Famosos
Así es la vida personal de Eduard Fernández: un duro divorcio, la abrupta muerte de su madre, una hija actriz…
El actor barcelonés, quien también participó en el ‘El 47′, recibió su cuarto Goya por ‘Marco’ de manos de su hija, Greta Fernández, quien sigue sus pasos.

Eduard Fernández (Barcelona, 25 de agosto de 1964) hizo valer anoche todas las quinielas y se llevó el Goya a mejor actor por su papel en Marco. No es el primero, sino el cuarto —ya tenía otros tres por Fausto 5.0, En la ciudad y Mientras dure la guerra—. Como cuatro son las mujeres que le han marcado en su vida personal, acerca de la cual suele ser bastante reservado.
Siguiendo un orden cronológico, habría que empezar por su madre, natura de Barbadillo del Mercado (Burgos), quien le dio la vida y a quien no pudo despedir en 2020 como le hubiera gustado tras fallecer de forma abrupta durante el duro período del coronavirus. “Mi madre murió en pandemia, no me pude despedir. Es raro, con mi madre hablábamos francamente de la muerte, ella tenía alzhéimer y fue un proceso muy duro”, contó en la SER. Con la estructura de un monólogo, le dedicó Todas las canciones de amor, una forma de cerrar la herida.
Su madre fue su gran apoyo cuando comenzó su carrera como artista. Estudió mimo y estuvo en las compañías Els Joglars y La fura dels Baus antes de dar el salto al cine con Los lobos de Washington (fue su primera nominación al Goya, como actor revelación). Gran parte de su carrera como intérprete la hizo al lado de la que fuera su esposa, la escritora y poetisa Esmeralda Berbel, cuyo divorcio tras un cuarto de siglo juntos y una hija en común fue descorazonador para ambos.
“Lo pasé muy mal. Fue muy difícil, también teníamos una hija… La ruptura fue difícil y, quieras que no, separarte de alguien con quien has tenido una hija es como el fracaso de un proyecto”, le contó el actor en una entrevista a Jordi Évole en la que confesó que también había sufrido depresión tras la separación. Berbel, por su parte, hizo pública la experiencia en un libro, Irse, donde habló de la dureza de tomar la decisión y de cómo habían sido sus años anteriores a ella.
Su hija y su actual pareja
Fruto de ese matrimonio nació su única hija, Greta Fernández, con quien anoche emocionaba verle abrazado después que estuviese ella sobre el escenario para entregarle el Goya por Marco, película para la que tuvo que engordar dieciséis kilos para meterse en la piel de Enric Marco, un falso superviviente del campo de concentración nazi de Flossenbürg sobre quien escribió Javier Cercas en El impostor.
Greta Fernández ha seguido sus pasos. Precoz, empezó a actuar con apenas 11 años. Se formó en la Escuela Superior de Arte Dramático de Barcelona y con 30 ha participado en Elisa y Marcela y en La hija de un ladrón, por la que fue nominada al Goya como mejor actriz protagonista y se llevó la Concha de Plata en la misma categoría, actuó con su padre. También trabajan ambos en la serie 30 monedas, de Álex de la Iglesia.
Dos años después de su divorcio, el actor de Los renglones torcidos de Dios, Perfectos desconocidos o Pa negre, entre otros muchos éxitos, rehízo su vida en el plano sentimental con la actriz, directora y guionista Ainhoa Aldanondo, a quien conoció durante el rodaje de la serie La Zona.
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