La nueva Copa Davis reúne a 18 países en una semana. De ahí saldrá el ganador de la primera Ensaladera de la 'Era Piqué'. Entre los aspirantes, en una competición que se presenta muy abierta, estarán seis jugadores del top-10 de la ATP: Rafa Nadal, Novak Djokovic, Daniil Medvedev, Matteo Berrettini, Roberto Bautista y Gael Monfils. Croacia es la actual campeona, pero llega con la baja de Marin Cilic. El grupo B es el denominado 'de la muerte', porque reúne a España, Rusia y Croacia. Pasan a cuartos de final los seis primeros de cada grupo y los dos mejores segundos.

Francia: Veteranía en los 'bleus'

Tercera potencia histórica de la Davis con 10 títulos y otras nueve finales, Francia fue una de las últimas campeonas con el formato tradicional que se despidió el año pasado. En 2017, el equipo que capitaneaba Yannick Noah venció en la última eliminatoria a Bélgica por 3-2. El año pasado, los bleus se quedaron a un paso de repetir, pero cayeron contra Croacia. Lucas Pouille (22º), crítico con la nueva Davis, está lesionado.

Serbia: Djokovic rectificó y jugará

Nación con poco éxito en la Davis, por lo reciente de su independencia, pese a contar en los últimos años con uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, Novak Djokovic. Ganó en 2010 (a Francia) y perdió la final de 2014 contra la suiza de Federer y Wawrinka. Nole, pese a sus críticas a la nueva competición y su preferencia por la ATP Cup, vuelve a liderar al equipo balcánico con la intención de aumentar su palmarés en la despedida oficial del veterano Janko Tipsarevic.

Japón: sin Nishikori sólo queda sorprender

País con poca tradición tenística y casi nula en la élite de la Copa Davis (sólo una final en 1921). Ni la irrupción de Kei Nishikori (13º), que no estará este año en Madrid por lesión, levantó el vuelo del gigante asiático más allá de mantenerse varios años en el Grupo Mundial. Los nipones lo tienen muy difícil para sorprender a sus rivales de grupo.

España: Pasión, Nadal y ganas de la sexta

País anfitrión y campeón cinco veces entre 2000 y 2011, jugó otras dos finales en los años 60, con el gran Manolo Santana, y dos más en 2003 y 2012. Hace siete años que la Roja no tiene una ocasión como esta de levantar la Ensalera. La dependencia de Nadal es absoluta, aunque en 2008, el equipo entrenado por Emilio Sánchez Vicario le ‘robó’ el título a Argentina en Mar del Plata con Ferrer, Verdasco, Feliciano y Granollers.

Rusia: El peligro de Medvedev y Khachanov

En su corta historia como nación independiente de la URSS, Rusia ha ganado dos títulos (2002 y 2006), pero desde que llegó a la final en 2007 (cayó ante EE UU), no ha cuajado grandes actuaciones. Eso puede cambiar ahora que tiene a tres jugadores en muy buen estado de forma: Medvedev (que llevó en la final del US Open a Nadal a cinco sets), Khachanov y Rublev. Su gran punto más flojo es el dobles, donde no cuenta con ningún gran especialista.

Croacia: La campeona se quedó sin Cilic

Dos veces triunfadora en la competición, una en 2005 con Ivanisevic como líder y otra el año pasado cuando desbancó a Francia, puede sufrir mucho para pasar a los cruces en la cita madrileña, porque su número uno, Marin Cilic, renunció a última hora a su lugar en el equipo por una lesión (debe operarse una rodilla) y tendrá que asumir el papel de líder Borna Coric. Su gran arma es el dobles, porque reúne a tres de los mejores jugadores del mundo, Dodig, Mektic y Pavic. Completa el equipo Nino Serdarucic. Problemas internos (la prensa croata habla de conflicto por el reparto del dinero) provocaron la destitución del capitán, Zeljko Krajan, al que ha sustituido de urgencia Franko Skugor. 

Argentina: El 'Peque' Schwartzman en el papel de Del Potro

La Legión Argentina llega con una wild card (invitación). Ha participado en 62 ocasiones (la primera en 1923), con 90 victorias y 65 derrotas en eliminatorias y siendo capaz de ganar el título por primera y única vez en 2016. Aquella selección estaba liderada por Juan Martín del Potro, que tras conseguir el título anunció que se retiraba de las competiciones con Argentina. Aunque es difícil superar una baja como la del tenista de Tandil, la albiceleste trae a cinco jugadores de nivel con Diego Schwartzman como principal estrella. El carácter innato del equipo y una hinchada que no para de apretar son las principales armas para llevarse su segunda ensaladera.

Chile: La juventud de Garín y Jarry

Con Nicolás Massú como capitán, la selección chilena busca volver a pelear contra las grandes. Tiene más de un 50% de porcentaje de victorias en eliminatorias (84 - 71), pero sólo ha podido acceder una vez a la final en 72 participaciones. Fue en 1976 cuando cayó ante Italia en Santiago por 1-4. Volvió a tener un buen grupo de jugadores en los primeros años del siglo XXI, pero no le dio para ganar el título. Para esta Davis, la afición chilena ha recuperado la ilusión. Un equipo joven, con Nicolás Jarry y Christian Garín de 24 y 23 años respectivamente como referentes, que ha elevado el optimismo de un país que vuelve vibrar con su selección tras más de una década de desilusiones.

