Un grupo curioso. El principal candidato, Egipto, llega al torneo tras un mal Mundial y con un técnico con solo seis partidos al mando de la Selección, pero fue subcampeón en 2017. El siguiente mejor equipo, República Democrática del Congo, quedó por detrás de Zimbabue en la fase clasificatoria y, sin embargo, estos últimos llegan como el peor equipo en el ránking FIFA y uno de los últimos equipos en certificar su participación. Por su parte, Uganda suma su segunda Copa Africana de Naciones consecutivas tras 20 años ausente, pero son el equipo que más rápido certificó su presencia (si obviamos al anfitrión) y cuenta con el único jugador del once ideal de la CAF que juega en África.

El anfitrión y el equipo africano más laureado de la competición: ‘Los Faraones’ suman siete Copas Africanas de Naciones, incluyendo un récord de tres consecutivas en 2006, 2008 y 2010; curiosamente, en 2006 también acogieron el torneo. El país del Nilo llega como vigente subcampeón tras perder la final de Gabón 2017 ante Senegal, que remontó el tanto inicial de Mohamed Elneny para dejar sin su octava Copa a los egipcios, una participación muy señalada: entre 2010 y 2017 no consiguieron clasificarse para el torneo.

Obviando ese paréntesis negro en la historia del combinado nacional, la historia de Egipto con la Copa Africana de Naciones es una historia de éxito: en 15 de sus 23 participaciones han acabado entre los 4 mejores equipos del campeonato; es más, hasta 1988 siempre habían llegado, como mínimo, a las semifinales siempre que habían logrado la clasificación para el torneo. Datos que los colocan como el absoluto dominador del torneo africano.

Las expectativas son máximas para el combinado egipcio que también busca resarcirse tras su mala actuación en el Mundial 2018 de Rusia, donde perdió los tres partidos de la fase de grupos. Conscientes de la exigencia de sus aficionados, ‘Los Faraones’ vuelven a presentar uno de los combinados más potentes del continente. Con todo, la lista definitiva no ha contentado a muchos que critican la selección de Mohsen o Soliman, entre otros, y señalan las ausencias notables de futbolistas como Ramadan Sobhi del Al Ahly o Abdallah Gomaa del Zamalek.

Entrenador: Javier Aguirre

‘El Vasco’ asumió el banquillo egipcio tras la decisión de la Asociación Egipcia de Fútbol de no renovar el contrato de Cúper tras el descalabro en el Mundial de Rusia. Apenas hemos pedido medir su propuesta al mando de ‘Los Faraones’, pues solo ha dirigido al combinado egipcio en los 6 partidos de la fase clasificatoria, que se saldaron con cuatro victorias, un empate y una derrota. Con todo, su estilo no diferirá de lo mostrado a lo largo de sus más de tres décadas de experiencia en los banquillos: un estilo poco espectacular, pero muy efectivo.

Estrella: Salah

Quién sino. No solo es el mejor jugador africano, sino uno de los mejores futbolistas del mundo. Los datos hablan por sí solos: 71 goles y 29 asistencias en los 104 partidos disputados desde su fichaje por el Liverpool. Salah ha explotado desde su llegada al conjunto de Merseyside, con quien se ha coronado campeón de la última Champions League: a su ya mundialmente reconocida velocidad, capacidad de regate y fina técnica ha añadido un sobresaliente olfato para el gol, una sorprendente visión de juego y una versatilidad total.

Dos han sido las veces que ‘Los Leopardos’ se coronaron campeones de África en 1968 y 1974, la primera vez como Congo Kinshasa y la segunda como Zaire. Curiosamente, su segundo título fue en Egipto, país que acoge esta edición. El país de África Central llega al campeonato, no solo como el mejor equipo de su grupo según el ránking FIFA, sino como quinto mejor equipo del continente según el máximo organismo del fútbol internacional: en el puesto 46 solo la superan Senegal, Túnez, Nigeria y Marruecos. Por descontado, es el combinado mejor posicionado de su grupo, once puestos por delante de Egipto, anfitrión y vigente subcampeón del torneo.

Pese a no clasificar para el Mundial de 2018, las dos últimas participaciones de los congoleños auguran un buen desempeño en el torneo africano: acabaron terceros en Guinea Ecuatorial 2015 y cayeron en los cuartos de final ante la siempre potente Ghana, a la postre cuarta clasificada del torneo. Es por ello que, si nos atenemos a la historia de ‘Los Leopardos’, serían una apuesta fija de cara a la fase final del torneo. Sin embargo, existe un precedente que hay que tener en cuenta: en la fase clasificatoria no fueron capaces de ganarle ninguno de sus dos partidos a Zimbabue, que llegó a imponerse a los congoleños por 1 a 2 en Kinsasa.

