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¿Por qué se llama tortilla española y cuál es el origen del nombre?

Uno de los más famosos platos de la gastronomía en España es la tortilla de patatas, la cual es también uno de los más deseados por los turistas.

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La tortilla de patata es uno de los alimentos más icónicos de la gastronomía española.

¿Con cebolla o sin ella? esta resulta ser una de las principales preguntas cuando hablamos de la tortilla de patatas, también conocida como tortilla española, y es que muy pocas personas pueden llegar a resistirse a uno de los platos más típicos de nuestro país, y uno de los más deseados por los turistas.

Un plato que ha sido vendido en mil y una versiones diferentes, cambiando alimentos y añadiendo otros, como por ejemplo la propia cebolla, que terminan por romper el significado de la tortilla en sí. Además, ha sido imitado en todo el mundo.

¿Qué es la tortilla de patata?

En primer lugar, para entender la historia de uno de los platos más característicos de nuestra gastronomía, hay que definirlo. Según la Real Academia de la Lengua (RAE), la tortilla es un “alimento preparado con huevo batido, cuajado con aceite en la sartén y de forma redonda o alargada, al que a veces se añaden otros ingredientes”. No se queda ahí, ya que especifica que es española si es aquella “en la que se cuajan huevos con patatas previamente fritas”.

Más allá de esta definición, el Diccionario de Gastronomía va un paso allá. Esta obra habla de esta oferta gastronómica como un “plato emblemático elaborado con patatas pochadas en aceite y, generalmente, cebolla. Cuando se elabora con pimiento u otros ingredientes se denomina paisana. Las patatas se fríen cortadas en rodajas, se escurren, se mezclan con huevo batido y se cuajan a fuego lento en la sartén, dándoles vueltas para que no queden secas por dentro. El resultado es una masa consistente, de color amarillento, con forma de disco circular, de base y superficie planas, y de unos 5 cm de grosor. Debido a su popularidad, se celebran numerosos concursos de tortillas cada año en toda España”.

¿Cuál es el origen de tortilla de patata?

Sin embargo, muy poco se conoce de la tortilla de patatas tradicional y su origen español, primando leyendas como la de que fue inventada en Extremadura en el año 1798, cuando una campesina hizo el encargo del general Tomás de Zumalacárregui, quien buscaba un alimento nutritivo y barato para sus tropas instaladas en Bilbao en la Primera Guerra Carlista.

Por suerte, el experto Javier López Linage, a través de su investigación en 2008, negó que esta historia fuese cierta, y reveló que el origen de la tortilla de patatas se dio en Villanueva de la Serena a finales del siglo XVIII, conservando aun así el nombre de la tortilla española.

Por otro lado, el periodista gastronómico Jorge Guitián ha aportado una nueva versión sobre el nacimiento de la tortilla de patatas. Según Guitián, “nace en algún momento de finales del S.XVI, probablemente de manera simultánea en los Países Bajos y en las comunidades de judíos conversos que todavía existían en España, como alimento humilde, de supervivencia. Y así se mantiene, al margen de la cocina ‘culta’, al menos hasta la segunda mitad del S.XIX, momento en el que se codifica (hacia 1890) y adquiere la denominación de tortilla española

La tortilla, toda una novedad en la antigüedad

Las patatas siempre han sido consideradas como un alimento barato, posible para todo tipo de bolsillos. Tras ello, comenzaron a servirse las famosas tortillas de patatas, siendo toda una novedad de la época, incluso en los medios, quienes hicieron alarde del origen, dándole el nombre de la tortilla española, como es el caso del diario El Observador, que, en enero de 1953 apuntó que “todos los artificios extranjeros caerán por su base ante unas patatas fritas a la española, ante una tortilla al uso del país rellena del nutritivo manjar en todas sus condiciones naturales”.

Sin embargo, antes del apunte de El Observador, Carmen de Burgos incorporó a su recetario, ‘La Cocina Moderna’, datado en el año 1938, la tortilla de patata. Este libro define la manera de elaborar el plato en un proceso en el que “se fríen las patatas, sazonadas con sal y tapadas, con bastante aceite, y moviéndolas con frecuencia para que formen una masa jugosa. Así que están fritas se les echan los huevos batidos, se revuelven bien, se forma la tortilla y se sirve”.