España es el país extranjero que más futbolistas y entrenadores ha aportado a la Superliga India desde su fundación en 2014
Seis entrenadores y 18 futbolistas españoles participan en la 11ª edición de la Superliga india (ISL), una competición en la que reclutar a estrellas en su ocaso ya solo forma parte del pasado. “Al principio llegaron famosos como Roberto Carlos, Del Piero, Robert Pirès, Anelka o Materazzi. Ahora buscan jugadores de menos nombre, pero igual o mayor nivel”, secunda Manolo Márquez (Barcelona, 1968), que actualmente compagina el banquillo de FC Goa con el de la selección india: “Llevo cuatro meses sin prácticamente tiempo libre. No hablo casi ni con mi hija”. El catalán, con pasado en RCD Espanyol y UD Las Palmas, es uno de los seis entrenadores españoles que han conquistado la ISL, que en siete de sus 10 ediciones ha caído en manos de un técnico español.
Temporada | Campeón | Entrenador |
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2014 | Atlético de Kolkata | Antonio López Habas |
2015 | Chennaiyin | Marco Materazzi |
2016 | Atlético de Kolkata | José Francisco Molina |
2017/18 | Chennaiyin | John Gregory |
2018/19 | Bengaluru | Carles Cuadrat |
2019/20 | ATK | Antonio López Habas |
2020/21 | Mumbai City | Sergio Lobera |
2021/22 | Hyderabad | Manolo Márquez |
2022/23 | ATK Mohun Bagan | Juan Ferrando |
2023/24 | Mumbai City | Petr Kratky |
Márquez también es una voz autorizada para hablar de la evolución del fútbol indio en general y del futbolista indio en particular. “Ahora son más profesionales y eso aumenta el nivel”, descubre, “aunque no sé si es porque como soy el seleccionador todos juegan más motivados contra mí”, agrega entre risas. Javi Hernández (Salamanca, 1989), que ha jugado en cinco clubes de la ISL y se considera “medio indio”, coincide en el crecimiento del futbolista indio. “Hay una mejora muy significativa, sobre todo técnicamente. Tácticamente les cuesta un poco más, pero también han mejorado debido a la influencia de los entrenadores españoles e ingleses. En India el deporte principal es el críquet y los indios que empiezan a jugar al fútbol lo hacen tarde. Muchos llegan al primer equipo sin conceptos que en España se interiorizan con 7 u 8 años”, analiza Hernández. Los futbolistas españoles de la ISL coinciden en que “quienes marcan la diferencia son los indios”. Cada club puede fichar a seis extranjeros, pero solo cuatro pueden coincidir sobre el césped.
“Muchos llegan al primer equipo sin conceptos que en España se interiorizan con 7 u 8 años”
Quienes también son protagonistas sobre el césped pero no acaparan elogios entre la comunidad futbolística india son los árbitros, cuyo nivel “deja mucho que desear”. Manolo Márquez cree que “es uno de los aspectos a mejorar”, aunque no tiene claro que dicha mejora pudiera llegar con la implementación del VAR. “Si ponen el VAR en India, los partidos podrían durar tres horas”, secunda Javi Hernández. El centrocampista salmantino sí tiene elogios para los aficionados, que crean grandes atmósferas en prácticamente todos los estadios. “India tiene 1.500 millones de habitantes. Aunque el fútbol no sea el deporte principal sí que tiene muchísimos aficionados”. Manolo Márquez cree que en este aspecto la diferencia entre clubes es “abismal”: Mientras East Bengal es capaz de reunir a 60.000 espectadores en su estadio, la media de Hyderabad como local es de 5.000 aficionados. “Uno de los estadios que siempre apetece visitar es el de Kerala, que es el club con más afición de toda Asia”, añade.
Así pues, la Superliga india continúa creciendo paulatinamente, aunque lo hace a la sombra del críquet y bajo la amenaza de constantes cambios. De hecho hablamos de un torneo sin puestos de descenso porque, según Manolo Márquez, “el equipo que descienda desaparece”. “Son franquicias. El propietario que descienda se esfuma del mapa”, añade el entrenador de Goa. Javi Hernández discrepa: “Los propietarios tienen dinero por castigo”. Un dinero que ya ha atraído en estos 11 años a 113 futbolistas y varias decenas de técnicos españoles. “La verdad es que el fútbol en India genera muchas dudas, pero ojalá todo vaya a mejor. Estamos trabajando en ello. Yo personalmente porque es un país que me lo ha dado todo. Nunca habría soñado con ser seleccionador nacional”, sentencia Manolo Márquez.
