MÚSICA

Salen a la luz los diarios íntimos de Amy Winehouse

Con motivo del que sería el 40 cumpleaños de la artista, fallecida hace más de una década, ven la luz fragmentos íntimos de sus cuadernos personales.

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Salen a la luz los diarios íntimos de Amy Winehouse

Amy Winehouse falleció el 23 de julio de 2011, hace ya más de una década, y con motivo de que sería su 40 cumpleaños, el próximo 14 de septiembre, sus padres han sacado a la luz fragmentos de sus diarios de adolescente, con sus reflexiones y pensamientos más íntimos.

La vida de la cantante, quien falleció de forma accidental según las autoridades británicas, estuvo marcada por la música, aunque también por las drogas y el abuso del alcohol. Ahora, en The Telegraph, sus padres, Mitch y Janis, han compartido con sus seguidores aquello que pasaba por la cabeza de la artista de éxito mundial.

“Estoy contenta de ser diferente. No es como si quisiera ser como todos los demás. Me encanta tener mi propio estilo individual. Me encanta ser ruidosa y hablar con la gente. Es como soy”, escribía la cantante.

“A veces me pregunto si hay alguien, algún tipo por ahí que esté tan loco como yo. ¿Un buen chico con cabello oscuro, que usa gafas para leer y es un verdadero chico indie? Piercings opcionales, ¡preferiblemente con acento escocés o irlandés!”, relataba sobre el que sería el perfil de su chico ideal. “¿Y por qué todos los amigos de mi hermano encajan en esta descripción, pero soy demasiado joven para hacer algo al respecto?”, agregaba.

“A veces me pongo violenta con los que amo”

El carácter de Amy Whinehouse era tan arrollador que ella misma era consciente de ello. Así lo recoge en sus publicaciones íntimas: “Odio mi temperamento. A veces me carcome tanto que me pongo físicamente violenta con los que amo. Por mucho que diga ‘lo siento’, es algo que nunca podrán olvidar”.

Una dura tarea

Los padres de la cantante han confesado lo difícil que ha sido para ellos bucear en los textos de su hija para compartirlos con sus seguidores, por la cantidad de carga emocional que tenía la tarea y por el miedo a encontrar “mucho tormento o miseria”.

“No sabemos con certeza si componer se convirtió o no en una catarsis para Amy, pero ciertamente fue un proceso creativo al que volvió una y otra vez en sus períodos más felices, así como en sus momentos más oscuros de adicción”, cuentan.

“Doce años después de su muerte, mirar hacia atrás en estos dibujos y garabatos todavía nos hace sonreír, al igual que lo hizo Amy. Por supuesto, no podemos blanquear su historia. Sí, era adicta y sí, su vida era caótica. En última instancia, sus adicciones le robaron a ella y a nosotros su vida. Pero esos son tiempos en los que no nos detenemos”, agregan.