Ángel es el debutante, en Primera, más joven en la historia del Granada. Se estrenó por el coronavirus en el primer equipo y no se arrugó. El club le renovó hasta el 2024.
La maldita pandemia ha hecho mucho daño. Pero de las cosas malas también salen cosas buenas. Ángel Jiménez Gallego (Maracena -Granada- 22-6-2002) nació para ser portero. Y de los buenos. Tras forjarse en el equipo de su localidad natal entró en las categorías inferiores del Granada. Agilidad, valentía y personalidad desde pequeño.
Su progresión seguía imparable, pero ‘pasito a pasito’ (la filosofía impuesta por Antonio Fernández Monterrubio, director general, y que ha disparado al Granada hasta Europa desde Segunda). Fue entonces cuando llegó el 8 de noviembre de 2020. El Granada había ganado 0-2 al Omonia de Nicosia un complicado partido de Europa League. Todo era felicidad.
Pero llegaron los problemas. Se detectó un brote de coronavirus que impactó en el corazón de la plantilla. Varios jugadores e integrantes del cuerpo técnico dieron positivo y LaLiga comunicó al club que solo podría contar con jugadores que tuvieran anticuerpos de la enfermedad. Conclusión. Solo había siete profesionales disponibles. Y ninguno era portero.
No quedaba más remedio que recurrir a la cantera en un partido severo contra la Real Sociedad. Y encima, Diego Martínez también cogió la maldita enfermedad. Así que el partido de San Sebastián se afrontaba sin entrenador ni jugadores .Tampoco había porteros. Rui Silva y Aarón no tenían COVID-19. Pero debían guardar cuarentena de 14 días. Sin entrenador, ni jugadores el Granada recurrió al técnico de porteros, Juan Carlos Fernández para este partido. Y en una alineación sin casi profesionales, se apostó por Ángel Jiménez. Una apuesta de riesgo, pero obligada. No quedaba otra.
El más joven de la historia
Así, con sólo 18 años, cuatro meses y 16 días, Ángel entraba en la historia como el jugador más joven del Granada en disputar un partido de la máxima categoría. Todo un récord que superaba al venezolano Peñaranda que se estrenó con 18 años, 5 meses y 21 días en un partido contra el Athletic en la 2015-16. Ganaron los granadinos por 2-0.
El Granada fue tembloroso con un equipo de circunstancias y un portero juvenil con escasa participación en el Recreativo Granada, el filial de Segunda B. Pero Ángel no se arrugó. Es más. Se creció. Gran repertorio de paradas y autoridad. Y hasta detuvo un penalti a William José. La Real Sociedad no lo tuvo fácil. Pese a su juventud contagió entusiasmo, empujó a sus compañeros y los medios le ensalzaron por su valor y arrojo.
La renovación
La vida de Ángel no cambió de manera radical, pero aquella actuación le sirvió para corroborar que quería ser portero. Arropado por su familia, siguió progresando en el juvenil. Pero el Granada no le descuidó. Siguió pendiente de su crecimiento y progresión. El Granada se encontró con que Rui Silva, su emblemático portero, terminaba contrato y se comprometía con otro equipo (con el Betis por cinco temporadas). Lo cierto es que el club decidió pensar en el futuro y decidió renovar a su cancerbero hasta 2024. Es una prueba de que, a pesar de los malos tiempos, a veces pasan cosas buenas.
El club decidió pensar en el futuro y decidió renovar a su cancerbero hasta 2024