FAMOSOS

Habla el abogado de Daniel Sancho: “Quiere planear cómo vivir en prisión”

Anan, en su llegada al centro penitenciario de Koh Samui ha hablado con diversos medios que se encontraban en la puerta.

Actualizado a
Daniel Sancho Bronchalo, the son of Spanish actor Rodolfo Sancho Aguirre, assists Thai police with an investigation after he was arrested on charges of murder in the death and dismemberment of his Colombian traveling companion Edwin Arrieta Arteaga on the tourist island of Koh Phangan, Thailand August 6, 2023. Dailynews via REUTERS    THIS IMAGE HAS BEEN SUPPLIED BY A THIRD PARTY. NO RESALES. NO ARCHIVES. THAILAND OUT. NO COMMERCIAL OR EDITORIAL SALES IN THAILAND

Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, ingresó ya este lunes en la prisión de Koh Samui (al sur del país). Lo ha hecho después de que el juez del tribunal provincial de la isla decretase su internamiento por el presunto asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta.

En la cárcel estará al menos hasta que comience el juicio, tal y como han confirmado fuentes cercanas a ‘EFE’. Allí, el joven español de 29 años ha recibido la visita de su abogado, Anan, contratado por la familia, con quien ha hablado largo y tendido sobre su caso, del que el propio Daniel confesó ser culpable, aunque dando otros detalles de la situación que vivía con la víctima: “Soy culpable, pero yo era el rehén”.

Sobre el estado de Daniel, el abogado ha confesado ante diferentes medios que se encontraban a la entrada de la prisión que está tranquilo: “Creo que está relajado. Él sabe lo que hizo, le he explicado el proceso”, ha comenzado explicando ante las cámaras.

Aunque, además de ello, Anan también ha revelado cuáles son los planes que tiene Daniel Sancho durante su estancia en la prisión tailandesa: “Él quiere planear cómo vivir aquí dentro”.

La cárcel de Koh Samui

La vida de Daniel en la prisión de Koh Samui no será nada sencilla, y es que diversas informaciones apuntan a que las celdas en las que habitan los presos están completamente abarrotadas, disponiendo solo de tres mantas: una para protegerse del suelo, otra para taparse, y una tercera para usarla como almohada.

Se habla de una población que dobla, e incluso triplica la capacidad del centro, con peleas en las duchas, una higiene limitada, y con colas para acudir al servicio y hacer otras necesidades. Una serie de problemas a los que también se une la comida, de la que aseguran que es muy mala.