BRASIL

La mujer de Luiz Adriano denuncia amenazas de muerte por casarse "con un negro"

La modelo Ekaterina Dorozhko se ha sumado a las protestas por la muerte de George Floyd desvelando que sufrió comentarios racistas con el brasileño.

Actualizado a
La mujer de Luiz Adriano denuncia amenazas de muerte por casarse "con un negro"

La muerte de George Floyd a manos de un policía en Minneapolis ha desatado unas contundentes protestas en Estados Unidos y varios puntos del resto del mundo que exigen que de una vez por todas se erradique el racismo de la sociedad, especialmente de la norteamericana. Futbolistas, cantantes, músicos y actores se han sumado a las manifestaciones, y el pasado martes muchos utilizaron sus redes sociales para dejar clara su postura contra el odio.

Una de las últimas personas que ha alzado la voz ha sido Ekaterina Dorozhko, una modelo rusa que está casada con el brasileño Luiz Adriano, internacional en cuatro ocasiones por su país y jugador de clubes como el Milan, el Shakhtar Donetsk, el Spartak de Moscú o el Palmeiras, en el que milita actualmente a sus 33 años. La joven ha confesado a través de una publicación en sus redes sociales que sufrió amenazas de muerte y mensajes contra su familia por haberse casado con un hombre negro. Cabe señalar que ambos se conocieron durante la etapa del futbolista en el Spartak y enseguida se enamoraron. Luiz Adriano se divorció de la madre de sus tres hijos y el pasado mes de noviembre se casó con la modelo.

"Voy a hablar ahora sobre un tema que probablemente es muy doloroso en este momento. Me duele el corazón con lo que está pasando en el mundo y agradezco a mis padres la educación y la visión del mundo que me dieron. Nunca he separado a la gente por el color de la piel, por el color del pelo o por su estatus. Para mí, todos somos iguales, todos tenemos el mismo final. La mitad de mi familia es negra y los amo a todos. Tenía miedo de que no me aceptaran porque soy rusa y tengo una mentalidad diferente, toda mi vida es muy diferente", comenzó expresando.

"Al principio, cuando iba al fútbol en Brasil, la gente tuvo el valor de gritarme: 'Mira, por ahí viene la rusa'. Todos los días, durante mucho tiempo, recibí mensajes donde me deseaban la muerte o enfermedades para mis padres. Prometían encontrarme, golpearme y muchas otras cosas terribles, porque estoy casada con un hombre negro. Tengo suerte porque tengo nervios de acero y le dejé de prestar atención", continuó.

"Una pregunta: ¿por qué tanta crueldad en la gente? Después de todo, amor y amistad no conocen color. Si el infierno y el paraíso existen, entonces el infierno está aquí en la Tierra. Deseo, sueño que todos nos volvamos más amables, más sabios, porque el futuro depende de nosotros", concluyó, lamentando profundamente que todavía exista tanta gente que desprecie a otros por su color de piel.