Con todo, no van cortos de talento los congoleños, que cuentan con una importante base de futbolistas que juegan fuera de África y un buen número de ellos en importantes ligas europeas. Y es que si de algo no van cortos ‘Los Leopardos’ es de talento e individualidades: Yannick Bolasie, cedido por el Everton a Aston Villa y Anderlecht; Giannelli Imbula, cedido en el Rayo esta última temporada; Arthur Masuaku, del West Ham, o Britt Assombalonga, jugador del Middlesbrough que causa sensación en la Championship inglesa.

Entrenador: Florent Ibengé

Fichó con la selección congoleña en 2008 como ayudante de Patrice Neveu, pero luego partió a China y dirigió al Vita Club, equipo más importante de la República Democrática, hasta la final de la Champions League africana. Su buen hacer con el club de Kinsasa lo llevó al combinado nacional, con el que conquistó el Campeonato Africano de Naciones en 2016. Ha conseguido mantener a ‘Los Leopardos’ entre los 50 mejores equipos del mundo para la FIFA durante tres años seguidos, entre 2016 y 2018, combinando las grandes estrellas europeas de los congoleños con los jugadores de la liga nacional.

Estrella: Cédric Bakambu

El futbolista africano más caro de la historia. El 11 de enero, el Beijing Guoan pagó 40 millones al Villarreal y otros 34 a la Federación China para que el delantero congoleño fichara por los pekineses. Con el club verdiamarillo no ha dejado de perforar redes: 19 dianas en su primer curso, además de ayudarles a levantar la Copa china. En el Villarreal nunca bajó de los 10 tantos en sus dos temporadas y media, haciendo gala no solo de un gran olfato para el gol, sino de una capacidad notable para encontrar siempre el espacio entre los defensas rivales y de un físico exhuberante. Una seria amenaza para cualquier zaguero en esta Copa Africana de Naciones.

La de ‘Las Grullas’ y la Copa Africana de Naciones no es una historia de éxito. Si bien han demostrado su buen hacer en las seis veces que se clasificaron para la fase final del torneo, llegando a debutar en 1962 con un meritorio cuarto puesto y perdiendo en la final de 1978 ante la anfitriona Ghana en su cuarta participación, el país de África Oriental apenas ha competido en una de cada cinco ediciones del certamen. De hecho, Uganda llegó a encadenar doce ausencias de forma consecutiva entre 1992 y 2015, consiguiendo su primera clasificación en más de 20 años para Gabón 2017, donde se quedó fuera en la primera fase tras quedar encuadrada en el mismo grupo que Egipto y Ghana, a la postre subcampeón y cuarto clasificado respectivamente.

Con todo, la pasada fase clasificatoria fueron uno de los dos mejores segundos y en esta ocasión han conseguido entrar entre los ocho primeros clasificados, sellando su participación el 17 de noviembre de 2018 como primero del Grupo L: por delante de Tanzania, Lesoto y Cabo Verde. Sin embargo, su récord contra sus rivales de grupo no auguran el mejor desenlace posible para las grullas: han perdido más partidos de los que han ganado contra Egipto, Zimbabue y República Democrática del Congo, concretamente más de la mitad de los más de 40 partidos que han disputado con los otros equipos del Grupo A.

Sin tantos argumentos futbolísticos como otros oponentes, ‘Las Grullas’ se agarran a las cualidades de una plantilla que ha encontrado una buena mezcla entre juventud y veteranía en la que destacan la velocidad, la entrega, la fuerza del equipo como conjunto y la disciplina. Así se encarga de señalarlo siempre que puede su seleccionador, que confirmó a los medios que había excluido a un futbolista de su lista para el torneo por motivos disciplinarios: la Federación Ugandesa, la FUFA, tiene un estricto código interno que rige la disciplina y las actuaciones de los jugadores dentro y fuera del campo. “El combinado nacional es la marca deportiva más grande del país y debe ser protegida con celo”, dice ‘The Observer’, uno de los principales medios del país.

