Harvard revela las cuatro frutas que mejoran la salud y prolongan la vida: todas se producen en España
La universidad norteamericana ha publicado en un estudio reciente que cuatro tipos de fruta deberíamos incluir en nuestra todos los días.
En los últimos años, hemos sido testigos de un cambio notable en la forma en que las personas se relacionan con la comida. Hoy más que nunca, la alimentación se valora no solo como una necesidad biológica, sino como un componente esencial del bienestar físico, mental y emocional, lo que ha llevado a una mayor atención sobre lo que comemos, cómo lo comemos y de dónde provienen nuestros alimentos.
Factores como el aumento de enfermedades crónicas, la mayor disponibilidad de información y el crecimiento del movimiento por un estilo de vida saludable han influido en que cada vez más personas se interesen por su dieta. En este contexto, las frutas han recobrado un lugar privilegiado en nuestra mesa. Consideradas durante mucho tiempo como un simple complemento o postre, hoy las frutas se valoran por su aporte de nutrientes esenciales, su papel en la prevención de enfermedades y su capacidad para ofrecernos energía de calidad de forma natural.
Pues bien, en este proceso de aumento de la demanda de frutas frescas, orgánicas y de proximidad, la Universidad de Harvard ha revelado un estudio en el que pone de relieve las propiedades de cuatro tipos de frutas que deberíamos consumir de forma diaria. Estas son, por orden de recomendación, arándanos, granadas, uvas y plátanos.
Sus propiedades
Los arándanos son considerados una de las frutas más ricas en antioxidantes, en especial en antocianinas, los compuestos que les dan su color azul intenso. Estos antioxidantes combaten el daño celular causado por los radicales libres, lo que ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro y diversas enfermedades crónicas. Además, mejoran la memoria y la salud cerebral, contribuyen a la salud cardiovascular, refuerzan el sistema inmunológico, y tienen propiedades antiinflamatorias.
Por su parte, la granada es una fruta rica en polifenoles, compuestos con potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios. Su consumo regular se ha asociado con beneficios significativos para el sistema cardiovascular. Y es que las granadas ayudan a reducir la presión arterial y mejoran la circulación sanguínea. Asimismo, favorecen la digestión y combaten bacterias intestinales dañinas.
Por otro lado, las uvas, sobre todo las tintas, contienen resveratrol, un compuesto que protege las células y mejora la salud del corazón. También son ricas en vitaminas C y K, además de varios antioxidantes y fibra. Pese a ser denostadas por algunos nutricionistas por su alto contenido en azúcar, estas contribuyen a una buena salud cardíaca, favorecen la salud ocular, mejoran la circulación y previenen coágulos, y tienen propiedades antiinflamatorias y antivirales.
Por último, los plátanos son conocidos por su alto contenido en potasio, un mineral esencial para la función muscular y nerviosa. Además, contienen vitamina B6, vitamina C y fibra soluble que ayuda a regular el tránsito intestinal. Estos aportan energía de manera rápida y saludable, regulan la presión arterial gracias a su potasio, mejoran el estado de ánimo (favorecen la producción de serotonina), y ayudan a prevenir calambres musculares, especialmente en deportistas.
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