John Cena revela el curioso motivo por el que se ha realizado un injerto de pelo: “No hay nada de malo”

Las Vegas y sus noches luminosas del pasado fin de semana acogieron el ascenso al séptimo cielo de John Cena: el mítico luchador se impuso a Cody Rhodes en un final anticlimático —la ausencia de The Rock, crucial en la historia que ambos habían construido en el road to Wrestlemania, y la participación del rapero Travis Scott, vital para decidir el combate en favor de Cena— que terminó con el marine levantando el Campeonato Indiscutido de WWE.

No es una victoria baladí. Se trata de su 17º campeonato mundial en la empresa de wrestling, lo que le coloca como el luchador que más veces lo ha conseguido, desbancando al legendario Ric Flair. A raíz de este hecho el rostro de Cena se ha multiplicado en redes sociales, tocando a la pantalla de muchos seguidores de esta disciplina que le creían fuera del circuito y retirado. Si bien es cierto que anunció que su último combate sería, precisamente, el que le enfrentó a Rhodes, la realidad es que su reinado le obligará a tener, al menos, uno más —si no opta por dejarlo vacante—.

Su comentado implante de pelo

De una forma u otra, que Cena está más vigente que nunca es algo que nadie duda. Sigue siendo el mismo, aunque su aspecto físico no diga lo mismo: el luchador luce un cabello en crecimiento que ha sido objeto de burlas por parte de numerosos usuarios en redes sociales, quienes señalan su incapacidad para ocultar la “calva”. No ha pasado desapercibido para el marine, que durante una grabación de The Pat McAfee Show en la jornada posterior a su última victoria ha hecho hincapié en estos comentarios: “Me hicieron trizas por un problema genético que no puedo controlar. Al unísono, corean y me hacen sentir pequeño y avergonzado”.

John admite que muestra muchas “señales de calvicie”, pero niega que la actitud que muestran muchos fanáticos sea la adecuada. “Eso es pura intimidación y no está bien. Gracias por obligarme a operarme de cabello. Hasta ahí me presionaron”, ha estallado, revelando que ha sido el acoso uno de los motivos principales que le han llevado a ponerse pelo, algo que, por otro lado, normaliza: “No hay nada de malo en eso. Le sucede [la alopecia] a siete de cada diez hombres”.

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El luchador optó por quitarse pelo de los lados de la cabeza para colocárselo en la parte superior, “problema” que intenta solucionar y que se encuentra “en progreso”: “Con suerte, en un par de meses se verá mejor”. Como iba al hilo, mencionó que tampoco puede dejarse bigote y que lleva diez años sin afeitarse. Pero eso es otro asunto.

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