Tres participantes de ‘La isla de las tentaciones’ detallan lo que comen y el límite de alcohol en el programa

La sexta edición de ‘La isla de las tentaciones’ continúa arrasando en televisión y en las redes sociales muchos continúan haciéndose preguntas sobre cómo es en realidad la vida de los participantes en República Dominicana. Por suerte, de vez en cuando aparece algún participante que ofrece detalles sobre la alimentación o sobre la bebida, dos de los asuntos con más incógnitas y sobre los que más se ha especulado. Las parejas y los solteros están en las villas del Caribe durante un mes en modo burbuja, pues no cuentan ni siquiera con relojes que les indiquen qué hora es y mucho menos aún teléfonos. Eso sí, no tienen que preocuparse de nada y es el propio programa el que les da lo necesario para su vida allí, y eso incluye la comida y la bebida.

Ahora dos participantes del formato, Sara y Paola, han arrojado algo de luz al tema de la alimentación. Ambas formaron parte de la quinta edición, pero parece que no terminaron muy contentas con la dieta que siguieron allí: “Yo cuando veía a las personas que traían la comida encapsulada iba corriendo diciendo ‘necesito saber’, porque cada día era una sorpresa y cada día era peor”, apunta Sara. “Cada día había pollo con arroz, mucha sorpresa tampoco había”, confirma Paola.

Pero el principal problema no era la calidad, sino la cantidad: “La comida no estaba mala, era todo como muy sano. Pero todo súper a dieta, ahí te quedabas escuchimizado. Yo acabé transparente”, confiesa la pareja de Andreu. “Ahí escondía platos de arroz”, corroboró una Sara que reveló que escondían la comida que sobraba porque no podían comer a deshora.

El límite de alcohol, a debate

El tema que más especulación ha creado en ‘La isla de las tentaciones’ ha sido el supuesto límite de alcohol que la organización impone a los participantes. El tentador Hugo Paz, que tuvo un idilio con Tania Déniz en República Dominicana, aseguró hace unas semanas que la cantidad máxima permitida era de cuatro copas, aunque ante la prensa avisó de que las iba a llamar refrescos. “Tomamos refrescos de naranja y limón, ¿vale? Nos daban un máximo de cuatro refrescos de limón o de naranja. Un máximo, sí, un máximo. La gente se ponía que no veas... Entonces máximo cuatro, porque si tomas cinco...”, expresó en un evento en una discoteca de Barcelona.

Estas declaraciones chocan con las que ofreció tiempo atrás Diego, concursante de la tercera temporada y al que muchos conocerán como James Lover. “Nos lo ponían en la cocina porque digamos que no se puede enseñar en televisión”, reveló. “Barra libre. Barra libre, pero con control. Cuando alguien se veía que iba muy afectado, se le cortaba y no le daban más. Era muy gracioso porque el alcohol, me estoy acordando, me trae buenos recuerdos... En la cocina estaban sirviéndotelo y demás. Te llaman y te dicen: ‘Ven, Diego. Recárgate esto. Toma un chupito’. Normalmente eran ellos los que te llamaban para que no se viese”.