Batalla entre restaurantes españoles en Estados Unidos: denuncian por robo de recetas e información clave
La cadena de restaurantes Teleféric Barcelona acusa a David Linares y Elisabet Reviriego de “robarles recetas y datos” para abrir su restaurante, Macarena.

La gastronomía española es de lo más querido en todo el mundo. Es quizás uno de los grandes alicientes para visitar nuestro país, y es por ello que hay quienes buscan replicarlos en sus diferentes ciudades. En Estados Unidos, de hecho, encontramos diferentes restaurantes de comida española por toda su geografía. Pues bien, uno de ellos, el restaurante Macarena, que abrirá sus puertas próximamente en Palo Alto, en Santa Clara, California, se ha visto envuelto en problemas judiciales.
Sus dueños, David Linares y Elisabet Reviriego, han sido acusados de piratear paellas y tapas a un popular grupo de restaurantes de la zona, Teleféric Barcelona, que demanda a la pareja por robarles recetas y datos de clientes para así abrir después su restaurante, Macarena.
En declaraciones a ‘The Mercury News’, Linares asegura que han seguido todos los canales legales: “Seguimos confiando en nuestras acciones, nuestros valores y los procesos que hemos seguido para lanzar Macarena”.
En la demanda, por su parte, se habla del papel de David Linares en Teleféric, señalando que acabó teniendo un papel muy importante como director de operaciones para los cinco locales de la empresa en Estados Unidos: “Linares tenía acceso ilimitado a los documentos almacenados electrónicamente de Teleféric y estaba al tanto de la información confidencial y reservada de Teleféric, como recetas, acuerdos con proveedores y contactos con clientes”, figura en la denuncia presentada en el Tribunal Superior del Condado de Santa Clara.
Reviriego entró después que Linares a la empresa, pero también alcanzó el puesto de directora de marketing, hasta que ambos decidieron dimitir en mayo de 2024, “afirmando falsamente que regresaban a España”. “De hecho, estaban conspirando para abrir un restaurante español competidor en Silicon Valley y utilizar la información confidencial, patentada y de secreto comercial de Teleféric para hacerlo”.
En el mismo escrito presentado en los tribunales se aportan más pruebas contra Linares y Reviriego. Sobre el primero, se dice que en su último día en la empresa “descargó casi 17.000 documentos del disco duro de Google de la empresa a su cuenta personal. Se incluían recetas, listas de contactos de clientes, presupuestos, estrategias de marketing e información sobre precios de eventos y catering”. Y Reviriego, por su parte, copió y borró de la base de datos de la empresa multitud de archivos e información confidencial.
Todo ello para abrir un restaurante que se ha visto envuelto en infinidad de problemas legales. Un plato de mal gusto para Teleféric, que esperan recibir una indemnización no especificada.
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