LUJO

El último capricho de Sergio Ramos y Pilar Rubio: de una barbacoa en su barco a la carne de oro de 1.000 euros

El futbolista y la presentadora de televisión se han desplazado hasta Dubái para disfrutar de sus vacaciones y degustar la carne del Salt Bae.

Pilar Rubio y Sergio Ramos.
Pilar Rubio y Sergio Ramos. @pilarrubio

El verano ya está aquí, y algunos futbolistas ya están disfrutando de sus vacaciones después de una larga temporada. Uno de ellos es Sergio Ramos, quien ha aprovechado sus días libres para pasar más tiempo junto a Pilar Rubio y sus hijos, Sergio, Alejandro, Marco y Máximo Adriano.

Unas vacaciones para las que la familia ha hecho las maletas y se ha desplazado hasta Dubái, compartiendo imágenes de cómo están siendo sus días lejos de España y Francia, y dejando ver algunos de los caprichos que se están dando.

El central del Paris Saint Germain y la presentadora han aprovechado el buen tiempo para pasar unos días en su barco, en el que, tal y como han demostrado en sus redes sociales, parecen tener de todo, desde una zona de gimnasio, con máquinas en las que se ha entrenado el futbolista, hasta una barbacoa portátil con chef propio a ras del agua.

Ramos y Pilar Rubio disfrutando de una barbacoa en su propio barco
Ampliar
Ramos y Pilar Rubio disfrutando de una barbacoa en su propio barco

Más carne, pero bañada en oro

Este no ha sido el único capricho que se ha dado la feliz pareja, sino que también han aprovechado su estancia en Dubái para visitar uno de los restaurantes más famosos del mundo, el Salt Bae, por el que ya pasó anteriormente el futbolista, y en el que también han estado otras estrellas mundiales como Thibaut Courtois y Karim Benzema, entre otros.

Sergio Ramos y Pilar Rubio disfrutando del chuletón bañado en oro de Salt Bae.
Ampliar
Sergio Ramos y Pilar Rubio disfrutando del chuletón bañado en oro de Salt Bae.

Sergio Ramos y Pilar Rubio han querido disfrutar de su característica carne, la cual va bañada en oro. Un chuletón que es preparado en plena mesa, cortado en trozos finos y en el que se adereza con sal desde las alturas. Un manjar que no está al alcance de todos los bolsillos, y es que tiene un coste de 1.000 euros. Una velada que también han querido dejar para el recuerdo con una publicación en sus stories de Instagram, donde se les ve a ambos mordiendo el hueso tras haber disfrutado de su lujoso chuletón.