Si Don Quijote existiese en el momento actual, ¿sería luchador? Esa es la duda que se plantea al descubrir a uno de los luchadores españoles más carismáticos.
¿Os imagináis a Don Quijote de la Mancha en nuestros tiempos? ¿Sería luchador? Solo el autor de esa obra, Miguel de Cervantes, lo sabría... pero en el año 2020 hay un wrestler que se le asemeja mucho. Un hidalgo moderno, Tavares de la Mancha. Su llegada a la lucha libre española fue en 2019, pero su crecimiento está siendo muy grande. Es un personaje complejo y para el que Roberto Tavares (28 años, Alcalá de Henares) sigue trabajando mucho día a día. "Realmente he tenido tres debuts. Siempre quise hacer wrestling y con 14 años, cuando abrieron la primera escuela de lucha en Madrid (Lucharama) no dudé. Mi primer combate fue a finales de 2011, y fue mal... como el de todos. En 2014 cambié mi personaje. Ambos eran conquistadores, pero en 2019 empecé a pelear como Tavares de la Mancha. Desde ese tercer debut he renacido", asegura el luchador.
Roberto, Tavares de la Mancha y Don Quijote tienen michas similitudes, de ahí su éxito. "La historia comienza cuando tras sufrir un accidente de coche, me encierro en mis libros y me convierto en un Quijote moderno en busca de justicia, la fantasía de mi mente se fusiona con el mundo real y parte de su hogar en busca de aventuras. Me gustaba la iconografía de los conquistadores del S.XVI y por eso idee este personaje. El Quijote es un hombre que pierde la cabeza, es un hidalgo y se cree un caballero andante. Mi personaje es un Quijote moderno que es un hidalgo que se cree un conquistador y, casualmente, lucha. Cervantes parodia a los caballeros andantes y yo parodio el wrestling moderno. Además, intento acercar la cultura a los más jóvenes. Por ejemplo, mi Dulcinea es Rosalía (risas). También, lo que intento es hacer un personaje que trascienda y que este deporte llegue a mas gente en nuestro país", admite.
Como luchador, Tavares de la Mancha cuenta con una gran experiencia en España y en Inglaterra, donde residió y aprendió durante varios años. Durante varios años estuvo sin practicar lucha libre y se empapó de Don Quijote. Ahí empezó a crear su idea. La expresa sobre el ring, pero también en redes sociales. Ha creado una serie en Youtube en la que va contando hazañas de este hidalgo del wrestling. "Quiero que el personaje trascienda y se le recuerde. Si por algún motivo no puedo seguir luchando, él puede continuar", apunta. A su favor cuenta con el apoyo del público: "Es un personaje que gusta. Pone todo su empeño, y siempre le pegan, pero siempre resiste, no se rinde y acaba logrando victorias cuando peor parece que lo tiene", añade.
En el público ha calado, pero también entre las empresas de wrestling internacionales. La pandemia ha frenado la progresión de Tavares de la Mancha, pero no se rinde. "Para mí esto es mi trabajo, aunque no me de dinero. Es mi pasión e invierto todo el tiempo que puedo. Quiero 'conquistar el mundo'. Un conquistador español encajaría muy bien en promociones latinoamericanas o estadounidenses. Sé que al principio no caería bien, seguramente, pero mi intención es limpiar mentes, al igual que he hecho aquí con un personaje que podía no entenderse", asegura. Roberto reconoce que disfruta más de su perfil de "showman". "Es algo que siempre me ha gustado. De hecho, cuándo me aficioné al wrestling de niño lo que me creía 100% eran las storyline que había". Por ello, su referente está claro: "En cuanto a cuidar el personaje fuera de dentro del ring, mi ejemplo es Undertaker. Aunque en lucha me gusta gente com Eddie Guerrero, Bret Hart o Randy Savage".
Todo Quijote tiene su Sancho, ¿Tavares también? "Tengo mucho escrito para el futuro con el personaje. Un Quijote sin Sancho hubiese sido diferente, nadie le devolvería a la cordura en algunos momentos. Los 'Sancho' son los fans. Aunque tengo cosas pensadas, no quiero hacer una copia. Esto es un Quijote moderno", desvela. Solo el futuro nos dirá lo que le depara a este curioso justiciero. De momento, los ring de New y Lucha Barcelona lo verán cuando las restricciones por la pandemia lo permitan. ¿Después? Todo puede ocurrir. Un conquistador como Tavares de la Mancha no tiene límite.