Uno de los grupos más bonitos, sino el que más, será este en el que el Liverpool tendrá que quitarse de encima a dos rivales de estupendo estilo como son el Ajax y la Atalanta. Suena a música celestial cualquier emparejamiento entre ellos, especialmente ese duelo con la gran revelación del fútbol europeo en estas últimas campañas, el conjunto bergamasco que dirige Gasperini. El Ajax, que ha bajado mucho el nivel con respecto a hace dos años, también mantiene una idea de juego muy definida y pulcra. Más difícil, casi imposible, lo tiene el Midtjylland danés, toda una perita en dulce en un grupo tan apasionante.

Cualquier partido con Liverpool, Atalanta y Ajax implicados suena a cita grande, especialmente por la forma tan directa y ofensiva de jugar de todos ellos. Los reds inician su andadura ante el Ajax en Ámsterdam, una buena prueba de fuego para un equipo que sufre fuera mucho más de lo que lo hace en Anfield. Lo verdaderamente mollar del grupo vendrá en el doble duelo seguido entre Atalanta y Liverpool. El conjunto de Gasperini es sin duda uno de los pocos que puede sorprender a los de Klopp con su fútbol total. Sin duda interesantísimos duelos.

Poco que descubrir de un equipo que ha llegado a cuatro finales europeas en cinco años, y, la temporada anterior en que se quedó fuera de la Champions apeado por el Atlético de Madrid, hizo una de las mejores temporadas de la historia de la Premier League. A la maquinaria de Klopp no hace falta tocarle muchas piezas para que siga arrasando rivales y, sobre todo, manteniendo un espíritu competitivo que les hace insaciables. El ritmo competitivo que imprimen en todos y cada uno de sus partidos en Inglaterra hace que lleguen muy preparados a Europa, sobre todo ahora que se han quitado de encima la presión de no haber ganado un título de liga en 30 años. Con Anfield como telón de fondo inigualable, y con uno de los mejores tridentes atacantes del mundo, los reds serán de nuevo uno de los rivales a batir en el continente. Además, su entrenador, indiscutiblemente uno de los tres mejores técnicos del mundo, ha sabido reforzar las parcelas en las que flaqueaban los suyos sin desestabilizar un vestuario que parece inquebrantable.

La estrella: Salah

Eléctrico, y con una pizca de magia que le hace único, el egipcio es una de las estrellas de la nueva década. Factor diferencial de un equipo que lo ha ganado todo. Antes de ser red, ya había demostrado al fútbol que era un delantero desequilibrante, habilidoso y con gol, pero en el Liverpool es donde se ha convertido en uno de los mejores delanteros del mundo. Junto a sus compañeros de baile, Mané y Firmino, forma uno de los tridentes más peligrosos de Europa. Parece que en esta temporada no se le ha olvidado su cita con el gol y en 5 partidos lleva 6 dianas.

El entrenador: Jürgen Klopp

El mejor entrenador del mundo en la actualidad, para muchos. Ha cambiado el fútbol con su electricidad en la presión y en los contragolpes. Un tipo siempre querido. El míster red es la cabeza líder del estilo directo, del 'rock and roll'. El técnico alemán ha construido una identidad en Liverpool. A su pizarra táctica ha sumado el impacto psicológico en sus futbolistas. Les ha transmitido el ADN ganador con su espíritu y liderazgo. Ganó la Champions. Ganó la Premier. Ahora el objetivo es mantenerse en la lucha cada año.

La presencia de Thiago le da muchos matices diferentes al Liverpool, que con él tendrá la posibilidad de dominar mucho más el juego en partidos en los que los rivales se le metan atrás. Lo demás apenas cambio. Un equipo tremendamente agresivo en la presión y con una punta de velocidad al contragolpe que lo hacen imparable. Dos laterales profundísimos y un tridente en ataque con Firmino como arquitecto y Mané y Salah percutiendo al espacio. Un equipazo con una armadura de lujo atrás gracias a Alisson y Van Dijk, portero y central.

La Eredivisie decidió responder a la pandemia dando por finalizada la liga sin campeón, pero al Ajax le sirvió la posición de líder que ocupaba en marzo para clasificarse directamente a la fase de grupos de esta Champions League. Europa ilusiona teniendo en cuenta la facilidad con la que se han desenvuelto en las competiciones nacionales los dos últimos años. La economía del club no se ha librado de verse afectada por la crisis del coronavirus y esta temporada dejará de ganar cerca de cincuenta millones de euros al tener el estadio cerrado. Por eso el Ajax no ha podido hacer grandes inversiones en su plantilla ni habiendo ingresado 80.000.000€ con las ventas de Ziyech y Van de Beek. Pero los dos fichajes que ha hecho han sido todo un acierto: Antony (15.570.000€ que pueden llegar a 21.750.000€ en variables y que se cerró en enero, antes de la pandemia) está llamado a ser la nueva estrella y Kudus (9.000.000€) ha caído de pie en el doble pivote

La estrella: Quincy Promes

Lejos de la versión de jugador de banda que dejó en Sevilla, donde no consiguió adaptarse al conjunto hispalense, Quincy Promes se ha convertido en la referencia ofensiva a falta de un Tadic resolutivo. Llegó a Ámsterdam con la ilusión y la motivación de demostrar el jugador que llevaba dentro y consiguió el objetivo. Con la responsabilidad de ser una de las estrellas del equipo ha conseguido echarse al Ajax a su espalda. El curso pasado anotó 16 goles. Tras la salida de otros referentes del conjunto holandés, Promes es la estrella del equipo de Ten Hag. 

