D.E.P.

Muere por coronavirus Alfonso Cortina, expresidente de Repsol

El empresario ha fallecido a los 76 años en un hospital de Toledo, donde había sido ingresado después de mostrar síntomas de la enfermedad.

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Muere por coronavirus Alfonso Cortina, expresidente de Repsol

Alfonso Cortina, expresidente de Repsol, ha fallecido esta mañana por coronavirus. El empresario, que contaba 76 años de edad, se encontraba ingresado desde el pasado 25 de marzo en un centro médico de Toledo, a donde acudió días después de presentar síntomas (fiebre, tos seca, dolores musculares y cansancio), y donde terminó por quedarse debido a una insuficiencia respiratoria.

Cortina se encontraba disfrutando de una escapada en su finca de Retuerta del Tajo cuando se declaró en España el estado de alarma, lo que le obligó a permanecer en esta propiedad junto a su esposa y uno de sus dos hijos para pasar allí la cuarentena. Pese a su ingreso, tenía buen pronóstico de recuperación, ya que, según fuentes próximas a su familia había evolucionado favorablemente durante los primeros días de hospitalización.

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EFE

El empresario comenzó su extensa carrera profesional en el Banco de Vizcaya a finales de la década de los 60, primero en calidad de ingeniero jefe de los Servicios Técnicos del Banco de Financiación Industrial y, más tarde, como vicepresidente de la entidad. Pasó también por el Banco Hispano Americano y fue presidente de la Asociación Hipotecaria Española y de la Sociedad de Tasación.

En los 80, Cortina trabajó como vicepresidente y consejero delegado de Portland Valderribas (convirtiéndose en presidente años más tarde, en 1990) y fue así mismo consejero del Banco Zaragozano, y del Banco Central. En los 90 ejerció también de vicepresidente y miembro de la Comisión Delegada de GRUCYCSA y consejero de Ferrovial.

A partir de 1996 estuvo al frente de la sociedad PRODUSA y de compañías tan importantes como Repsol, de la que fue presidente entre 1996 y 2004, la inmobiliaria Colonial, entre 2004 y 2006, o de la firma de capital riesgo Texas Pacific Group.

El empresario estaba casado con Miriam Lapique y tenía dos hijos. Su gran pasión eran los vinos, y con la explotación de sus viñedos toledanos acabó por acuñar la marca Pago de Vallegarcía, que cuenta con denominación de origen.