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Las dos enfermedades incurables que padece Carme Chaparro

La presentadora de ‘Informativos Telecinco’ utiliza sus redes sociales para dar visibilidad a estas dos afecciones: “No hay cura ni se saben las causas”.

Las dos enfermedades incurables que padece Carme Chaparro

Carme Chaparro es uno de los rostros más queridos de Mediaset. Con una extensa trayectoria en el grupo de Fuencarral, tanto en Cuatro como en Telecinco, la periodista aparece con asiduidad en ‘Informativos Telecinco’ para cubrir las ausencias de Pedro Piqueras, presentador estrella del servicio de noticias de la principal cadena. Siempre con una sonrisa, lo que muchos desconocen es que la salmantina padece dos enfermedades incurables con las que tiene que lidiar cada día.

Con el fin de dar visibilidad en redes sociales, Carme Chaparro explica de qué se trata cada una de ellas y aclara que “no hay cura ni se saben las causas”. “Yo vivo así, con un pitido constante, como una emisión de alta frecuencia”, dice haciendo referencia al síndrome de Ménière que le fue diagnosticado hace unos años.

“De día es insoportable, pero de noche no tanto. En el oído derecho casi no tengo audición. Y no hay más remedio que acostumbrarse”, señala. La presentadora de Mediaset ha perdido el 65% de la audición.

Una dolencia dermatológica

A la también escritora no solo le afecta esta enfermedad auditiva sino también otra dolencia dermatológica muy molesta para ella. Fue en marzo de 2022 cuando los médicos se la detectaron: “No se sabe qué la causa y no tiene cura”.

“Esto que veis es una enfermedad de la piel. Cuando tengo un brote, las manos se me llenan de esta especie de eccemas. Son dolorosas, especialmente si rozan con algo. A veces el brote tiene que ver con el estrés, otras con algo que he tocado… Pero no se sabe exactamente”, dice en Instagram.

“No hay curas. Solo pomadas. Son para tratar que la remisión del brote sea rápida. A mí solo me afecta a las manos, y solo una o dos veces al año, pero hay personas que lo sufren por otras partes del cuerpo mucho más visibles y molestas. A veces pueden sentirse estigmatizadas”, añade.