Kanye West la vuelve a liar y Twitter suspende su cuenta

Kanye West siempre ha estado estrechamente vinculado al concepto de controversia. El rapero y esposo de Kim Kardashian es experto en protagonizar polémicas y su comportamiento a menudo extravagante le coloca cada dos por tres en el centro de la diana mediática. Pero en los últimos meses, el cantante parece estarse superando a sí mismo.

Tras anunciar su candidatura oficial a las elecciones presidenciales de los Estados Unidos del próximo 3 de noviembre, West ha empalmado un escándalo tras otro, hasta el punto de que comenzó a comentarse que su conducta errática era producto de un episodio bipolar. Y desde entonces, los rumores sobre el hartazgo de Kim Kardashian y la creciente brecha en el matrimonio se han ido alternando con sus siempre incendiarias declaraciones públicas y alarmantes llamadas de atención.

La última locura del cantante llegó hace solo dos días, cuando compartió en sus redes sociales un vídeo en el que parecía estar orinando sobre un premio Grammy y que decidió publicar a raíz de las disputas que mantiene actualmente con los sellos discográficos con los que tiene firmado contrato, Sony y Universal. Y pocas horas después de estas escatológicas imágenes, el rapero ha sido oficialmente expulsado de Twitter, aunque las razones detrás de ello no tienen que ver con el episodio del Grammy.

El motivo de que la plataforma haya decidido suspender su cuenta durante 12 horas se encuentra en la violación cometida por el artista en cuanto a las normas de privacidad de la red social se refiere. Y es que, en uno de los muchos tuits acusatorios que ha lanzado a diestro y siniestro en los últimos días, West incluyó el número de teléfono privado de un editor de la revista 'Forbes'. Y publicar información personal de terceros va en contra de las reglas de uso de Twitter.

El exjugador de la NBA Rick Fox ha sido el encargado de informar de la desaparición temporal de West dentro de la esfera virtual: "Mi amigo @kanyewest quiere que todos vosotros sepáis que fue expulsado de @Twitter durante doce horas", comunicó a través de un mensaje en la propia red social azul. Ahora solo cabe esperar a lo que dirá el rapero cuando regrese. Porque una cosa está más que clara: West no está acostumbrado a callarse. Así que es muy probable que esta prohibición tan solo le anime a continuar disparando en todas las direcciones.