La pirueta fallida de Valeria Ros en ‘La Revuelta’: enseña todo y obliga a TVE a pixelar

Que las noches de Televisión Española han dado un giro de 180 grados para orientarse hacia el éxito es algo que nadie duda. Desde que La Revuelta aterrizase en La Corporación, los registros de audiencia en la franja nocturna del access prime time son mucho más generosos e invitan al optimismo, bonanza en el dato que no contemplaba La 1 en este hueco de la parrilla desde hacía años. Parte innegable del éxito es de David Broncano, pero factor indispensable es también el carisma de sus colaboradores.

Pese a la casi unanimidad que existe acerca del buen equipo que rodea al presentador jienense, las redes sociales parecen haberla tomado con una de las caras habituales del formato: Valeria Ros. Las últimas apariciones de la cómica vasca han sembrado cierta incomodidad a la hora de hacer humor, razón que muchos atribuyeron a su distanciamiento del programa.

“¿Pero tú tienes capacidades gimnásticas?”

Este lunes ha regresado a plató, plenamente consciente de su larga ausencia. “Llevo mucho tiempo sin venir. Tú estás hasta en la sopa, solo te falta liarte con Leonor y ser rey”, indicaba, explicando el motivo: “Ya sabes que soy madre y no me da la vida. No existe la conciliación”. Entonces comenzó a desatarse el surrealismo. Tras asegurar, muñeco reborn en mano, que “debería ser normal traer a un bebé al plató” y que “hay que poner aquí un bebé que sea chica, que haya presencia femenina cuando no estemos ni yo ni Lalachús” que debe ser cuidado “entre todos”, decidió dar una voltereta lateral. Y salió mal.

“Tengo ilusión. Venga, lo intento”, decía la humorista ante la escéptica mirada de Broncano. “¿Pero tú tienes capacidades gimnásticas?”, quiso saber el conductor del espacio, a lo que ella respondió que por supuesto, que es “un aguililla”. Algo le hacía intuir al jienense que no. “A ver si te vas a doblar un codo por el show business”, advertía. Pero Ros estaba decidida a hacerlo: “No, que va. Que tengo una familia, va por ellos”.

Lo que ocurrió fue que la minifalda le jugó una mala pasada. La inclinación del cuerpo no fue la suficiente y, mientras giraba, el público vio sus partes íntimas en primer plano. Fue tal la nitidez con la que se mostró que TVE se vio obligada a pixelar dicha pate del cuerpo. Pero ya era tarde: las redes sociales habían dictado sentencia. “Valeria Ros enseñando el toto en La Revuelta porque ya no sabe qué hacer para seguir en el programa...”, dice un usuario, adjuntando el vídeo del crimen.

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