Eugenio Marín, más conocido como Eu, es uno de los trabajadores de la tienda oficial del Cádiz CF en los bajos del estadio Carranza, pero además sale en Carnaval desde hace 25 años. La COVID-19 le ha hecho cambiar su rutina tanto en el trabajo, como en una de sus pasiones, el Carnaval, que no se ha podido celebrar este año. Eu Marín nos cuenta cómo ha cambiado su vida en ambos aspectos.

La atención en la tienda del Cádiz ha cambiado, ya no puede ser tan personalizada ni estrecha como antes. “Antes teníamos un trato más estrecho con el cliente, y ahora con la COVID no podemos. Es difícil y nos ha costado adaptarnos. A veces ni nos acordamos, pero no deberíamos ni salir del mostrador. Se pasa un poquito mal con el cliente porque a mí me gustaba atenderlos bien y estar un rato con ellos. Se ha perdido la atención personalizada y el contacto con el cliente”, declara Marín.

Con el ascenso del Cádiz a LaLiga Santander, las ventas se hubiesen multiplicado, pero al no haber público en las gradas, las ventas bajan: “Se ha notado mucho la disminución de clientes en la tienda, nos está salvando la venta online. Los meses después de Navidad son flojitos, pero te lo compensaban los días de partidos entre los aficionados de la provincia y la afición rival, que se llevaba algún recuerdo. Con el Cádiz en Primera, los días de partido se multiplicarían las ventas”.

Respecto al Carnaval, Eu afirma que le han arrebatado de pronto una rutina: “Fue un duro golpe, para nosotros salir en Carnaval es una filosofía de vida. Era nuestra rutina, una vez que llegaba septiembre teníamos en la cabeza los ensayos. Que te cambien esa rutina de pronto te choca. Esas dos horitas de ensayo me ayudaban a desconectar. Tenía la sensación de que nunca llegaba septiembre. No cantar en febrero en el Falla es complicado y se echa mucho de menos. Llevo 25 años haciendo lo mismo y cortarlo de raíz ha sido duro”.

Golpe duro a la economía de la ciudad y del club

La pandemia ha afectado a la economía, Cádiz se ha visto golpeada al quitarle dos de los sectores que más dinero dejaba en la ciudad. “Económicamente ha afectado a la ciudad el no poder celebrar el carnaval y la ausencia de público en el fútbol. Con el Cádiz en Primera, la ciudad hubiese generado mucho dinero. El Carnaval es una inyección económica importante para la ciudad. Es lo que hace que muchos negocios cojan impulso hasta verano. El Carnaval da de comer a mucha gente”, explica Marín.

Eu Marín nunca imaginó vivir un año sin Carnaval, y es que ni la dictadura pudo cancelar esta fiesta en la ciudad gaditana. “Es increíble, para mí esta situación es surrealista. Nunca pensé que no hubiese Carnaval, fútbol, Semana Santa… es de película”, manifiesta Marín. Y saca el lado positivo, “Es un año para que todos nos refresquemos. También hacía falta un reseteo en el Concurso, espero que sirva para cambiar algunas cosas”, expresa.

Finalmente, Eu ve un hilo de esperanza en las últimas noticias, y es que el Ayuntamiento ya se plantea atrasar la fecha del Carnaval para que en 2022 sí se pueda celebrar esta fiesta que da la vida a gaditanos y aficionados al Carnaval: “Que nos afirmen que va a haber Carnaval te da esperanzas. El cambio de fecha puede no gustar a los más clásicos, porque además está de por medio la Cuaresma, pero para mí es una buena alternativa. Hay ganas de soltar las letras, están pasando demasiadas cosas, se están acumulando temas de pasodobles y los autores están deseando soltarlas”, declara.