Alemania: Zverev prefirió una exhibición

Tres títulos para el equipo alemán en las 72 ediciones disputadas, con 200 eliminatorias de las que ha salido vencedor en 132 por 68 derrotas. Sin embargo, hace ya 26 años que no es capaz ni de llegar a la final. En esta nueva edición tendrán complicado volver a lo más alto teniendo en cuenta que no estará disponible su mejor tenista, Alexander Zverev, número 7º del ranking ATP que renunció a disputar el torneo. Esos días, estará jugando una exhibición contra Federer. Su mejor arma será la pareja de dobles que forman Kevin Krawietz y Andreas Mies, una de las mejores del año.

Colombia: Cabal y Farah, números uno de dobles

Sólo un año en el Grupo Mundial para un país que jugó por primera vez la Davis en 1959 y presenta un balance de 57 victorias en 109 eliminatorias. Pablo González es el capitán del equipo y ha convocado al joven Daniel Galán, a los veteranos Santiago Giraldo y Alejandro González y a dos doblistas contrastados como Juan Sebastián Cabal y Robert Farah, primeros del ranking mundial y ganadores de un Wimbledon y un US Open juntos.

Australia: La 'bomba' Kyrgios en el cinco de Hewitt

Con 28 títulos, es el segundo país que más Ensaladeras ha conquistado. De 100 años participando en la competición, ha estado 32 en el Grupo Mundial y ha jugado 259 eliminatorias con un balance de 188 victorias y 71 derrotas. Lleyton Hewitt es el capitán y el díscolo Nick Kyrgios, con el que ha tenido algún encontronazo, su tenista más mediático. Completan el quinteto el joven De Miñaur, Millman, Thompson y el doblista John Peers.

Bélgica: Goffin y la experiencia de Darcis

Han jugado 192 eliminatorias con 98 victorias y ningún título desde su primera edición (fueron subcampeones en 1904, 2015 y 2017), en 1904. Son 21 años en el Grupo Mundial para el equipo capitaneado en estas finales por Johan Van Herck, que tiene a su número uno en David Goffin, dos especialistas en dobles como Vliegen y Gille y dos luchadores como Darcis y Coppejans. Ganaron a Brasil en las eliminatorias de febrero para sellar su billete a Madrid.

Gran Bretaña: La ilusión de Andy Murray

Una potencia de la competición en la primera mitad del siglo XX que desde 1936 sólo ha ganado un título (2015). Es el único país que ha jugado todas las ediciones y presenta un balance de 153 victorias en 250 eliminatorias. Recuperan para estas finales a Andy Murray, que trata de volver por sus fueros tras los recurrentes problemas de cadera que le apartaron prematuramente de las pistas tras el Open de Australia de este año.

Kazajistán: Bublik y Kukushkin, amenaza en indoor

La primera aparición de los kazajos como país independiente llegó en 1995 (antes competían bajo bandera de la URSS) y desde entonces han llegado cinco veces a cuartos de final. Son duros de pelar en casa (11 de las últimas 12 eliminatorias ganadas), pero esta vez les toca dar la cara en suelo neutral (menos para España). 43 victorias en 72 eliminatorias para una escuadra que tiene dos bazas peligrosas en individuales como Bublik y Kukushkin.

Holanda: Haase y nada que perder

Los holandeses, 164 eliminatorias con 74 victorias en 92 años disputando la competición, consiguieron el pase a estas finales con una gran actuación de Robin Haase en la última eliminatoria de clasificación ante República Checa. El de La Haya será el primer espada de un equipo que tiene también a uno de los mejores doblistas del mundo, Jean-Julien Rojer. Las semifinales de 2001 son de momento su techo histórico.

Estados Unidos: Cañoneros en el país con más títulos

Es la gran potencia histórica de la Davis con 32 títulos, incluido el de la edición inaugural, aunque lleven una sequía de 12 años (el último fue en 2007). Se clasificaron como semifinalistas de la edición anterior y llevan 291 eliminatorias ya con 219 victorias. El extenista Mardy Fish es el capitán del equipo y lleva un grupo de ‘cañoneros’ con Tiafoe, Sock, Opelka, Fritz y Querrey.

Italia: Corazón, el sorprendente Berrettini y Fognini

Certificaron el pase en las eliminatorias de febrero ante la India y aspiran a levantar en Madrid una Ensaladera que se les resiste desde 1976. Tiempos posteriores a Nicola Pietrangeli, el hombre que más eliminatorias ha jugado (164) y más partidos ha ganado tanto en individuales (78) como en dobles (42) de la historia de la competición. Berrettini, en un año dulce, y Fognini son las principales amenazas de Corrado Barazzutti.

Canadá: Tenistas emergentes y la baja de Raonic

Sólo dos semifinales, y en un lapso de un siglo (en 1913 y 2013), para un equipo que ha jugado 155 eliminatorias en 90 años con 67 victorias. Destaca la juventud en la lista de Frank Dancevic, con dos jóvenes de presente y futuro como Denis Shapovalov y Felix Auger-Aliassime (los que resolvieron la eliminatoria de clasificación ante Eslovaquia), apuntalados por el veterano Vasek Pospisil. Su jugador más consolidado, el cañonero Milos Raonic, causó baja la semana previa por una lesión de espalda.