TELEVISIÓN

Juana Acosta se rompe al recordar el asesinato de su padre: “Han sido años de terapia”

La actriz colombiana solo tiene buenas palabras para su padre, al que arrebataron la vida de manera “injusta” en Cali cuando ella solo tenía 16 años.

Juana Acosta se rompe al recordar el asesinato de su padre: “Han sido años de terapia”

Juana Acosta abrió completamente su corazón la pasada noche en ‘Las tres puertas’ con María Casado y confesó cuál ha sido el peor trauma de su vida: el asesinato de su padre. Cuando se produjo la tragedia, la actriz colombiana tenía solo 16 años y se enteró por una llamada de teléfono cuando salía de su clase de baile. “Dejaste la niñez de golpe con una llamada en la que te dicen que han asesinado a tu padre. La vida no es justa”, expresó la presentadora para que Acosta comenzara el relato sobre este complicado asunto.

La de Cali ya ha mostrado el dolor que le produce la historia en la obra El perdón, una obra que ha creado bajo la inspiración del trágico suceso. “Fue muy duro. A mí me rompió la vida en dos, a mí y a mi familia. No te lo esperas en absoluto y te marca para toda la vida. No hay nada más injusto que un asesinato y más el de un padre tan excepcional”, declaró.

Para él solo tiene buenas palabras y, entre una gran emoción, le describe así: “Era un hombre extraordinario, bello por dentro y por fuera. Guapo, con un sentido del humor extraordinario y una generosidad de otro planeta. Era un ser muy amado. Fue muy injusto”. Su padre tenía solo 51 años cuando fue asesinado en Cali. “Fue horrible. Hoy pienso que a todos nos toca vivir cosas duras en la vida”.

Su hermano se suicidó años después

En el pasado ya aseguró en otra entrevista en televisión que fue “un crimen impune” porque se produjo en una época “muy compleja en Colombia”. Pero lo peor es que el asesinato de su padre tuvo todavía más consecuencias. “Uno de mis hermanos no pudo perdonar ni hacer ese camino hacia la vida y se terminó suicidando quince años después”.

Para poder superar, o más bien para tratar de convivir con el recuerdo de estos hechos, Juana ha necesitado “años de terapia”. Por suerte para ella, ha contado con su trabajo en el mundo de la interpretación y con la capacidad, como ella mismo dijo en su momento, de haber convertido el dolor y su herida “en arte y poesía”.