Entrenador: Sébastien Desabre

Este técnico francés ha desarrollado gran parte de su carrera en África. Antes de fichar como seleccionador ugandés dirigió al Ismaily FC egipicio y ha tenido experiencias en la liga marfileña, tunecina, camerunesa o argelina.En su primer torneo con Uganda, tras fichar a finales de 2017, se quedó fuera en la fase de grupos del Campeonato Africano de Naciones de 2018. Sin embargo, su mano en ‘Las Grullas’ se ha hecho notar en tiempo récord, ya que el combinado ugandés fue nominado al premio a Mejor Equipo de la CAF, galardón que acabaría llevándose Mauritania.

Estrella: Denis Onyango

Mejor Jugador de África en 2016, Mejor Portero Africano de 2018, miembro del once ideal de la CAF en 2018, campeón de la Champions League Africana en 2016 y seis veces campeón sudafricano… un palmarés interminable el del cancerbero nacido en Kampala, que llegó a ser considerado uno de los diez mejores porteros del mundo en 2016 según la IFFHS. Un seguro bajo palos que destaca en las situaciones de uno contra uno y por su habilidad para detener penaltis. En sus manos radican gran parte de las opciones ugandesas en esta Copa Africana de Naciones.

Cuarta participación en la Copa Africana de Naciones para 'Los Guerreros', que también buscarán avanzar por primera vez a la segunda ronda de la competición: en sus tres participaciones anteriores nunca han superado la fase de grupos, llegándose a marchar de la edición de 2017 celebrada en Gabón sumando un único punto en la competición. Dicha clasificación sería una sorpresa, pues parte como el combinado más débil del grupo como bien acredita su lugar en el ránking FIFA (110º), aunque hay un precedente que invita al optimismo: quedó por delante de RD Congo en el grupo G de la fase clasificatoria.

Curiosamente, la del país centroafricano es una selección más conocida por sus problemas lejos de los terrenos de juego, especialmente económicos, que por sus actuaciones sobre el verde. De hecho, no pudieron disputar el pasado Mundial de Rusia 2018 debido a una sanción impuesta por la FIFA: en 2012, el máximo organismo internacional del fútbol había ordenado a Zimbabue pagar una deuda contraida con un antiguo seleccionador, José Claudinei Georgini, 'Valinhos', tras haberle rescindido el contrato en 2008. La Federación Zimbabuense (ZIFA) nunca cumplió con dicho mandato y la FIFA decidió expulsarlos de la competición. Un nuevo punto bajo para un país que en 2012 se vio envuelto en un escándalo de amaño de partidos, el Asiagate: más de 80 implicados fueron sancionados y 13 de ellos, tanto jugadores como árbitros, fueron inhabilitados de forma vitalicia. Previamente, en el año 2000 les retiraron la organización de la Copa de África de Naciones tras diversas inspecciones en las que se constató que ninguna de las construcciones prometidas se estaban llevando a cabo.

En Egipto, 'Los Guerreros' buscarán escribir una página positiva en su historia, continuando con el estilo que les llevó a ser el cuarto clasificado en el Campeonato Africano de Naciones de 2016: acumular muchos jugadores en campo propio e intentar salir lo más rápido posible. Un plan que podría haber variado de haber conseguido convencer al talentoso Reiss Nelson, delantero del Arsenal cedido en el Hoffenheim, de jugar con su país de origen: el futbolista es hijo de padre zimbabuense y madre inglesa y ha sido convocado con todas las categorías inferiores de Inglaterra. Finalmente, su nombre no apareció en la lista preliminar de 34 futbolistas.

Entrenador: Sunday Chidzambwa

Un histórico en el país centroafricano. Como jugador, capitaneo al Dynamos Football Club de Harare a la consecución de cinco títulos ligueros, granjeándose además el reconocimiento de ser uno de los mejores defensas de la historia zimbabuense. Como entrenador, sumó otros siete títulos ligueros con el club de su vida y cuando alcanzó la final de la Champions League Africana en 1998. Como seleccionador, dirigió a 'Los Guerreros' a su primera clasificación para la Copa África de Naciones, la celebrada en Túnez en 2004. Es su cuarta etapa en el combinado zimbabuense, asumiendo el cargo en 2017 tras ser inhabilitado de por vida en 2012 como resultado de las sanciones del Asiagate, sanción que le sería retirada en 2015.

Estrella: Khama Billiat

El atacante de 22 años llamó la atención en las clasificatorias a Copa Oro. El jugador de Universidad San Carlos, de la Segunda División de Guatemala, fue de los goleadores de la fase previa con cinco goles en cuatro juegos.