FOTO: Debajyoti Chakraborty/Getty ImagesCreada en 2014, es la liga más joven de Asia junto a la de Hong Kong (2014), Taiwán (2017) y Filipinas (2022). Impulsada por los conglomerados IMG Worlwide y Resilliance Industries, su intención era aumentar la masa social que se mueve alrededor del fútbol y que el deporte rey tuviera más popularidad en la India. Utilizaron un modelo de competición basado en franquicias, inspirándose en la Indian Premier League de críquet, el deporte más seguido en este país.
El primer título lo consiguió el Atlético de Kolkata, un club en el que invertía el Atlético de Madrid.
Para su primera temporada cada equipo tenía un jugador ‘insignia’ y la liga se llenó de estrellas como Del Piero, Nesta, Materazzi o Capdevila. Desde el primer momento hubo una oleada de españoles que se marcharon allí a jugar. Once jugadores participaron en la ISL en 2014, el mayor número de extranjeros junto a Francia, que también tenía a once jugadores allí. El primer título lo consiguió el Atlético de Kolkata, un club en el que invertía el Atlético de Madrid, que estaba entrenado por el español Antonio López Habas y era el equipo con más presencia española de la liga, con cinco jugadores.
La presencia de los españoles terminó haciendo un efecto llamada para que cada vez más jugadores apostasen por la India para continuar su carrera. Fue el caso de Víctor Mongil (Valladolid, 1992), que llegó al ATK en 2020 gracias a que su técnico era español. Con él había cinco jugadores españoles en la plantilla. Firmó para suplir una baja y terminó ganando la liga. También pasó por el Odisha FC y terminó en el Kerala Blasters, donde era el único español. Eso no le supuso ningún problema. De hecho, para él, fue el mejor club en el que estuvo en la India.
Ferrán Corominas (Banyoles, 1983) también llegó a la India por la llamada de un español. Sergio Lobera le convenció para fichar por el Goa después de una primera experiencia en el fútbol extranjero, en Chipre. Lo que iba a ser una temporada se convirtieron en tres gracias a un nivel de juego y una exigencia menores que en España. De no ser por la pandemia de Covid-19 quizá “aún estaría por allí”.
El Atlético Kolkata fue el primer campeón. / FOTO: Satish Bate/Getty ImagesSi en algo coinciden los jugadores que pasan por allí es en que podrían escribir un libro con anécdotas sobre su paso por una competición tan peculiar. Nada más llegar al país, tanto el clima como la desigualdad social que se vive, condiciones totalmente contrarias a España, impactan a la gente. Un clima mucho más húmedo, con el que sudas mucho más y que dificulta al principio la adaptación de los futbolistas. Víctor Mongil recuerda que “al sonarse los mocos, salían negros a causa de la contaminación”.
“Si vas con la expectativa alta de conocer el país se te cae todo al suelo cuando ves la realidad”
El entorno selvático que predomina en el país hace que se vivan situaciones impensables en España. Corominas, en su primer entrenamiento tras llegar a la India se encontró con el campo lleno de monos y perros y, más tarde, mientras entrenaban, se llenó de murciélagos. Las noticias también le dejaban alucinando: “De repente un tigre se había comido a alguna persona”. Al principio le impactaron estas noticias, pero después “lo normalizas, aunque no es muy normal”.
El día a día de un futbolista en la India se basa en estar en el hotel. Para Mongil “si vas con la expectativa alta de conocer el país se te cae todo al suelo cuando ves la realidad”. La situación en Goa, la ciudad donde jugó Corominas, era muy similar, ya que fuera del hotel “no había mucha cosa para hacer”. Eso sí, las pocas veces que salían podían sentir el calor de la gente. “Nos tenían muy bien valorados y nos trataron super bien. Fue parecido a cuando estaba en Primera”, recuerda Corominas.
Al ser una liga privada priorizan el espectáculo con un ambiente muy diferente al de Europa, llegando a poner un DJ en el descanso de los partidos. Las aficiones viven mucho los partidos, aunque hasta hace poco no era así. Durante la etapa de Mongil en el ATK (2020) “la gente prefería ver un partido de críquet antes que un Manchester City–Chelsea o un Real Madrid–FC Barcelona”. El desarrollo del fútbol en el país se ha producido al compás que el de otros deportes, como el ‘kabaddi’, del que haría falta otro reportaje exclusivamente dedicado a él para poder entenderlo.
Estando en un país tan lejano todo el mundo echa de menos España. Corominas destaca a la gente como familiares o amigos y compartir momentos con ellos. Mongil, por otro lado, lo tiene claro: la comida: “Uno coge la mochila, se va y se adapta, pero un cocido, una tortilla de patatas…”. A diario los futbolistas, que suelen vivir en un hotel, están sujetos a la comida que tengan: “Si tienes suerte tienes buffet y puedes variar”, cuenta Mongil a AS.
FOTO: Santosh Kumar/Getty Images