El entrenador: Erik ten Hag

Estuvo a punto de alcanzar la gloria con el Ajax al que llevó a semifinales de Champions. Le quitaron medio equipo y ahí sigue tratando de que aún siga siendo competitivo. El técnico holandés es uno de los pocos entrenadores que sigue apostando por el juego combinativo de tiqui taca en Europa. Fue el alumno aventajado de Pep Guardiola y ahora es un técnico consolidado en competición europea. Aunque ha perdido a algunos de sus pilares, su filosofía no cambia: toque y el fútbol total de la escuela holandesa.

El 4-2-3-1 de Ten Hag ya es inamovible y las principales novedades son jugar con Labyad, anteriormente mediapunta, como delantero y Tadic en la izquierda. Un equipo al que le gusta salir jugando con el balón desde atrás, que tienen mediocentros muy aseados siempre y que mantiene la vieja esencia de los jugadores muy pegados a banda para a abrir el campo. Es el Ajax de siempre, un conjunto muy plástico con balón pero débil sin él.

Se ha acabado el tiempo en el que se podía considerar a la Atalanta una sorpresa. El equipo de Gasperini cerró el último curso con la mejor delantera de la Serie A (¡98 goles!), llegando a pelear por el scudetto con la Juventus y rozando una semifinal legendaria ante el PSG, en la primera participación a la Champions League de su historia. La solidez del proyecto de Antonio Percassi se confirmó con las mejoras del Gewiss Stadium (que ya puede albergar los partidos europeos: adiós a San Siro) y manteniendo a los mejores jugadores de la plantilla. Para la delantera, además, llegó un gran talento como Aleksey Miranchuk, a la espera del regreso de Josip Ilicic tras sus problemas personales. La clase del esloveno marca la diferencia en un equipo excepcional: intensidad, presión hombre a hombre y las llegadas de los laterales son las armas que hacen de esta Atalanta una máquina casi perfecta. La sensación es que la Dea, en esta temporada, esté más consciente que nunca de toda su fuerza.

La estrella: Papu Gómez

Delantero, mediapunta, mediocentro… El ‘Papu’ se transforma en todo lo que necesita su equipo. Su calidad y liderazgo son decisivos para esta Atalanta. La temporada pasada fue uno de los mejores jugadores de la Champions y su nombre entraba en todos los onces ideales de la competición. En 165 centímetros cabe una calidad que le sobra. Atalanta y Papu han crecido de la mano y de forma paralela. Ayuda al equipo en todas las facetas del juego: distribuye, dribla, asiste, anota...

El entrenador: Gian Piero Gasperini

Un verdadero revolucionario, ha conseguido hacer del Atalanta un equipo de autor con su vocación ofensiva y su juego por bandas. Técnico excelente, sin tanto cartel. Ha trabajado un equipo hecho a su medida, ha dado estabilidad al proyecto y lo ha convertido en un "grande" de Italia en el último lustro. Con él como técnico, el club de Bérgamo regresó a competición europea después de 26 años de ausencia. El año pasado alcanzó los cuartos de final en un duelo que pudo merecer más.

Dibujo muy definido con tres centrales y dos carrileros largos, una Atalanta muy reconocible siempre en el campo y con numerosos jugadores siempre en campo contrario y cerca del área. La figura del Papu Gómez también es fundamental, sobre todo como luz intermitente que aparece y desaparece por varios lugares del campo. Hay varios jugadores de ese perfil en la plantilla, aunque ninguno con tanta clase. Arriba, la potencia de Zapata, la movilidad de Muriel... Un fabuloso equipo de fútbol, una delicia.

No es común pero a veces los milagros ocurren. Y que el Midtjylland juegue la Champions lo es. Cierto es que en los últimos años ha pisado fuerte en su liga, de hecho levantó el título la temporada pasada, y lleva años participando con asiduidad en la Europa League, pero que un equipo de la localidad danesa de Herling fundado hace poco más de 20 años se codeé con los grandes de Europa sin tener, como puede ser el caso del Krasnodar, un imperio pretolero a sus espaldas que le apoye financieramente, tiene un mérito más que elogiable. Pione Sisto pone la cara más reconocible a un equipo sin grandes nombres. El ex del Celta le da un plus de calidad a un equipo cuyas mayores figuras la temporada pasada fueron el brasileño Evander y el nigeriano Onyeka, encargados de dirigir la sala de máquinas del conjunto dirigido por Brian Priske. Sus opciones de pasar a la siguietne ronda, incluso de pasar a la Europa League son escasas, por no decir nulas.

La estrella: Pione Sisto

El ex del Celta es la cara más reconocible del conjunto danés. Si está en forma, aporta velocidad, desborde y gol, aunque tiene un carácter complicado. Fue una promesa prematura, con todas las cualidades posibles para triunfar, y en el Midtjylland tendrá la oportunidad de resurgir tras un paso por Vigo con más sombras que luces. Si la cabeza acompaña a su juego es un jugador diferencial. 

El entrenador: Brian Priske

Un técnico sin apenas reputación, salvo en Dinamarca, pero que ha conseguido obrar el milagro de clasificar al modesto Midtjylland para la Champions. Habrá que seguirle. El curso pasado alzó la competición doméstica con una diferencia de 14 puntos con el segundo, el Copenhague. 

Como viene ocurriendo últimamente en el fútbol nórdico, bastantes jugadores africanos dotan al Midtjylland de un poderío defensivo y de una velocidad en ataque que les hace optar por jugar bien agazapados atrás y en busca de los espacios al contragolpe. La presencia de Sisto también potencia eso. Sabe que en su grupo va a estar a expensas de los rivales durante todo los encuentros, pero ya lo estuvo también anteriormente en rondas previas y otras participaciones europeas y el resultado fue bueno. Irá con esa premisa: sorprender.