Futures que estaba jugando allí. Rafa soñaba con ese logro y su deseo se cumplió dos veces, la primera en 2008 después de rozar el logro en las finales de 2006 y 2007 que perdió contra su gran rival, Roger Federer. A la tercera fue la vencida y se vengó del suizo en el calificado como mejor partido de la historia, resuelto en cinco sets (6-4, 6-4, 6-7 (5), 6-7 (8) y 9-7). "Para mí la victoria más emocionante de mi carrera", reconoció en su momento el ganador. Dos años más tarde, Rafa se proclamó de nuevo campeón al vencer al checo Tomas Berdych con mucha más facilidad (6-3, 7-5 y 6-4). En 2011 estuvo cerca de revalidar el título, pero se lo impidió Novak Djokovic (6-4, 6-1, 1-6 y 6-3).

7
Oro olímpico

Nadal siempre disfrutó representando a España y el culmen de ese orgullo que siempre demostró al competir por su país fue el oro olímpico en Pekín 2008. Allí se convirtió en el primer campeón de la Armada en unos Juegos al vencer en la final al chileno Fernando González (6-3, 7-6 (2) y 6-3). En semifinales, el balear había eliminado a un frustrado Djokovic. Aquel fue un año mágico, con títulos en Roland Garros y Wimbledon, y por primera vez fue número uno del mundo. En Río 2016, Rafa se colgó otro oro, esta vez en dobles junto a su amigo y más tarde entrenador Marc López. Ambos se impusieron en la final a los rumanos Mergea y Tecau (6-2, 3-6 y 6-4). Era la segunda vez que competía en dobles en unos Juegos, después de hacer pareja sin éxito (perdieron en primera ronda) con otro de sus entrenadores, Carlos Moyá, en Atenas 2004. Los de 2012 se los perdió por lesión y tampoco pudo acudir a los de 2020, pero sí logró despedirse de los Juegos en París 2024 después de caer en segunda ronda ante uno de sus grandes rivales: Novak Djokovic.

8
Señor de Nueva York

El US Open es el segundo Grand Slam más exitoso en la trayectoria de Nadal, que lo ganó cuatro veces (2010, 2013, 2017 y 2019), además de disputar otra final (2011). El público de Nueva York fue uno de los que más y mejor disfrutó del juego del español, que siempre transmitió sensaciones de emoción y espectacularidad muy valoradas por los estadounidenses. Sus dos primeros éxitos llegaron contra Djokovic. El tercero frente a Kevin Anderson y el cuarto, frente a Daniil Medvedev, quizá el más emocionante, en un partido que estuvo a punto de remontar el ruso, antes de ceder en la quinta manga. "Fue una de las noches más emocionantes de mi vida", dijo Rafa, que terminó exhausto, con dificultades incluso para caminar. En ese momento se ponía a uno solo de los 20 títulos de Grand Slam de Federer, récord por aquel entonces.

9
El año de los tres Slams

Si hubiera que destacar un año de Nadal por encima de los demás, quizá sería 2010, con permiso del 2005, cuando el balear ganó 11 títulos. Lo es por la relevancia de sus éxitos y porque fue el único en el que ganó tres Grand Slams en las tres superficies, tierra, hierba y dura. En Roland Garros triunfó ante Robin Soderling, en Wimbledon superó a Tomas Berdych y en el US Open venció a Novak Djokovic. Antes había sido cuartofinalista en el Open de Australia. También cosechó tres títulos de Masters 1.000: Montecarlo, Roma y Madrid, y un ATP 500, el de Tokio. Y fue finalista de la Copa de Maestros (le ganó Federer). Además, fue número uno del mundo desde el 6 de junio y terminó el curso en lo más alto del ranking. El propio Nadal lo considera su mejor año. También su tío Toni. Lo cerró con un balance de 71-10.

10
2022, enésima resurrección

Las lesiones han sido tristes protagonistas de la carrera de Rafa Nadal desde su comienzo, pero también han engrandecido su figura por la capacidad que siempre demostró para volver y competir de nuevo al máximo nivel. Fue lo que hizo en 2022, después de perderse la última parte de la temporada anterior por su crónico problema en el pie izquierdo, la osteocondritis del escafoides o enfermedad de Muller-Weiss que le atormentó desde los 18 años. Rafa andaba con muletas cuatro meses antes de reaparecer en el ATP 250 de Melbourne a principios de enero y alzar el trofeo. Días después se proclamó por segunda vez campeón del Open de Australia con una remontada histórica ante Daniil Medvedev. Fue su 21º título de Grand Slam. Después ganó en Acapulco y fue finalista en Indian Wells con una racha de 20 triunfos consecutivos. Se lesionó (costillas) en las semifinales contra Carlos Alcaraz. Pero no se rindió. Reapareció en Madrid con una misión, preparar un nuevo asalto a Roland Garros, donde fue capaz de triunfar por 14ª vez con el pie anestesiado. En Wimbledon rozó la épica al clasificarse para las semifinales con una lesión abdominal, pero no las pudo disputar. Y en el US Open, la misma lesión le impidió pasar de octavos. Nada ensombreció su gran año.

Coordinación:
Mariano Tovar.
Dirección de arte:
Francisco Expósito.
Diseño:
Darío González.
Desarrollo:
Rodrigo Ludgero.
Redacción:
Ignacio Albarrán.
Back to top