Lo que hacen en Alemania los repartidores con los paquetes en España generaría un lío terrible

En España está más que asumido que cuando una persona pide un paquete, los repartidores se lo llevan hasta la puerta de su casa. Da igual que sea un sexto piso o un bajo con jardín, ahí están los trabajadores para cumplir con las exigencias de un modelo de negocio que cada vez crece más con los años.

Sin embargo, no en todos los sitios funciona igual. Una joven ha compartido en TikTok un vídeo en el que cuenta cómo se las gastan en Alemania cuando se pide un paquete. “Hay algo que hay mucha gente que creo que no sabe yes que cuando vienen, si tú vives en un quinto piso sin ascensor, casi nunca suben”, ha comenzado.

La solución de los repartidores es darle el paquete a un vecino. Pero no a uno concreto, sino a cualquiera. “No van a subir al quinto piso y se lo dejan al primer vecino que abre la puerta de todo el bloque”. Bloques en los que hay aproximadamente cincuenta viviendas y que no están etiquetados con números y letras.

Ese vecino se queda los paquetes hasta que llega el dueño a buscarlos. El comprador tan solo recibe un papel en el que aparece el apellido de la persona que lo ha recogido. Claro, que ahí aparece el problema, pues en muchos buzones y portales ni siquiera aparece el nombre del vecino, con lo que encontrar el paquete puede convertirse en una tarea de lo más compleja.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.